Estamos en una fechas muy agradables para el aficionado al baloncesto, más concretamente de la NBA. Otra fase regular finalizada lo que equivale a los inicios de Playoffs, donde se decide quien será el campeón de entre los dieciséis equipos que lucharan a cara de perro por ganar los partidos. También por estas fechas se decide en gran parte el futuro de las franquicias no clasificadas en postemporada, la lotería del draft. Pero también están los premios individuales que concede la liga a los jugadores que más han brillado en fase regular. Esto último da a típicos debates de aficionados todos los años, esas tertulias que una persona puede escuchar en un bar y quiere participar, gracias a las redes sociales las tenemos. Twitter, Facebook, Instagram y Youtube se convierte en espacios de opinión donde cada usuario da su punto de vista, y los premios de la NBA son un tema muy recurrente para esos espacios. Aunque lo malo es que tendremos que esperar dos meses más para saber si se cumplen las cábalas que tenemos propuestas.
La gala de premios, un acierto
El 1 de noviembre de 2016 la NBA anunció que harían una gala, los NBA Awards, para dar los premios de la fase regular, una decisión acertada para los jugadores, aficionados y para la propia liga. Los premios antes se daban por separado, cada uno en un día diferente con la primera ronda de Playoffs de por medio. Todos recordamos el año 2007 cuando a Dirk Nowitzki le dieron el galardón de MVP justo después de ser eliminados por los Warriors en primera ronda, en la cara se veía que al alemán no tenía ganas de recibirlo después de caer en primera ronda contra el octavo clasificado de su conferencia siendo ellos primeros. Luego para el aficionado es mucho más cómodo que se den todos los premios el mismo día que estar pendiente de Woj o Charania 24/7 de quien recibirá el galardón, alguna vez ha pasado que un día por no revisar no te das cuenta quien ha ganado premio al jugador más mejorado (mi caso en 2014 con Dragic). Y sobretodo para la liga, tener una gala y que millones de personas estén pegadas a su televisor u ordenadores viendo lo que pasa da grandes beneficios económicos a la propia NBA. El ejemplo más claro es la gala del balón de oro en fútbol, pasaron de dar el premio en una revista a emitir la gala en directo consiguiendo grandes beneficios para la FIFA. Esta decisión sin duda es un punto a favor para la NBA.

El problema las fechas
Como he comentado antes, estoy a favor de que se haga una gala de premios, en lo que estoy totalmente en contra es en las fechas que se tienen que dar. Este año entrega de premios se realizará el 25 de junio, 2 meses después de que se diese finalizada la fase regular, con los playoffs acabados y justo 4 días después del draft. Es decir, se darán no solo con la temporada terminada sino justo después que se inicie la siguiente con los jóvenes ya elegidos y algunos traspasos concretados. Con todo eso a muy poca gente le sigue importando quien ha ganado los premios sino que estarán celebrando si su equipo ha ganado el anillo, otros ilusionados por los jóvenes que están llegando a su franquicia o por el contrario decepcionados por los movimientos de su equipo en la noche del draft. Cierto es que las votaciones se cierran cuando acaba la fase regular por lo que los votos no están influidos por lo que pase en playoffs pero el tiempo de espera es demasiado con lo que la gente se acaba cansando u olvidando.
Silver te toca trabajar

Este caso tiene solución, Adam Silver ha intentado estos últimos años hacer cambios importantes en fechas de algunos acontecimientos como adelantar la pretemporada y alargar la fase regular para que los jugadores tengan más tiempo para descansar, dar días de descanso en la semana del all star o adelantar el trade deadline para que no afecte al partido de las estrellas, así que ¿por qué no dejar unos días de asueto entre fase regular y playoffs para la entrega de premios?. Al aficionado no le importa esperar un par de días más al comienzo de playoffs si hay una gala de por medio. Además que ayudaría a que los jugadores llegaran más descansados a la postemporada. Si esto no se ha cambiado debe ser porque la primera gala tuvo una gran acogida así que si algo va bien ¿por qué cambiar? Lo malo es que el año pasado triunfó por ser novedoso pero este año parece bastante difícil.