Una época de cambios en los GSW
Tras años acumulando fracasos, en verano del 2010 llegaba una bocanada de aire fresco a la bahía. El 15 de Julio de ese mismo año, GSW SPORTS LLC, un grupo de empresarios con Joe Lacob y Peter Guber a la cabeza, se hacían con la mayoría accionarial de la franquicia de Oakland por una cifra aproximada de 450 millones de dólares. Una cantidad estratosférica que suponía un nuevo récord en la venta de una franquicia, después de que Robert Sarver pagara 401 millones de dólares en 2004 para adquirir los Phoenix Suns.
De este modo se ponía punto y final a una de las etapas más negras en la historia de los Warriors. Había llegado el fin de la era de Chris Cohan, el peor propietario de franquicia, según la revista Forbes.
Desde que adquirió la franquicia en 1994 después de desembolsar 119 millones de dólares, no hizo más que acumular fracasos. Una sola postemporada en 16 años.
Si lo normal en una franquicia es ir pasando por diferentes etapas o ciclos, como pueden ser, el fracaso, la reconstrucción y el auge, los Warriors de Cohan solo conocieron las dos primeras fases. Tras cada fracaso, venia una reconstrucción, pero le seguía un nuevo fracaso, seguido a su vez de una nueva reconstrucción, convirtiéndose así en un bucle en el que no se atisbaba salida posible.
Hacía falta un nuevo capitán al frente del barco, alguien capaz de reflotar una nave que hacía años había vivido momentos de gloria.
Los encargados de coger el timón iban a ser Joe Lacob y Peter Guber, las puntas de lanza del nuevo proyecto. El desembolso fue ampliamente criticado por los grandes analistas económicos, debido al flojo rendimiento y pálida imagen de la franquicia en el momento de la compra. Pero los nuevos propietarios tenían en mente la construcción de unos nuevos Warriors, unos que devolvieran a la franquicia a lo más alto de la NBA.
Tras el título del 2015 y el récord de 73 victorias y 9 derrotas del año pasado, parecía que lo habían conseguido, que habían construido una maquina perfecta, invencible. Pero justo cuando estaba a punto de finalizar el trabajo, colapsó. Tras ir 3-1 en las finales y con el factor cancha a favor, tuvo un cortocircuito que echó por tierra toda la labor de un año, demostrando que aquella maquina no era perfecta.Las cosas así, los Warriors decidieron hacer unos pequeños cambios para mejorar lo que tenían. Adquirieron a Kevin Durant en el mercado libre, aunque para ajustar el engranaje tuvieron que deshacerse de piezas importantes como Andrew Bogut, Harrison Barnes o Festus Ezeli.
Tras un largo verano, al fin llegó el momento de ver a los Warriors 2.0. Pero las cosas no empezaron como se esperaba, para alegría de muchos. Los Warriors caían estrepitosamente en el partido inaugural frente a los Spurs y harían lo propio frente a los Lakers unos días después. La nueva maquina no acababa de funcionar. Habían perdido profundidad de banquillo y protección de aro. Había que calibrarla y engrasarla, por lo que Steve Kerr se puso manos a la obra.
Ahora, un mes después, los Golden State Warriors ya mandan en la NBA. Con un 84.2% de victorias (16-3) están en guarismos de volver a repetir las 73 victorias del curso pasado.
ATAQUE
Son el equipo que más anota y asiste por partido con 117.6 puntos y 31.1 asistencias respectivamente. Si el cálculo lo hacemos por cada 100 posesiones, nos da un Rating Ofensivo de 114.6 puntos (primeros) y un Rating Defensivo de 101.5 puntos, (son ya la 8º mejor defensa del campeonato) con un Net Rating de 13 puntos (el mejor).
RATING OFENSIVO: 114.6 RATING DEFENSIVO: 101.5 NET RATING: 13
Pero si cogemos los últimos 12 partidos nos damos cuenta de que los números todavía son mejores. Promedian 118.4 puntos por cada 100 posesiones, mientras que en defensa encajan 100 puntos, lo que da un espectacular Net Rating de 18.4 puntos. Frente a los Lakers llegaron a repartir la friolera de 47 asistencias sobre 53 canastas, logrando el récord de la franquicia e igualando los 47 pases de canasta que dieron los Suns en 1991. El 73.6% de las canastas son asistidas (71.7% si tenemos en cuenta los 18 partidos). Reparten 2.1 asistencias por cada balón que pierden.
Con un 50.2% en tiros de campo y un 57.2% en tiros de campo efectivos, lideran ambos apartados y son terceros en porcentajes de tres con un 38.4%, siendo el segundo equipo que más triples anota (218). Pese a ello, con 46 puntos por noche, son el quinto equipo que más encesta en la pintura.
| 18 PARTIDOS (CADA 100 POSESIONES) | ÚLTIMOS 12 PARTIDOS (CADA 100 POSESIONES) | |
|---|---|---|
| RATING OFENSIVO: 114.6 | RATING OFENSIVO: 118.4 | |
| RATING DEFENSIVO: 101.5 | RATING DEFENSIVO: 100 | |
| NET RATING: 13 | NET RATING: 18.4 | |
| CANASTAS TRAS ASISTENCIA: 71.7% | CANASTAS TRAS ASISTENCIA: 73.6% | |
| TIRO EFECTIVO: 57.2% | TIRO EFECTIVO: 59% | |
| TIROS DE CAMPO: 50.2% | TIROS DE CAMPO: 51% | |
| TRIPLES: 38.4% | TRIPLES: 42.3% | |
| TAPONES: 6.4 | TAPONES: 7 | |
| ROBOS: 9.1 | ROBOS: 8.9 | |
| RITMO: 102.97 | RITMO: 101.96 |
DEFENSA
Si estos Warriors despiertan alguna duda, es en defensa. Pues bien, son el equipo que más tapones pone por partido (6.6) y el segundo que más balones roba (9.4). Sus rivales anotan un 43.2% de tiros de campo (segundos) y un 32.9% de tiros de tres (terceros) cuando tienen a los Warriors delante. Aquí destacan especialmente Draymond Green y Kevin Durant. El primero reduce en 6.2% los tiros de campo del rival y en 3.6% los tiros de tres, mientras que Durant reduce en 5.8% los tiros de campo y en 4.9% los triples.
Han perdido a dos grandes protectores del aro como Andrew Bogut o Festus Ezeli y trabajan para suplir esas carencias mediante ajustes defensivos. No obstante, JaVale McGee está siendo una grata sorpresa en este inicio de temporada y pese a jugar tan solo 6.8 minutos, está promediando 4.1 puntos y 1.9 rebotes, además de 0.7 tapones. Si lo comparamos por cada 36 minutos jugados con Festus Ezeli, las estadísticas de McGee (21.9 pts, 10.2 rb y 3.8 tap) son mejores.
BANQUILLO
El banquillo, otra de las “debilidades” de estos Warriors, pese a ser de los que menos juega con 17.7 minutos y de los que menos puntos anota (28.8) (anotan más que el banquillo de los Cavaliers), son el segundo con mejor Net Rating (9.4). Si lo comparamos con los datos de la temporada anterior, la diferencia no es tan drástica, ya que el pasado curso el banquillo de los Warriors promedió 33.7 puntos (5 más que este año) en 18.3 minutos.
Pese a perder a hombres como Festus Ezeli, Marreese Speights o Leandro Barbosa, los de Steve Kerr han conseguido mantener a Shaun Livingston (17.3 minutos) e Andre Iguodala (24.1 minutos), además de incorporar a jugadores de la talla de David West o recuperar a un jugador como Kevon Looney (rookie del pasado curso y que ha estado lesionado de larga duración) que puede jugar en 3 posiciones. El Head Coach de la bahía, nombrado entrenador del mes en la Conferencia Oeste, cuenta con un amplio abanico de posibilidades desde el banquillo y ya ha declarado que solo los miembros del "Big Four" tienen el puesto asegurado. Los minutos del resto dependerán del partido y del rival.
ALINEACIONES
Las aliniaciones que más utiliza Steve Kerr son las siguientes:
| QUINTETO | ESTADÍSTICAS |
|---|---|
| Curry / Thompson / Durant / Green / Pachulia | 202 minutos Rating Ofensifo: 115.8 Rating Defensivo: 101.8 |
| Curry/Thompson/Durant/Iguodala/Green | 80 minutos Rating Ofensivo: 125.7 Rating Defensivo: 94.1 |
| Livingston/Thompson/Durant/Iguodala/West | 76 minutos Rating Ofensivo: 118.9 Rating Defensivo: 100.4 |
Que los Warriors están cambiando la forma de entender el baloncesto es un hecho. El año pasado Steve Kerr demostró que se podía jugar sin el clásico pívot. El técnico utilizó a 5 hombres pequeños, el famoso small-ball, con Curry, Thompson, Barnes, Iguodala y Green (tercer quinteto más usado) con unos números brutales (Rating Ofensivo: 142 y Rating Defensivo: 95). Tales fueron sus números que al quinteto se le denominó el quinteto de la muerte.
Este año la idea sigue siendo la misma, jugar con 5 pequeños (Durant en vez de Barnes). De momento los números que están obteniendo no se acercan a los del año pasado (practicamente imposible), pero con el "Death Lineup" el Rating Defensivo es de 94.1, mejor que el de culaquier equipo de la liga.
BIG FOUR
Había dudas de como se acoplaría Durant a este equipo y de si habría tiros suficientes para todos. De momento entre Curry, Thompson, Durant y Green meten el 72% de los puntos que anota el equipo cada noche, mientras que el cuarteto del año pasado (Barnes por Durant) anotaba el 64% de los puntos.
Si alguien está teniendo menos protagonismo en ataque, ese es Draymond Green. El todo terreno de los de Oakland está empeñado en ser defensor del año y se está empleando a fondo para lograrlo. Pone 1.8 tapones por partido y captura 8.6 rebotes. Además es el máximo asistente de su equipo con 6.9 asistencias por encuentro. Pese a anotar menos, el de Michigan es imprescindible en los esquemas de Steve Kerr. Además de destructor es un generador nato.
Por su parte, Durant parece que lleva toda la vida jugando en los Warriors. El ex de los Thunder promedia 27.1 puntos, 8.4 rebotes y 4.7 asistencias y unos porcentajes de escándalo (57% tiros de campo y 44.2% triples). Pese a ser una estrella no le importa defender y es fundamental en los ajustes defensivos que plantea el entrenador. El único partido en el que Green no jugó, puso 6 tapones (su máximo).
El que va de menos a más al igual que la temporada anterior es Klay Thompson. El escolta empezó algo irregular la temporada, pero poco a poco ha ido cogiendo su nivel y si él está bien el equipo lo nota. Es el termómetro de estos Warriors. Promedia 20.7 puntos, 3.3 rebotes y 2.1 asistencias (47.7% tiros de campo y 36.5% triples). Hubo rumores que le situaban en Boston, aunque Kerr enseguida salió a desmentirlos. Estos Warriros sin Klay no serían los mismos.
En lo que a Curry se refiere, el MVP sigue siendo el líder. Aunque sus números hayan bajado (26.6 puntos, 5.9 asistencias y 4.1 rebotes (49.4% tiros de campo y 42.1% triples)) , al igual que su porcentaje de uso que ha pasado de un 32% a un 28.8%, el de Ohio sigue siendo el mismo base que obliga a sus defensores a defenderlo en toda la pista. Sabe que este año deberá sacrificar su MVP por el equipo. Esta temporada ha roto la racha de 196 partidos seguidos anotando al menos un triple, aunque al siguiente partido anotó 13 triples estableciendo así un nuevo récord. Su idilio con el triple sigue intacto. Este curso acaba contrato, aunque todo parece indicar que la próxima temporada seguirá en Oakland.
Aunque todavía estamos en Diciembre y tan solo llevamos un mes de competición, estos Warriors ya asustan. Pero todavía da más miedo el hecho de que no han tocado techo.
Nota: Las estadísticas corresponden al momento de redactarse el artículo y contemplan los primeros 18 partidos de los Golden State Warriors.
Comentarios
Zorionak Egoitz!
Te lo has currado. Por este tipo de análisis os distinguís de las demás web, y sigue mereciendo la pena que os leamos.
PD: Sería interesante ver lo mismo a final de temporada, para compararlas en su conjunto.