Tras un respetable homenaje a Kobe Bryant, las hostilidades comenzaron en el Fontes do Sar. La actuación del Monbus Obradoiro en los primeros minutos sería impecable, y es que durante los cuatro primeros minutos lograría dejar al BAXI Manresa en únicamente dos puntos. En el ataque gallego serían fundamentales Fletcher Magee y Chris Czerapowicz, líderes que pondrían el 12-2, dejando al BAXI Manresa sin respuesta.

Pedro Martínez se vio obligado a pedir el tiempo muerto, pero este tendría sus efectos en el partido. Los catalanes saldrían reforzado de la charla y de la mano de Eulis Báez, líder anotador del Manresa, lograron colocarse únicamente uno abajo (14-13) a falta de dos minutos para finalizar el cuarto. Igual que había hecho Pedro unos minutos atrás, Moncho Fernández pidió tiempo muerto para refrescar a los suyos y este descanso tuvo un resultado inmediato. Un parcial final de 11-3 a favor de los locales resultó clave para que los gallegos no perdieran la ventaja que previamente habían cosechado. Al final de los primeros 10 minutos, Monbus Obradoiro ponía la primera pequeña diferencia global del conjunto gallego (25-16).

El inicio del segundo cuarto seguía con la tónica de los primeros diez minutos y Obradoiro salió más enchufado que Manresa, sobre todo gracias a la conexión Daum-Brodziansky y liderados desde la dirección por el veterano David Navarro (35-19). Los jugadores del BAXI Manresa se veían sin ideas a pesar del acierto de exteriores como Dulkys o Vaulet, que estaba haciendo daño tanto por dentro como por fuera (43-28).

Dos triples consecutivos de Fletcher Magee y Mike Daum pondrían la máxima del partido (49-28) y Obradoiro, poco a poco, iba estableciendo largas diferencias en el marcador para tener el terreno despejado de cara la segunda mitad. La guinda del pastel la pondría David Navarro, que con una contra muy rápida en los últimos segundos de cuarto anotaba desde más allá del 6.75 y mandaba el partido al descanso con un resultado de 54-32 a favor de los locales.

El tercer cuarto empezó como no debía para los gallegos. BAXI Manresa lucía una cara distinta a la del primer tiempo y la principal referencia anotadora sería para el equipo visitante. Los triples de los catalanes empezaban a entrar, y la diferencia bajaba de 20 puntos por momentos (60-41).Como es costumbre en el Fontes do Sar, el ritmo del partido iría a menos y cada vez costaba más anotar, tanto en una canasta como en la otra.

Monbus Obradoiro se veía en un escenario relativamente cómodo, y es que BAXI Manresa  no lograba acercarse lo suficiente en el marcador como para poner en tensión al equipo dirigido por Moncho Fernández. Los últimos instantes de cuarto estaban destacando por su intensidad tanto en ataque como en defensa, haciendo muy posible anotar sin ser desde la línea de tiro libre (70-50). Finalmente, ambos conjuntos lograron anotar desde el perímetro y llegábamos al último cuarto con un resultado de 73-56.

Por resultado, el partido parecía decantado, pero si algo caracteriza al BAXI Manresa es el hecho de no bajar los brazos hasta que finalicen los 40 minutos. A diferencia del tercer cuarto, vimos un último periodo muy anotador por ambas partes, pero con un claro ganador en el intercambio de canastas (84-64).

A falta de cinco minutos para finalizar el partido, Monbus Obradoiro tenía que hacerlo muy mal para que BAXI Manresa le levantara el partido. Esto no llegaría a ocurrir, y los gallegos sumarían la novena victoria, colocándose por delante de los manresanos y mostrando un gran número de recursos para anotar, ya fuera desde la zona como desde el perímetro. Finalmente el marcador sería de 97-83, quedándose a 3 puntos de la barrera de los 100.