Barça Regal – Unics Kazan: La ley de Mickeal 78-66
Barcelona Regal sufrió más de lo esperado para hacerse con la primera victoria de la serie ante el Unics Kazan, en un partido que dominó desde un principio de forma clara y que luego se complicó en cuanto bajó la intensidad defensiva y bajó el ritmo del juego. Pete Mickeal fue el mejor jugador con 22 puntos y 7 rebotes.
Los blaugrana salieron con animo de no dejar ninguna esperanza de rascar nada al conjunto ruso. De comienzo un rápido parcial de 7-1 rompía el partido. Boniface Ndong comenzó muy bien en ambas partes de la cancha, anotando 8 puntos en un visto y no visto y anulando el juego de Unics que buscaba una y otra vez a Jawai. El Barcelona jugaba muy bien en ambos lados, muy rápido moviendo el balón y corriendo mucho ante el nulo balance defensivo de los rusos. Marcelinho dirigía muy bien desde el pick and roll sacando del área de influencia al enorme Jawai.
Los rusos vivían del tiro libre, mientras que el Barça presentando en el segundo cuarto a Sada, Rabaseda, Ingles, Wallace y Perovic se hacían con un parcial 8-0 que les daba 14 puntos de ventaja. Unics tuvo un amago de reacción mediante el trabajo de McCarty y el acierto de Veremeenko, hasta ponerse a siete puntos. Ahí volvió el trabajo defensivo de los catalanes y sobre todo la velocidad para dejar al descanso una cómoda renta de 12 puntos. Buen trabajo de Pete Mickeal y Erazem Lorbek en estos primeros veinte minutos.
Jawai comenzaba el tercer cuarto on fire con cinco puntos sin respuesta que ponían a Unics a siete puntos y abrían un halo de esperanza. McCarty con intensidad y oficio en ambas partes de la cancha se unía al australiano para mantener a los rusos en partido, ante un Barça que bajaba el ritmo de su juego y el trabajo defensivo, aunque les daba para hacer la goma sobre todo a través de un gran Mickeal.
El relax defensivo y la falta de ritmo y referencias más allá del alero norteamericano pasaba factura a los blaugrana que en un visto y no visto se presentaban en el último cuarto con un equipo ruso que apretaba en defensa y veía como Domercant y Lyday culminaban un 0-9 que les ponía a tres puntos. Dos tiros fallados en dos ataques hacían que no lograran culminar la remontada, ya que Navarro lograba dar un respiro desde 7 metros. Lyday se ponía contestón. Ahí es cuando Marcelinho volvió a entrar en escena –firmando uno de sus partidos más brillantes en la dirección con el Barça- y dio ese punto de velocidad que tanto daño hace a los de Kazan, cerrando el choque definitivamente con un triple de Lorbek y un rebote ofensivo de un inmenso Pete Mickeal.
Panathinaikos – Maccabi : Sin noticias de los israelítas 93-73
Por Alberto Rubio
Auténtico recital el que ha dado el equipo griego en este primer encuentro de la serie. Muy superior, barrió totalmente a su rival del que apenas se tuvo noticias de él en el encuentro y que no mostraron la actitud necesaria, no para ganar, sino al menos para competir en una cancha como el OAKA.
Zeljko Obradovic le ganó la partida a David Blatt. Primero, en lo técnico. Su uso de Aleks Maric, jugador que hasta el momento acumulaba 6:30 minutos jugados de media, para frenar al siempre potente Schortsanitis fue de auténtico manual. De nuevo el técnico de Panathinaikos demuestra cuanto trabaja cada eliminatoria importante.
El segundo factor que supo hacer valer Obradovic fue el emocional. Si decimos que Maccabi no mostró la actitud necesaria, a los siete minutos Eliyahu igualaba el encuentro a 16 gracias a una canasta fácil tras una pérdida absurda en un mal ataque de Batiste y Jasikevicius. El tiempo muerto de Zeljko, sonrojando a sus dos veteranos jugadores, le cambió el chip a su equipo. Cinco minutos de juego después el marcador reflejaba un 40-18 y el encuentro tenía sensación de sentenciado a poco de comenzar el segundo cuarto.
Porque el ataque de Maccabi fue bastante desastroso, sobre todo por la cantidad de pérdidas que acumularon, que muchas de ellas se tradujeron en transiciones rápidas de los helenos que terminaban en canastas fáciles. Nick Calathes y en especial Dimitris Diamantidis movían el partido a su antojo.
El dominio que impone Diamantidis en un encuentro es un espectáculo. Terminó el primer tiempo con 12 puntos, 7 asistencias y 23 de valoración, algo que ya sería fenomenal al finalizar un partido para cualquier jugador. Sabe leer y realizar la jugada que necesita su equipo, siendo la extensión de Obradovic en la cancha.
Con Maccabi perdiendo de 21 al descanso (55-34), se esperaba reacción israelita tras pasar por vestuarios pero lo que ocurrió fue un 9-0 a favor de los locales que ya hizo tener casi dos cuartos completos con “minutos de la basura” donde los macabeos sólo pudieron adornar sus números y Obradovic dio oportunidades de acumular minutos a jugadores como Kaimakoglu y terminar venciendo por 20 puntos de diferencia (93-73).