
Partido plácido para los de Alejandro Martínez que dominaron el choque de principio a fin. Antes del mismo, la igualdad entre ambos equipos era la nota dominante. Un Cajasol con jugadores muy jóvenes (la edad media de la plantilla no supera los 22 años) liderados por Satoransky en el puesto de base y con jugadores europeos llamados a marcar diferencias en los próximos años. Por otro lado, el conjunto aurinegro, en racha, buscaba una victoria en su feudo que les acercase un poquito a más al sueño de disputar la Copa del Rey.
El partido comenzó muy igualado, ninguno de los equipos quería fallar en defensa y eso afectó a la parcela ofensiva (2-4 en los primeros 3 minutos). Tras un comienzo titubeante, los aurinegros pusieron la directa y el vendaval asoló al conjunto sevillano. Sekulic, en estado de gracia y Levi Rost desde la línea de tres sometían a los de Aíto García Reneses (16-6). Todo ello unido a la versatilidad de Sikma sitúo el tanteador al finalizar el primer cuarto en un 22-10.
En el segundo cuarto, las cosas se pusieron más complicadas para los locales, las rotaciones y el acierto cajista apretaban el luminoso hasta el 35-28 tras un triple de Marcus Landry. La buena defensa aurinegra y el acierto en el tiro unido a las malas decisiones visitantes mantuvo la distancia local al descanso (41-32).

Tras el tiempo de asueto el partido se acabó. En una competición tan igualada como la liga Endesa un equipo no puede estar 8 minutos sin anotar y esa fue la perdición del conjunto sevillano. Ya que del 41-32 del descanso se pasó a un 54-32 a falta de 1:54 del final del tercer acto. Muchos tiros que no tocaban ni aro, fallos debajo de canasta y pérdidas eran la tónica del ataque visitante. La impotencia de Aíto era palpable que no sabía que hacer ante la inoperancia de sus jugadores. El partido ya estaba prácticamente cerrado al finalizar el cuarto (60-39).
El último período fue una fiesta. Los locales admnistraron la ventaja y el Santiago Martín comenzó a hacer la ola, mientras los jugadores con menos participación mantenían la ventaja. El acierto exterior de los sevillanos en los últimos minutos del cuarto adecento la imagen de un equipo que se queda con escasas opciones de disputar la Copa del Rey. Por el lado aurinegro, son 5 las victorias de forma consecutiva y el sueño de la Copa es casi una realidad.