Stratos Perperoglou sigue on fire. Contra Unicaja ya realizó un partidazo con 23 puntos y, aunque la jornada pasada Valencia supo frenarlo, jugando en casa ha vuelto a demostrar su gran estado de forma. 18 puntos en la primera parte para 18 de valoración, con un 5 de 7 en tiros de dos y un 2 de 2 en triples. En el tercer cuarto pasó más desapercibido, pero en el último anotó 5 importantes puntos para acabar con 26. El jugador griego no tiene tres Euroligas en su palmarés simplemente por haber estado en grandes equipos, sino por haber sido uno de los jugadores europeos importantes de los últimos años.
Pero delante tenía a Bojan Dubljevic, posiblemente el mejor jugador histórico de la Eurocup. El montenegrino es el máximo anotador histórico, así como el líder en rebotes ofensivos, segundo en defensivos y totales y en valoración. Y hoy entró al partido con ganas de demostrar su status y seguir sumando. En la primera parte anotó 15 puntos, cogió 4 rebotes, dió 3 asistencias y valoró 17. En el tercer cuarto lideró el despegue de Valencia con 9 puntos más (48-60) y cuando se sentó fue cuando Estrella Roja se acercó (58-62). En ese momento llevaba ya 24 puntos, 8 rebotes y 28 de valoración. En el último cuarto Valencia no consiguió encontrarlo tanto, pero aún así surtió bien de balones a sus compañeros y acabó con 5 asistencias.
Los cambios de balonmano y Sam Van Rossom. Como otras muchas veces, el base belga fue el encargado de anotar la canasta decisiva a falta de 4 segundos para acabar el partido. Pero para llegar a esa situación, Ponsarnau jugó su particular partido de balonmano metiendo y sacando a jugadores como Matt Thomas, Diot, Doornekamp y Sastre, según tocara atacar o defender. Le salió perfecto con el dos más uno que consiguió Iceman previo a la canasta de Sam y la grandes defensas de Sastre que además recuperó el balón definitivo.
The shot that won it for @valenciabasket!#7DAYSMagicMoment pic.twitter.com/p2Hw410vfM
— EuroCup (@EuroCup) 23 de enero de 2019
Bojan Dubljevic entró al partido como quien se sabe el mejor jugador de la historia de esta competición y produjo los doce primeros puntos de su equipo, incluyendo dos triples consecutivos y una asistencia a Labeyrie. Gracias a eso Valencia marcaba las primeras diferencias con un 6 a 14. Pero la aparición de Perperoglou cambió la dinámica, con el alero griego anotando 6 puntos y rebajando la diferencia al 17 a 21 al final del primer cuarto.
El segundo período fue muy igualado y con un gran acierto en el tiro por ambos equipos, tanto triples como de dos puntos. El tres veces campeón de la Euroliga entraba en ebullición y con 12 puntos más ponía a los suyos por delante a pesar del trabajo de Dubljevic y Will Thomas, que le ayudaba con 6 puntos. Los serbios se fueron al descanso 2 arriba, que pudieron ser más pero otra vez el montenegrino anotó de 3 para el 44 a 42.
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Ragland y Abalde cogieron protagonismo tras el descanso y un 7 a 0 donde solo anotó el alero gallego devolvió la delantera a los taronja. Dubljevic, ¿quién si no?, volvió a liderar y consiguió aumentar las ventajas a 12 puntos (48-60) pero cuando se fue al banquillo, los serbios aprovecharon para acercarse con un parcial de 10 a 2.
El último cuarto fue un toma y daca constante con Ragland y Ristic haciendo daño por parte local y Will Thomas y Mike Tobey por los visitantes. Una asistencia de Dubljevic a Will daba un respiro poniendo cuatro arriba a Valencia, pero Perperoglou volvía a aparecer con un triple para poner la mínima otra vez. Un dos más uno de Covic ponía el 79 a 77 pero Matt Thomas lo contestaba con otra acción de falta y canasta. Joe Ragland adelantaba a Estrella Roja a falta de 16 segundos pero ahí estaba Sam Van Rossom para el 81 a 82 a falta de 4 segundos. Buena defensa valenciana en la última jugada con Sastre robando el balón definitivo.
