"Llevo escuchando oir hablar de Ricky Rubio desde hace seis años… y ahora veo que de verdad es real"
(Scott Brooks, antes del partido)
Crónica (Andrés Monje)
Se nota hambre en los lobeznos, ganas de agradar. Y a punto estuvieron de llevarse por delante a los Oklahoma City Thunder, que arrancaron una trabajada victoria (100-104) de Minneapolis.
Con un ritmo enérgico y sin miedo alguno, los Wolves, liderados por Kevin Love (22 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias) y Michael Beasley (24 tantos), encontraron el modo de dañar al conjunto de Scott Brooks, donde Kevin Durant (33 puntos) jugó, como era de esperar, un papel decisivo, bien secundado por el eléctrico Russell Westbrook (28 puntos).
Los buenos minutos que ofrecieron desde el banco JJ Barea (14 puntos) y Derrick Williams (13) resultaron fundamentales para los locales, en los que Ricky Rubio (6 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes) brilló hasta tal punto que terminó en cancha en los minutos decisivos.
La mayor experiencia de Oklahoma City en los minutos finales decantó un partido que bien pudiera haberse quedado en Minnesota, pero de lecciones como esta aprenderán los de Rick Adelman, que dejaron una grata impresión.
El debut de Ricky (Fernando Gordo)
Primer partido en casa de los Minnesota Timberwolves de la temporada 2011-2012. Público entregado a su equipo. From Spain with the number 9… ¡¡Rickyyyy Ruuubio!! Público enloquecido. Ovación en pie de todos los aficionados que ven como por fin, su particular niño prodigio debuta con los Wolves dos temporadas después de lo esperado. Ricky responde como siempre señalando al cielo en recuerdo de su difunto amigo Guillem Raventos. Empieza en el banquillo y observa como sus compañeros tutean a uno de los favoritos por el título. Ridnour tiene los galones de momento de base titular y cuando se carga de faltas ve como le sustituye Barea. Espera paciente y aplaude. Le da tiempo a ver cómo detrás suyo hay aficionados con la camiseta de la Penya. Como otros llevan pancartas en que le sitúan como la joya del equipo. Desde el banquillo ve cómo Barea manda desde el perímetro, cómo Love tratar de sacar a Ibaka de la zona y provocarle faltas de tiro y cómo a Beasley le gusta mirar para él antes que para el equipo. Por fin es su momento. Faltan 3.16 para el final del primer cuarto. Ovación de gala y tiempo muerto antes de salir a jugar. Son las 2.35 de la madrugada hora española. Todo el pabellón en pie … ¡Ricky Rubio debuta en la NBA! Increibles los gritos desde la grada. Con él ya son 10 los españoles que han pasado por la NBA. De Fernando Martín a Ricky Rubio. Comienza con un par de pases poco comprometidos para entrar en calor. Le dejan tirar de tres pero prefiere seguir jugando. No hay riesgos en estático. Le pitan la primera falta por luchar por un rebote. Ya sabe lo que es ser rookie en la NBA.
Se animan las cosas en el segundo periodo. Los Thunders fallan y Ricky comienza a correr. Una, dos, tres asistencias seguidas en contrataques. El público alucina con él. Pase picado a Barea, despúes a Derrick Williams, a Wesley Johnson… Cada asistencia más estética que la anterior. Se divierte como hacía años que no hacía. Su equipo necesitaba correr y él lo interpreta a la perfección. "Expect the unexpected" dicen en USA los narradores. Se empareja primero con Maynor y en seguida con Westbrook. No pierde ningún duelo con ellos. Se vuelve al banquillo a falta de 3.49 para el descanso con una sonrisa en los labios. Sus primeros minutos se resumen en la frase que inmortalizó Kukoc "Una canasta hace feliz a un jugador… una asistencia, a dos". Los Minnesotta divierten y aguantan en el partido. Por poner un pero a la primera parte es que no ha mirado aro.
Vuelve a salir desde el banquillo y sus compañeros siguen compitiendo contra los Thunders. La diferencia nunca pasa de los siete puntos pero rara vez baja de los cinco. Adelman sabe que necesita algo más para tratar de darle la vuelta al partido. Sale a falta de 2.51 del final del tercer cuarto junto al otro rookie Derrick Williams. No se volverán a sentar ya más. Los defensores comienzan a flotar a Ricky. Cada vez más. El de Masnou se da cuenta y busca un lanzamiento. Provoca la falta y anota sus dos primeros puntos de tiros libres en la NBA. Pone a su equipo a un sólo punto. Son las 4 de la mañana en España. El partido continúa y Ricky lo vuelve a hacer. Pase picado espectacular en contraataque y mate de espaldas de Williams. Ya tiene su primera jugada de highlights. El público sigue alucinando. Hasta el rey habla de él: "@KingJames Rubio can pass that rock!" Quedan siete minutos para acabar el partido. Sale de un bloqueo directo y mete una canasta de cinco metros. A tabla valen lo mismo. Ahora el que aplaude desde el banquillo es Ridnour que no vuelve a salir. Caño a Westbrook que desaprovecha Love, falta en ataque provocada, segunda canasta en juego de nuevo con un tiro desde cinco metros… ya es el protagonista del partido. Pone uno arriba a su equipo. Westbrook anota y le mira desafiante. Ya no es un rookie más. A falta de 15 segundos se encuentra con el balón en las manos y sólo dos abajo. Decide buscar a Beasley. Éste no anota y tiene dos tiros libres Perkins. Fin del partido. 100-104. 6 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes. Las sensaciones que transmite son mucho mejores que los fríos números. Y no es sólo un partido más de NBA. Es su primer partido.