A pesar de que era un secreto a voces, la confirmación de que Radovic vuelve a Murcia va a disparar la ilusión de la afición pimentonera. Nemanja trazó un recuerdo formidable durante las tres temporadas y media que vistió la camiseta universitaria. Integrante de la plantilla que logró la clasificación para las eliminatorias ACB de 2016, disfrutó también de la primera participación del Club en Eurocup. Antes de iniciar su periplo por Santiago y Zaragoza, tuvo tiempo para desplegar todo su talento en el Palacio de los deportes.
En principio, el caché del montenegrino quedaba fuera de las posibilidades de UCAM Murcia. Su facilidad para jugar de espaldas a canasta o para echar el balón al suelo en busca del aro rival le convierten en un 4 clásico adaptado al baloncesto moderno. Por compromiso y entrega, Radovic debería tener hueco en equipos consolidados en el Play Off. Ahí es donde entra en juego la sinergia entre ciudad y jugador, aderezada siempre por el buen hacer de Alejandro Gómez y del resto del Club. Una relación que ha evitado incluso que Zaragoza lo incluya en el tanteo. Firma por una temporada con opción a otra.
Las expectativas son altas, pues a su innegable calidad se suma la identificación con el escenario, al que llegó por primera vez con tan solo 23 años, allá por 2014. En este caso la adaptación está más que superada. Además, y si se siguen confirmando los rumores como hasta ahora, acompañará a un viejo conocido en el liderazgo del nuevo proyecto: Augusto César Lima. Palabras mayores en el mercado post pandemia.
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— UCAM Murcia (@UCAMMurcia) July 4, 2020