Somos conscientes de que al principio de temporada, siempre especulando, tenemos unos candidatos fijos en la zona de PlayOffs. Este año, entre otros, Brooklyn Nets y Miami Heat radican en esta privilegiada categoría. Su roster y su trayectoria, indican en provisionales baremos establecidos por el público, que van a estar allí tras finalizar la regular season. Habiendo tantos partidos en una temporada, perder alguno de los primeros choques no supone algo que perjudique mucho a un equipo como Nets o Heat. De no hacer como los Lakers antaño, ambos conjuntos no presentan dificultades para establecerse en lo más alto de la tabla antes de llegar a la postemporada.

Encabezado en las redes sociales con el hastag #NBAOpeningNight, Cleveland Cavaliers y Philadelphia 76ers se estrenaban en la temporada 2013-14 ganando a los dos equipos antes mencionados. Lo que causa la victoria en ellos tiene un efecto contrario en cuanto a las consecuencias que crea en los otros. Como ya hemos dicho, una derrota de los de Brooklyn o de los de South Beach, a pesar de un mal inicio de la campaña, no implica más que lo propiamente dicho, solo un mal inicio. Sin embargo, una victoria para equipos que las necesitan tanto como las hormigas necesitan provisiones en invierno, incentiva un estado distinto. Es el caso de Sixers y Cavs, que en especial, ambos equipos dependerán al final de temporada de una victoria más o una victoria menos que decidirá si continúan en postseason, o por lo contrario, se van de vacaciones anticipadamente.

"Sin embargo, una victoria para equipos que las necesitan tanto como las hormigas necesitan provisiones en invierno, incentiva un estado distinto."

Por un lado, Cleveland Cavaliers presenta este año una plantilla con capacidades para asumir el mínimo de victorias y regresar a PlayOffs cuatro temporadas más tarde, después de la última vez. Sumar una victoria ante uno de los favoritos es siempre un granito más de arena, que se sumará a los otros si devienen esta temporada, capaces para alcanzar la fase de series eliminatorias.

Por otro lado, Philadelphia 76ers, con la marcha de Andre Iguodala hace dos campañas y con la despedida de su jugador franquicia Jrue Holiday este verano, todo parece ser que la actual, será una campaña de transición y reconstrucción. Con la adquisición de jóvenes promesas en el Draft, sus aficionados todavía tienen algo de esperanzas depositadas en su equipo. Asimismo, la noticia que quizás Nerlens Noel no debute, es algo que se suma a la mala suerte del equipo en estas dos últimas campañas. De todos modos, la agradable y satisfactoria sorpresa de la estelar noche de un jugador conocido ya por nombre y apellido, Michael Carter-Williams, ha despertado buenas sensaciones en el equipo. La victoria frente al actual campeón supuso un toque de atención para estos y para toda la liga. Los Sixers, muy concentrados durante todo el partido, y con una actitud e intensidad inmejorable en el primer cuarto, dejó a los Heat con un palmo de nariz. Que en su contra, la falta de concentración en partidos como este, pondrá mucho más difícil la consecución del three-peat.

Son estos los motivos para que un equipo que de entrada no está en la categoría de favorito, en la postemporada allí esté. Vencer a equipos que en el curso del ejercicio sumarán menos de treinta derrotas, suma mucho a su favor. En el caso de Cavaliers, la victoria de los Nets será una de las recordadas en los últimos momentos para clasificarse. Y en cambio, la de los Sixers más que nada, insisto, es una sorpresa. Aunque de este equipo, debido el golpe que sucumbió la liga tras el primer partido de los de Phila no sabemos si lucharán al final de la temporada regular para una séptima u octava posición de PlayOffs.