ÚLTIMA HORA: Interés mútuo entre Kaman y Lakers, según adelanta yahoo sports.

Magic Johnson fue el creador de un estilo de juego bautizado como showtime y que elevó el contragolpe a la máxima categoría gracias a las dotes como pasador de Earving Johnson y el importante elenco de finalizadores a su disposición. Jamaal Wilkens, Abdul Jabbar, Bob McAdoo, Michael Cooper, Byron Scott, James Worthy…Un estilo que permitió a la marca NBA llegar cada vez a más mercados. Frente a la sobriedad de sus eternos rivales Celtics, los Lakers eran el equipo de la eterna sonrisa, del puro espectáculo. Y la plataforma de lanzamiento no tenía rival. Desde Los Angeles, la meca del cine, con astros del cine y la televisión sentados en primera final, con las cheerleaders más bellas y un entrenador engominado que todavía hoy sigue cosechando éxitos.

Aquella marca, ya sin sus primeros protagonistas, ha servido para calificar otros momentos brillantes como los tres anillos abanderados por el dúo Kobe-O'Neal o los mejores años de la franquicia desde que Pau Gasol llegó en una operación liderada en los despachos por Mitch Kupchak.

El fatídico viernes 5 significaba un duro revés para las aspiraciones del General Manager, quien ya recibió un buen sopapo cuando la NBA negó el traspaso que iba a llevar a Chris Paul a L.A. a cambio de Pau Gasol y Lamar Odom. Con la pretendida llegada de Paul, Kupchak 'hacía las paces' con Kobe Bryant, quien en su día le recrimió el que no hubiera traspasado a un joven Andrew Bynum para conseguir a Jason Kidd. La temporada pasada Kupchak volvía a sonreír. Su idea de formar un equipo 'de dibujos animados' era real con la llegada de Steve Nash y de un gran finalizador como Dwight Howard, amasador, además, de títulos de mejor defensor de la NBA. Se pudo traspasar a Bynum y conseguir al pívot alrededor del cual se podían edificar un par de anillos más.

Eso pensaban en los Lakers cuando el invento se torció a las primeras de cambio. Mike Brown no respondía al nuevo estilo que se quería implantar y se buscó un técnico amable con el espectáculo, que tuvo sus mejores días en los Suns del 'a que no me pillas' y que no pudo trasladar a los Knicks. Se empeñó en hacer correr a quienes no podían y se mostró férreo en su estilo. El pívot de Sant Boi, fue, además, su gran víctima y jugador más maltratado a nivel de sistemas de juego.  El batacazo fue tremendo.

Plan B menor que A

Kupchak siempre creyó en D'Antoni y así lo expresó en repetidas ocasiones. Lo del curso pasado podría pasar por un accidente, y más teniendo en cuenta las lesiones de Kobe Bryant y Pau Gasol.

El hombre por el que más había peleado, Dwight Howard iba a abanderar el 'Plan A', pero el pívot de codos afilados se decidió por otra franquicia que le ha estado enviando cartas de amor desde antes de su llegada a Los Angeles. En Houston están preparando un equipo para que ande a sus anchas, con el permiso de Harden, un equipo similar al de los Magic con el que rozó el anillo en el primer título de Pau Gasol ¡Ay de no haber fallado Courtney Lee aquel alley hoop!

Casi sin poder digerir el duro golpe recibido, Josh Smith, otro hombre que gustaba mucho en Los Angeles lakers, elegía formar parte de los Detroit Pistons, equipo que se está construyendo muy bien por abajo.

Dos elementos propicios para revitalizar el showtime se esfumaban. El agujero dejado por las dos pérdidas (se remarca mucho la primera pero la no llegada de Smith también es dolorosa) da paso a un océano de dudas y no va a haber respuesta para ninguna de ellas. Al menos, a muy corto plazo.

Declaraba el General Manager de los Lakers que se cuenta con un Plan B, pero que no es tan bueno como el A. Desde la prensa angelina, muy crítica ya con los resultados de D'Antoni, se confía poquísimo en el margen de maniobra tras, sobre todo, la fuga de Superman.

Siguen estando muy por encima del límite salarial (77 millones/49 entre Bryant y Gasol) y el margen que les queda -según L.A.Times– son 3.2 millones de una mid level exception que no les permite negociar con los mejores jugadores disponibles todavía en la Agencia Libre. Se les escapan jugadores como Nikola Pekovic o Monta Ellis (muy cerca de Atlanta). Como dice Mike Bresnahan en el rotativo angelino, el sobrante que les queda "podría ser suficiente para firmar a Carlos Delfino o Gary Neal" ¿Responden estos nombres a un Plan B? ¿se podría equiparar un Plan B de los Lakers al de, por ejemplo, Bobcats?

La primera respuesta que llega automáticamente es la siguiente:

Pau Gasol no se traspasa y jugará de pívot. Esta apreciación a la que han llegado muchos tiene su cierta lógica en el hecho de que no se contempla la posibilidad de que se pueda adquirir a un gran pívot (en la mente de muchos sigue estando Pekovic pero también en la de los Jazz). Además, el mayor de la saga, a sus 33 años y tras una importante lesión, rendiría mejor en posiciones cercanas al aro.

Confiar en la mejor versión de Pau siempre es positivo. Es una buena noticia que, sin embargo, queda empañada con la posibilidad de que Metta World Peace (MWP) siga en el equipo cuando se daba por sentado que le llegaría una amnistía. Lejos queda ya de ser un jugador determinante como el que les ayudara a ganar el anillo del 2010. No es un jugador que pueda aportar un valor añadido al nuevo proyecto. En este aspecto las informaciones son contradictorias ya que también se apunta sí recaerá la amnistía sobre MWP. De este modo, los Lakers se ahorrarían un total de 25 millones en impuestos salariales y de lujo.

Por otra parte, vamos a pensar que los rumores de retorno de Lamar Odom se quedan en eso, en simple charla de taberna entre forofos. Presente y futuro no concuerdan con el ex jugador de los Clippers. Cualquier pasado fue mucho mejor.

Ahora mismo están con una plantilla formada por Nash, Bryant (rehabilitándose), Gasol (recuperándose), Hill, Meeks, Duhon y Blake, contando con que MWP será liquidado en breve. No hay grandes esperanzas en que se complete un roster que asegure la lucha por los Playoffs así que las primeras voces apuntan a un par de opciones.

[[{“fid”:”49600″,”view_mode”:”image_node”,”type”:”media”,”attributes”:{“style”:”line-height: 1.53em;”,”class”:”media-element file-image-node”}}]]El tanking puro y duro. Muchos hablan de que el próximo draft podría ser equiparable al de Lebron James. En la boca de todos está el canadiense Andrew Wiggins, jugador al que equiparan en impacto con el propio James o Shaquille O'Neal. Los Lakers podrían 'dejarse llevar' durante toda la temporada para poder contar con muchos boletos que faciliten su selección en el draft. Los angelinos han sido bastante azarosos en este sentido. Este punto de partida debería ser tachado de la lista de action items a seguir a partir de ya. Por historia y por la categoría de algunos de los jugadores de  la plantilla, por muy veteranos y 'lastrados' que se encuentren.

El verano del 2014. El 13 está siendo maldito para la franquicia lagunera así que muy poco tienen que perder. Su payroll temporal -con más de la mitad de la plantilla por edificar- de cara al próximo curso es de menos de 10 millones de dolares. Quedarán liberados de todos los contratos excepto el de Steve Nash, al que le quedarán por cobrar 9.7 millones. Las posibilidades de compra serán infinitas con una agencia libre muy apetecible en la que también estará, por ejemplo, Ricky Rubio (Team Option).

Posiblemente el Plan B de Kupchak se asemeje a una ráfaga de operaciones a corto plazo con inicio en el 2014.  Porque suponemos que este plan no contempla recuperar a Andrew Bynum.