Houston le da una cura de humildad a San Antonio y Aldridge acaba con Dallas

NBA jueves, 6/11/14

Jornada similar y a la vez muy diferente en la NBA. Dos partidos que prometían altas anotaciones, un juego divertido y una igualdad vigente hasta el final del encuentro se encontraron con un partido totalmente distinto y donde el que mejor se adaptó, se acabó llevando el gato al agua.

Ante las ausencias de jugadores como Patrick Beverley, Terrence Jones, Tim Duncan, Manu Ginobili, Thiago Splitter o Marco Bellinelli, el duelo texano quedaba un poco más descafeinado pero no dejaba de ser interesante.

Los San Antonio Spurs comenzaban el encuentro dubitativos, con mucho error en lanzamientos sin mayor dificultad y se pasaron más de 5 minutos sin haber sumado un solo tanto. Dwight Howard campaba a sus anchas en la pintura sin Tim Duncan ni Thiago Splitter para defenderle, y de ahí vendrían sus primeros puntos. Poco a poco el equipo de El Álamo fue entrando en el encuentro, pero Howard seguía sumando sin ningún tipo de paliativos. Hasta 20 puntos y 12 capturas conseguía el jugador de Georgia en los primeros 24 minutos gracias a su buen entendimiento con James Harden en su pick&roll particular.

En un día para confirmar el estrellato de Kawhi Leonard, el larguísimo alero de los Spurs no estaba demasiado inspirado y sus primeras aportaciones se quedaban en un 1/8 en el lanzamiento durante la primera mitad, al igual que Danny Green. Mientras tanto, el que tenía que tirar del carro del equipo de Gregg Popovich era Cory Joseph, que con mucho desparpajo conseguía ser el único jugador de San Antonio con más de un tiro de campo anotado (5/6). Por el otro lado, Jason Terry parecía ser el ejecutor exterior más acertado de los de Kevin McHale, con 10 tantos y 2 triples anotados en la primera mitad, mostrando así que todavía tiene mucho baloncesto en sus venas.

La segunda mitad siguió la misma tónica. Howard continuó en la misma línea. El pívot dominó en ambos costados con la ayuda de Harden y dieron el paso definitivo para abrir un hueco en el marcador que sería infranqueable para los Spurs. Un mate de Harden en la cara de Baynes dejaría visto para sentencia el choque. El resultado final sería de 98-81, pero los Rockets llegaron a ganar de 30 puntos (45-75). Fue un partido impropio de estos dos equipos por su tendencia a jugar a muchos puntos.

Dwight Howard se marchó hasta los 32 puntos y 16 rebotes con un 12/18 en tiros de campo. Harden tampoco se quedó atrás con 20 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias y Jason Terry finalizó el choque con 16 puntos y un 4/5 en triples. En los Spurs, solo 3 jugadores pudieron llegar a dobles dígitos de anotación. Cory Joseph se fue hasta los 18, Danny Green se quedó en 12 y Baynes sumó 12 puntos y 12 rebotes.

Los Rockets se ponen con un balance de 6-0 de inicio en esta temporada, algo que no le ocurría a la franquicia desde la temporada 1996/1997.

En el otro encuentro de la jornada estrella de la semana en la NBA, la de la madrugada del jueves al viernes, Dallas Mavericks y Portland Trail Blazers que tuvo un solo dueño y señor, y fueron los Blazers. Los de Terry Stotts consiguieron abrir una renta considerable y dejaron el partido sentenciado sin necesidad de llegar a los instantes finales con esa tensión.

Monta Ellis y LaMarcus Aldridge lideraban a sus equipos en los primeros compases, marcados por la igualdad inicial y los decentes porcentajes en lanzamientos de campo. Todos buscaban tanto a Ellis para dirigir como a Aldridge en el poste medio para encontrar en su efectividad una posibilidad de suma. La entrada de los suplentes en pista por parte del equipo de Terry Stotts dio otro aire al equipo más despreocupado y acertado. 6 puntos consecutivos de CJ McCollum desde el triple y otros 6 de Chris Kaman pusieron por delante a los locales (24-28). Aldridge fue líder y homenajeado tras loarar superar la cifra de los 11.000 puntos en temprada regular.

Portland cogió pronto la delantera en el marcador con Damian Lillard y Wesley Matthews como principales colaboradores de la tarea de LaMarcus Aldridge. Chris Kaman salió desde el banquillo para sumar 8 de los 12 puntos en menos de un cuarto. En los últimos minutos de partido, los Blazers se dejaron llevar pero el resultado final fue de una aplastante victoria de Portland por 87-108. También fue notable la diferencia entre los rebotes del conjunto que dirige Rick Carlisle (34) y los de la franquicia de Paul Allen (53).

Los Mavs nos dejaron una cara muy diferente a la que nos tienen acostumbrados y los Blazers se empeñan en mantenerse muy arriba. Futuro prometedor el que les espera a ambos combinados.

NBA jueves, 6/11/14

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