Con Laprovittola desactivado y dominio en la zona, Madrid vivirá otro clásico

Hoy no fue ayer Laprovittola: Mucho mejor defendido y con la 'x' marcada en los apuntes de Laso, tuvo siempre encima a perros de presa como Causeur, Taylor o Carroll. Desaparecido y agotado por el esfuerzo de ayer, se le vio inactivo mentalmente para intentar canastas circenses como las de ayer. Acabó con 14 puntos y 7 asistencias pero con una tarjeta de 5/17 y 7 pérdidas.

Fiesta en la pintura verdinegra: 44 rebotes capturó Real Madrid, de los cuales 21 fueron en cancha de ataque. Joventut no pudo hacer nada con ninguno de los interiores merengues que se 'hincharon' a obtener rebotes y anotar casi sin oposición en la zona de Joventut. La diferencia física y técnica era abrumadora y Laso lo sabía. 

No Llull, no Rudy: Nefasto partido de los internacionales españoles, especialmente en el tiro. Mientras que el alero se salvó gracias a su esfuerzo defensivo, Llull tuvo un encuentro para olvidar en todos los aspectos. La estadística no miente y deja un panorama desolador: Rudy acabó con 1/11 en tiros (-4 de valoración) mientras que Llull cerró con 3/13 (-2 de valoración). 

Volvían un día después al WiZink Center Real Madrid y Divina Seguros Joventut para completar la segunda semifinal de esta Copa del Rey 2019. Con el récord de Laprovittola reciente, la consigna en los de Laso era clara: evitar que Laprovittola entre en juego. Jeff Taylor primero y Fabien Causeur más tarde no permitirían que el argentino tocara ni siquiera la bola. Los blancos aprovecharían este factor y el incontestable dominio en el rebote -14 en este cuarto con 7 ofensivos- para controlar el encuentro en este primer asalto. Aún así, Joventut plantaba cara a los locales situándose por delante tras dos canastas de Harangody (10-11, min. 4). Se pondría las pilas Real Madrid, con Ayón como piedra angular, logrando una racha de 11-2 que obligaría a los badalonins a ir a remolque el resto del partido. La labor de Todorovic era meritoria pero le faltaban puntos y Laprovittola (1/5 TC y -1 de valoración) no iba a encontrar hoy la libertad de la que gozó ayer. Era el montenegrino el que convertía una bandeja en el último segundo que dejaba a los suyos 8 abajo (26-18).  

En el sistema de rotación que tenía preparado Laso para Laprovittola llegaba el turno de Jaycee Carroll. El americano no echaría por tierra el buen trabajo hecho por sus compañeros previamente y sería la sombra del base. Además, Walter Tavares hacía acto de presencia, y de qué manera. Era el amo y señor de la pintura, recogiendo 5 rebotes ofensivos de manera consecutiva hasta que el propio interior logró acabar el ataque infinito de los merengues (34-23, min.15). Se quería apuntar Felipe Reyes a la fiesta que había en la zona verdinegra y sumó 5 puntos seguidos que dejaba un panorama muy parecido al del derbi en el día de ayer. Conforme llegaba el descanso se animaban los de Carles Durán y con dos triples consecutivos de Conor Morgan se volvían a meter en el partido. La diferencia no superaría los diez puntos en los últimos dos minutos aunque la sensación era que los madrileños dominaban a placer en todos los rincones de la pista. Se cerraba la primera parte con dos tiros libres de Randolph y un marcador de 48-38. 

No cambiaría mucho el guión que se había establecido en la primera parte por parte de los blancos, controlando excelentemente bien el tempo del partido. Ayón volvería para seguir estorbando a sus rivales y Deck añadiría un problema más a la lista de cuestiones a resolver a Carles Durán. Con los verdinegros anotando a tirones, en una de las rachas de las que gozaban se acercarían a 6 puntos tras un triple de Ventura (54-48, min. 25). Los locales nunca se verían amenazados sobre el papel y un nuevo parcial de 12-0 dejaría claro quién tenía todos los visos para clasificarse. Se llegaba a los últimos diez minutos con un resultado parcial de 71-52 que prácticamente dejaba sentenciado la clasificación de los blancos.

El último cuarto confirmaría el buen hacer del que Conor Morgan venía haciendo gala desde unos minutos antes. Con dos triples consecutivos -tercero y cuarto del partido respectivamente- el americano intentaba acercar a los suyos. Pero Randolph era el que entraba a escena para desarticular la proposición rival. Esto es el Real Madrid, al final te puede 'matar' de varias maneras distintas y el rival tiene que tener el mismo fondo de armario para poder luchar de "tú a tú". A pesar de la insistencia de Morgan, los merengues, aupados por su afición, se dedicaron a administrar la renta en unos minutos finales en los que Joventut luchaba más con el corazón que con las piernas. Campazzo mandaba en la cancha y el Real Madrid en un marcador que finalizaría con un 93-81 que podría haber sido superior. La capital vivirá un nuevo clásico copero mañana después de que no hubiera sorpresas hoy.