Buscando al jugador total en la NBA, ¿quién es el más polivalente?

Las estadísticas siempre han sido de interés en la liga norteamericana. Un sintoma de análisis y de respeto al pasado, que sirve para legitimar a la competición y dejar registrada su historia por siempre. Además, para las mejores estrellas de la NBA, se ha convertido en una motivación por llegar lo más lejos posible. Todos quieren dejar la marca o los números más altos y demostrar lo influyentes que fueron por aquel entonces. 

Esto al final acaba originando modas, no sólo a niveles estéticos o de marketing, sino también en el estilo de juego. Las referencias de las ligas marcan tendencia, conforme a como juegan unos a otros y la comparación o imitación están a la orden del día. El instinto competitivo y de ser mejor que el resto, describe la filosofía deportiva y de superación de la cultura norteamericana. Pero, ¿cuál es la moda en la actualidad?

LeBron James es leyenda viva de la NBA y todo un torbellino en la realidad. En el presente curso suma su undécima temporada en la mejor liga del mundo, primando su capacidad para aportar en casi todos los campos posibles, ya sea anotación, aportando rebotes y siendo un director de orquesta cuando el equipo lo ha necesitado, o lo que es lo mismo, convirtiéndose en un jugador total. 

No obstante, en la historia de la NBA hay jugadores que han destacado por su polivalencia y que han marcado un antes y un después en la liga. 

• LA EVOLUCIÓN DEL JUGADOR TOTAL

En los años 60-70 encontramos a algunos de los jugadores más emblemáticos de la historia de la NBA, siendo la polivalencia su gran virtud y dependiendo del caso,  técnica o físicamente superiores al resto, como son los ejemplos de Jerry West (1960-74), John Havlicek (1962-78) y Pete Maravich (1970-80). Pero quién revolucionó las posibilidades estadísticas fue "The Big O" Robertson (1960-74) tras promediar en una temporada entera (1961-62) un triple-doble por partido. Además, es el jugador que más veces lo ha conseguido en la liga norteamericana. El arte del triple-doble comenzó a ser un objetivo para unos pocos elegidos que se recogen en este artículo de Igor Minteguia. 

Los años ochenta estuvieron protagonizados por el enfrentamiento directo entre Magic Johnson y Larry Bird, llegando a disputar hasta tres finales por el título de campeón. Dentro de los atractivos de estos jugadores era su capacidad para aportar de todo en la pista. Además, también se implantaba en la liga el triple en los partidos (1979), imitando a la ABA y abriendo un sinfín de posibilidades más en la cancha, en el que el bueno de Larry Bird pudo explotar como un recurso más dentro de sus grandes posibilidades. 

Sin que casi nadie lo tuviera en cuenta, Larry Bird se convirtió en el primer jugador en la historia de la NBA en superar la barrera de los 18.000 puntos, los 4.000 rebotes, 4.000 asistencias, 1.000 robos de balón, 500 tapones y 500 triples convertidos en toda su carrera. Algo que confirma aún más su capacidad para hacer de todo en la pista. 

Pero quién volo por encima de todos los jugadores fue "Air" Jordan. Michael es considerado como el mejor jugador de baloncesto en la historia por numerosos aficionados, por muchos motivos. En la memoria de los seguidores quedarán sus vuelos sin motor, su capacidad para seguir luchando por los partidos y también, cómo decidía los mismos. Pero también originó un cambio de prisma, en que la anotación individual se le diera mayor importancia y la decisión personal del jugador estrella en la resolución del partido, lo fuera un todo. 

Michael Jordan fue un ejemplo más de máxima polivalencia como también lo fueron otros grandes jugadores que estuvieron con o en contra con él, como son Scottie Pippen, Charles Barkley o Clyde Drexler. Sin embargo, su liderazgo y anotación en la pista prevalecerán más como sus cualidades más destacadas, a pesar de las infinitas posibilidades que disponía para su equipo. 

A raíz del jugador de Chicago Bulls, la prensa y los aficionados buscaban una alternativa que recordara o perpetuara el vacío que dejó Michael Jordan cuando abandonó el baloncesto. Numerosos jugadores se postularon como el sucesor de Jordan como Grant Hill, Vince Carter, Tracy McGrady o el ejemplo más cercano de Kobe Bryant, que dominaron el baloncesto mundial de la era post Jordan.

Aunque la importancia deljugador anotador aún prevalece sobre la polivalencia del jugador total, la irrupción de LeBron James ha vuelto a cambiar este aspecto. La estrella de Miami Heat es reconocido por romper con todos los records de anotación en cuanto a precocidad se refiere pero por encima de ello hay que recordar que por partido también promedia alrededor de 7 rebotes y 7 asistencias por encuentro. ¿Etapa de cambio? 

• LOS 10 JUGADORES QUE LO HAN CONSEGUIDO

Jugadores que han sumado más de 18.000 puntos, 4.000 rebotes, 4.000 asistencias, 1.000 robos, 500 tapones y 500 triples

Todos ellos han tenido su momento en la historia que han levantado a los aficionados y amantes del baloncesto. La mayoría disponen de un físico privilegiado que le permitían llegar donde otros no podían, pero otros han tenido que demostrar una inteligencia y una técnica superior a la media.

No sólo hablamos de la anotación como aspecto determinante en el juego, son aquellos jugadores que también han capturado más rebotes y han repartido más asistencias a sus compañeros, los que más se han esfozado en defensa gracias a sus robos de balón o han podido intimidar con sus tapones. Pero además de todo ello, son mortíferos en la larga distancia y gracias a su tiro exterior han ganado varios partidos en el último segundo. 

A continuación os presentamos a los 10 protagonistas de nuestra clasificación: