Hacer cálculos. Sumar, restar, cuadrar cuentas. La Agencia Libre es un momento complicado para los equipos, más allá del desafío que reside en convencer al jugador que te interesa para que firme y apueste por tu proyecto. Por eso, muchas veces vemos que un equipo no ofrece lo que debería darle a un jugador por no disponer de la cantidad de dinero suficiente, o le vemos darlo todo por alguien que sorprende y del que no se esperaba el movimiento.
Esos riesgos que toman los equipos al final se acaban confirmando en un futuro -cercano o lejano- como victorias o derrotas, y muchas veces el cambio de guión y destino de estas decisiones suele poder observarse con años de distancia. Pero como el momento presente es actualidad, inmediatez y cercanía a los sucesos, también se pueden observar victorias y derrotas en las aparentes buenas o malas decisiones de los equipos.
Y, por ello, vamos a hablar de las victorias y las derrotas de la primera noche de la Agencia Libre de 2019, con algunos protagonistas muy destacados.
victorias de la FA
La propia nba
En primer lugar, la competición es la principal ganadora. En un año en el que los Warriors se han debilitado por los 4 cuatro costados, jugadores clave abandonan sus respectivos equipos en busca de nuevas “aventuras”, y el vigente campeón está a una decisión de caer al fondo de la liga en los “Power rankings” en sus opciones de revalidar el título, el resto de equipos se han consolidado.
La Conferencia Este tiene varias cabezas reinantes, o equipos que están a un paso de reinar, más allá de los Bucks o los Raptors “con” Kawhi, como son los Brooklyn Nets, los Indiana Pacers, los Philadelphia 76ers o los Boston Celtics. Y el Oeste, con LeBron y AD yendo a por todo, ha recibido la grata sorpresa de la consolidación como candidatos de Utah Jazz y Portland Trail Blazers, Denver Nuggets con la extensión de Jamal Murray, o los GSW, que no darán nunca su brazo a torcer.
La #NBAFreeAgency2019 ha comenzado por todo lo alto y ha habido una multitud de equipos que ha confirmado nuevos fichajes, con decepciones y aciertos en varios casos.
Así que, si quieres estar al tanto de todo, aquí viene un hilo con lo que ha hecho cada equipo hasta ahora. pic.twitter.com/re83S1ktx2
— Solobasket (@solobasket) 1 de julio de 2019
sean marks
Sean Marks pasó por la NBA inadvertido, sin llamar mucho la atención en ningún momento de sus 11 años de carrera, promediando en total 3 puntos y menos de 10 minutos por encuentro. En su mejor curso, estas cifras se elevaron a 5 y a 15, respectivamente. Después, pasó a estar en operaciones de los Spurs y de los Austin Toros, su afiliado en la D-League por aquel entonces -2012- y en 2013 se puso bajo las órdenes de Greg Popovich en el banquillo de San Antonio, donde ganaría un anillo, completando así su colección con el que logró en 2005 también en la franquicia de las espuelas. Entonces, en 2016, y en el peor momento de su historia, los Brooklyn Nets lo nombraron General Manager. Y desde que llegó no ha parado de encadenar aciertos.
Hacerse con D’Angelo Russell, librarse del contrato de Timofey Mozgov, recuperar elecciones de Draft e invertirlas en la creación de espacio salarial, el descubrimiento de valores jóvenes con mucha proyección -Dinwiddie, LeVert, Kurucs- y, la última, postularse como uno de los principales candidatos al anillo en el Este para los próximos 4 años. Y es que tras el traspaso de Crabbe en junio a Atlanta, consiguió convencer a Kyrie Irving, Kevin Durant, DeAndre Jordan y Garrett Temple en la misma noche -o en los últimos días, aunque hay que guardar silencio por las normas anti Tampering-.
Y así, sin que nadie lo esperara, juntó a dos de los 10 mejores talentos de la NBA en un mismo equipo, y a expensas de como vuelva el 35, se coronó como el Mejor Ejecutivo “de lo que va de Agencia Libre” y, si se confirman los positivos augurios, en el Mejor del año.
Indiana pacers
Indiana, a finales de enero, sufría la peor sacudida que se podía recibir. Su mejor jugador, Victor Oladipo, sufría una lesión de rodilla que le dejaba fuera para lo que restaba de temporada y, como confirmó su GM hace unas semanas, también el comienzo de la próxima. Aún así, los Pacers pelearon, quedaron en 5ª posición en el Este y lucharon contra unos Celtics que fueron superiores. Además, tuvieron que sobreponerse a la firma de Kemba con Boston y al “no” de D’Angelo Russell. Y mientras tanto, Darren Collison se retiraba del baloncesto profesional.
Ante esta perspectiva, Indiana relanzó el vuelo y se llevó a Malcolm Brogdon con muy poco -una primera y dos segundas rondas del Draft- y a Jeremy Lamb, quitándole a Charlotte el poco talento ofensivo que le quedaba tras la despedida de Kemba Walker. De esta forma, y cuando Dipo’ se recupere, los Pacers tendrán un quinteto muy completo -es una pena que Young y Bogdanovic abandonaran el equipo- con Brogdon, Oladipo, Warren, Sabonis y Turner y un buen banquillo en el que estarán, de momento, McDermott, Lamb, Bitadze y Holiday.
la asociación de jugadores de la nba
Anoche, entre traspasos, firmas y extensiones, se alcanzaron y sobrevolaron los 3 mil millones de dólares en contratos. Esta cifra, que a simple vista parece una auténtica barbaridad -y lo es- está contextualizada en un momento de bonanza económica de algunos equipos, como los Knicks o los Kings; en la necesidad de retener el talento que tienen de otros, como los Bucks; o en la simple necesidad de alcanzar el mínimo en gastos en contratos que tiene un equipo, como los Knicks. Además de que la propia NBA ha sufrido un aumento enorme tras el nuevo contrato y reparto televisivo.
Por ello, podemos observar contratos como los siguientes:
- Tobias Harris: 180×5
- Khris Middleton: 178×5
- Nikola Vucevic: 100×4
- Al Horford: 109×4
- Harrison Barnes: 85×4
Estos, que sólo son algunos casos de todos los contratos que se repartieron esta pasada madrugada, muestran una cosa clara. Los jugadores tienen el poder. Y es que aunque no merezcan esa cantidad de dinero o los merezcan pero a largo plazo puedan ser una pesada losa en las finanzas y la flexibilidad de los equipos, las franquicias se ven obligadas a darles ese dinero porque “alguien” sí se lo va a dar, porque si no no lo pedirían. Y entonces se encuentran en una tesitura que favorece mucho a los jugadores, que tienen cogida “la sartén por el mango” pues saben que ese dinero lo van a percibir dando igual el equipo en el que caigan, provocando que estos puedan decidir aunque sea de forma indirecta en el rumbo a corto y medio plazo de las franquicias.
derrotas DE LA FA
Charlotte hornets
Si hay un claro perdedor, y una clara derrota, de lo que llevamos de Agencia Libre, la medalla de la “decepción” debe ser dada a la gerencia del conjunto de North Carolina, del conjunto de Michael Jordan. Y es que más allá de darle 58 millones a Terry Rozier -mucho dinero, muchos números, poco “upgrade”- han perdido a Kemba Walker por no ofrecerle una cifra cercana al máximo al que optaba, y además también se han quedado sin Jeremy Lamb. Y ahora su plantilla -10 millones por encima del límite de lujo- se encuentra formada por:
- Nicolas Batum
- Terry Rozier
- Marvin Williams
- Bismack Biyombo
- Cody Zeller
- Michael Kidd-Gilchrist
- Malik Monk
- Miles Brigdes
- Willy Hernangómez
- Dwyane Bacon
- Devonte’ Graham
Sin contar a los rookies, que aún no han firmado contrato, esta sería una plantilla que en la temporada 2018-19 habría promediado 84 puntos por partido. Una cifra que no se vería en un equipo NBA desde que Denver lo hiciera en 2003.
Ricky Rubio
El caso de Ricky es un caso de contexto. Por donde ha estado, donde ha podido acabar y donde ha terminado finalmente. Y es que pasar de Utah -opciones de título- e Indiana -opciones de PlayOffs y quizá algo más- a Phoenix -sin opciones de PlayOff- es una bajada de nivel y de aspiraciones importante. El dinero, evidentemente, es una buena opción, al igual que el encaje y el “fit” deportivo que pueda tener con Devin Booker o DeAndre Ayton, además de que tendrá muchos minutos como titular.
La cuestión a tratar es, entonces, qué es más importante o relevante. Sentirse querido y rindiendo a un nivel individual elevado, pero con menos aspiraciones colectivas, por lo menos a priori. O no dar ese nivel como jugador pero si llegar a altas cotas competitivas. Y, conociendo la carrera que ha tenido, o sufrido, Ricky en la NBA, alcanzar la comodidad es tal vez incluso más destacable, y necesario.
Además, más allá de estas victorias y derrotas tenemos conjuntos que se encuentran en una línea difusa. Entre ellos tenemos el hecho de que Dallas ha “perdido” con el resto de equipos por los Agentes Libres que les interesaban pero han renovado a Porzingis, que los Knicks no han apostado por Durant pero sí por el proyecto de futuro de sus jóvenes, y los Sixers han dado mucho dinero por Tobias Harris pero han conseguido formar un mega-quinteto defensivo con la llegada de Al Horford y con el posible cambio de Butler a Miami por Josh Richardson.