Este verano uno de los pívots puros mas dominantes de los últimos años en el viejo continente, Nikola Pekovic (2.11/1986), decidió cruzar el charco y recalar en la liga más potente del mundo. "Quiero descubrir qué es este gran show. Todo el mundo sueña con jugar en la NBA" explicaba el pívot, por ahora… no hay duda de que no se trata de un sweet dream…

En su momento, se entendió como un paso lógico en la meteórica carrera del poste de Bijelo Ponje, otro producto más de la tan prolífica cantera del Buducnost.
Deslumbrar en el Partizan de Belgrado con tres grandes temporadas a un espectacular nivel, le permitió por partida doble, un sustancioso contrato con el todopoderoso Panathinaikos, donde en su última temporada en Euroliga promedió unos espectaculares 16,8 puntos en unos escasos 21 minutos de juego. Antes ya había llamado la atención de los ojeadores de una de las franquicias de la NBA, los Minnesota Timberwolves, por los que fue elegido en el puesto 31 del Draft del año 2008.

En un principio, la franquicia del gélido estado de Minnesota, confió en las posibilidades de Pekovic ofreciéndole la nada despreciable cifra de 15 millones de dólares por tres temporadas.

Aquel draft del 2008 fue un sorteo especialmente fructífero (sin parangón con el año 2003), con estrellas ya consagradas como Derrick Rose (nº1), Russel Westbrook (nº4) , Brook Lopez (nº10), etc… del que también formaron parte Serge Ibaka (nº24 muy en boga en estos momentos), Goran Dragic así como otros postes europeos como Sasha Kaun (CSKA) o Ante Tomic ( Real Madrid), no teniendo ninguno de ellos el impacto de Pekovic.

A pesar de ello las ilusionantes expectativas creadas se vieron rápidamente esfumadas, haciéndole despertar de su sueño de hadas. Nikola en su desembarco en la NBA, está desempeñando un discreto papel dentro del roster del coach Kurt Rambis, (12.9 minutos, para promediar 5 puntos y 3 rebotes), ya sea por la falta de minutos, la desconfianza por parte de su entrenador o la dura competencia que tiene en la zona en su equipo.

No debemos de olvidar, que Pekovic comparte vestuario con Kevin Love (compañero de draft 2008), máximo reboteador de la competición con 15.6 rechaces por noche, que nos está brindando actuaciones estelares como la ya histórica contra los Knicks, en la que consiguió 31 puntos y 31 rebotes, el resurgido Darko Milicic y el siempre díscolo Michael Beasley, (principal damnificado por el Big Three de Miami que aporta la friolera de 20.6 puntos y 5.7 rebotes), que parece haberse reencontrado de nuevo al cambiar South Beach, por Minnesota. Por cierto, Beasley reconoció estar impresionado con el físico de ‘Pek’: "pesa 136 kilos, mide 2.11 y es de Serbia. No creo que nadie se atreba a desafiarlo" se entiende también que las bromas, las justas, al rookie. Love también tuvo palabras de elogio sobre él: "tan sólo esperaba que se uniera a nosotros y no a otro equipo".

Si analizamos con frialdad, el juego del rocoso center montenegrino, y teniendo en cuenta que es uno de los pocos interiores a ambos lados del Atlántico que todavía mantiene un juego de espaldas a canasta, ortodoxo a la antigua usanza, nos cuesta entender su actual situación.

¿Necesita Pekovic un período de adaptación a La Liga? ¿Lesiones? ¿Rookie Wall? ¿Enfrentarse a físicos más poderosos? o simplemente ¿no saber asimilar un nuevo rol dentro del equipo donde no es la primera referencia ofensiva?

Encontramos otro caso similar, en la figura de otro pívot dominador de la ACB y la Euroliga en el último lustro, Tiago Splitter, que en estos momentos en San Antonio, a las órdenes de Popovich, está sufriendo la misma travesía del desierto. En breve también analizaremos rol y situación del pívot brasileño.