El panorama de Los Ángeles Lakers con respecto a las posibilidades de jugar la postemporada es impredecible. Ahora mismo están empatados con Utah Jazz en el último puesto de Play-in (los de Salt Lake City ganan el desempate), tras la victoria ante Golden State Warriors. Desde que LeBron James se lesionó en la victoria frente a Dallas Mavericks, los angelinos tienen un parejo récord de 2-2, liderados por un Anthony Davis sensacional que permite a los aficionados soñar con una clasificación, a todas luces inesperada, a comienzo del curso.
Es un hecho que sin su superestrella, los Lakers necesitan que AD sea dominante para llegar a los Playoffs, sumado a que los jugadores de rol den un paso hacia adelante con un nivel superior, y el domingo sucedieron ambas cosas.
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A diferencia del viernes, donde hubo poca ayuda ofensiva para Davis en la derrota ante Minnesota Timberwolves, los jugadores de rol de los Lakers tuvieron un gran partido ante los campeones defensores, que tuvieron el regreso de Stephen Curry. Austin Reaves fue clave desde el apartado defensivo y en su aporte en ataque con 16 puntos y ocho asistencias, mientras que Troy Brown Jr. anotó cuatro triples para terminar con 14 puntos y ocho rebotes.
Los Lakers, que se preparan para retirar el dorsal 16 de Pau Gasol, continuarán su agenda de partidos en casa cuando reciban a Memphis Grizzlies el martes por la noche, luego recibirán a Toronto Raptors el viernes por la noche y a New York Knicks el domingo para poner fin a la estadía en casa. Todos esos juegos no tendrán la presencia de LeBron James.
Tras su lesión en un tendón de su pie derecho el domingo anterior, las proyecciones más optimistas indican que LeBron podría regresar para jugar los dos partidos seguidos ante Chicago Bulls a fines de marzo. Para esa fecha, la franquicia espera que el equipo pueda acomodarse entre los puestos de Play-in, lo que allanaría el camino a una clasificación teniendo en cuenta que en abril se disputarán los últimos cinco encuentros de la temporada regular.
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EL PANORAMA DE LOS LAKERS PARA CLASIFICAR A PLAYOFFS
Los Ángeles Lakers todavía deben enfrentar a rivales directos como Utah Jazz (x2), Minnesota Timberwolves, New Orleans Pelicans, Dallas Mavericks y los Clippers. Tres de esos seis partidos serán en condición de local.
Es un detalle a tener en cuenta que, desde la lógica, no habla bien del equipo que sus expectativas estén atadas a la salud de un jugador de 38 años que disputa su vigésima temporada en la NBA. Sin embargo, cuando se trata de LeBron James la justificación es más que evidente: promedia 29.5 puntos en esta campaña. Sin embargo, su salud no lo acompaña: en las cinco temporadas que disputó con los angelinos, el Rey ha estado fuera en más partidos que en sus 15 campañas anteriores en las dos franquicias en las que ha jugado.
Desde que inició su carrera en la liga, en 2003 con Cleveland Cavaliers, hasta su último partido con esta organización, en 2018, incluyendo su paso de cuatro años por Miami Heat, LeBron apenas se perdió 71 compromisos.
Sin embargo, desde que llegó a Lakers en 2018, hasta la actualidad, el máximo anotador en la historia de la NBA se ha perdido un total de 101 partidos y contando. Señal clara del paso del tiempo.
Entonces, los Lakers deben prepararse para disputar entre 7 y 10 partidos más sin LeBron en cancha. El panorama no es alentador, pero tampoco fatídico. En estos cuatro partidos en los que el Rey no participó, el equipo tuvo momentos de buen baloncesto, liderados por Davis y por una plantilla más profunda que al comienzo de la temporada.
Con piezas como Jarred Vanderbilt, Malik Beasley, Mo Bamba, Rui Hachimura y sobre todo Austin Reaves y Troy Brown Jr., los angelinos pueden soñar, pensando en que Darvin Ham aprovechará el envión y el buen momento de sus jugadores de rol. Hay dos buenas noticias en el horizonte: la primera es que los Grizzlies no contarán con Ja Morant, apartado del equipo por tiempo indeterminado por sus actitudes fuera de la cancha, y que Anthony Davis está en el mejor nivel de su temporada.
