60 puntos en la pintura y solo 5 triples convertidos. Los números son tan elocuentes como inusuales para los tiempos que corren en la NBA. Lo más increíble es que ese registro le pertenece al equipo que está a un paso de ganar el campeonato esta temporada, en pleno auge del triple.
El tercer partido de las finales de la NBA tuvo una tónica clara: los Nuggets atacando la pintura. Esa ofensiva interior estuvo encabezada casi en su totalidad por Nikola Jokic y Jamal Murray. El binomio se mostró imparable en ese juego, mientras que en el último partido demostraron que tenían aún más recursos para quebrantar una defensa sólida como la de Miami Heat.
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LA ESTRATEGIA DE DENVER NUGGETS PARA IMPONERSE 3-1 EN LAS FINALES DE LA NBA
El último partido no tuvo a Jokic y a Murray como ejes principales. Al contrario, fueron los jugadores de rol los que pusieron contra las cuerdas a los de Florida. ¿Cómo lo hicieron? Con cortes hacia el aro, juego sin balón y movimientos inesperados. De esa manera, la zona de Miami se vio vulnerada y las ayudas defensivas no pudieron controlar a los atléticos aleros de Denver.
El cuarto partido, que finalizó con una contundente victoria de los Nuggets en Miami, tuvo 13 conversiones provenientes de cortes hacia el aro (la mayor cantidad lograda por Denver en la temporada). Eso quiere decir que no leyeron a tiempo las intenciones de los de Michael Malone.
La medicina fue peor que la enfermedad para el Heat. La defensiva fue férrea y agresiva, pero esas mismas características trajeron más problemas que soluciones, brindando demasiados dividendos a unos Nuggets que entendieron perfectamente lo que tenían que hacer para contrarrestar ese enérgico sistema defensivo.
Mientras los jugadores del Heat marcaban con ayudas, es decir, dos jugadores contra Jokic y Murray (evitando que ellos dos anotaran como en el partido anterior) los aleros Aaron Gordon y Michael Porter Jr. se hicieron un festín.
Como los de Florida estaban tan preocupados en marcar al hombre con balón, el jugador sin balón gozaba de mucho espacio libre. Sólo tuvieron que leer las jugadas y estar atentos para aparecer en el momento justo, correr hacia el aro y sortear la zona establecida. Por eso, Gordon terminó con 27 tantos, Bruce Brown con 21 y Porter Jr. con 11. Sí, todos actores secundarios.
El tópico de la serie parece ser esperar a que Miami Heat elija su veneno. Intentaron marcar con dos hombres a Jokic en la pintura y no funcionó debido a que Murray estuvo inspirado, luego eligieron defender con cortinas directas y Jokic se las arregló para anotar desde el triple o de media distancia; y por último incorporaron la doble-marca contra Murray y Jokic y los Nuggets explotaron el juego sin balón con sus veloces aleros.
MIAMI HEAT CONTRA LA HISTORIA
Parece ser que el Heat no puede leer el próximo movimiento de Denver y que los Nuggets se llevarán la serie aprovechando al máximo su abanico de recursos. El lunes podrían terminarse las finales de la NBA o quizás, Miami pueda ajustar a tiempo para estirar más el prólogo. Ahora, los de Colorado dominan por 3-1. Recordemos que un sólo equipo dió vuelta ese resultado en unas finales de la NBA: los Cleveland Cavaliers de LeBron James en 2016.
