Después de un día de descanso de PlayOffs, Adrian Wojnarowski se ha encargado de soltar una noticia de renombre de cara a la próxima temporada. Frank Vogel ha llegado a un acuerdo con Los Ángeles Lakers para ser el próximo entrenador jefe de la franquicia. Uno de los miembros de su staff técnico no va a ser otro que Jason Kidd, quien ha aceptado el puesto de entrenador asistente, habiendo llegado rumores sobre su incoporación con Tyronn Lue, incluso se llegó a hablar de ser el head coach angelino.

Durante el día de ayer se habló sobre la buena impresión que causó en la primera entrevista, y que ambas partes estaban muy cerca de llegar a un acuerdo. Finalmente, ESPN adelantó la noticia de que el entrenador de Nueva Jersey firmará un contrato que le unirá a la franquicia angelina durante las próximas tres temporadas. Precisamente en dichas informaciones resalta la influencia de Kurt Rambis y Phil Jackson para tomar la decisión de incorporar tanto a Vogel como a Kidd.

Para hablar de la trayectoria de Vogel, debemos remontarnos al año 2001, donde fue entrenador asistente en los Boston Celtics, para marcharse posteriormente una temporada a los Philadelphia 76ers, donde no consiguió adaptarse. La franquicia donde consiguió consolidarse fueron los Indiana Pacers, siendo parte del cuerpo técnico durante cuatro años.

Precisamente fue en los Pacers donde su carrera da un gran salto, pasando a ser el entrenador principal de la franquicia en 2011, ejerciendo como tal durante las próximas cinco temporadas. Llegó a dos Finales de Conferencia Este, siendo recordada la serie donde dejó a los Miami Heat de su futuro jugador, LeBron James, contra las cuerdas. Una serie para rememorar y que nunca se le olvidará a la estrella de los Lakers. Tras ello, Vogel hizo las maletas rumbo a Orlando, donde tuvo una trayectoria criticada por los resultados obtenidos, siendo despedido el pasado año.

Tras ello, Vogel tendrá una nueva oportunidad de demostrar su valía como head coach en la NBA, en una franquicia que vive en constantes rumores y aguas revueltas, especialmente por lo que se viene durante el próximo verano. Entrenador caracterizado por la rigidez defensiva, talón de Aquiles de los californianos. Una de las principales dudas residirá en si Vogel será capaz de contener un vestuario tambaleado, donde pueden juntarse varios gallos y donde la paciencia no es el arma principal de los despachos.