Lleida Bàsquet ha apartado del equipo a Corey Brewer por la actitud rebelde que ha mostrado en las últimas semanas. La gota que ha colmado el vaso fue la durísima falta que cometió en los últimos instantes del severo correctivo que recibió su ya ex-equipo el pasado viernes en el Pazo dos Deportes de Lugo (90-63), totalmente innecesaria. Además, esta acción antideportiva supuso su expulsión del encuentro al acumular cinco faltas en apenas 18 minutos. No era la primera vez que ocurría un hecho de estas características, pues en la mayoría de partidos que ha disputado ha protagonizado algún rifirrafe con integrantes del equipo rival. No obstante, la decisión se ha fundamentado en los varios expedientes que tenía abiertos por saltarse el código interno del club. Sin ir más lejos, intentó incitar a la plantilla a plantarse y no entrenar durante el pasado mes en que el equipo experimentó retrasos en el cobro de las nóminas pertinentes, un gesto que no gustó nada a los dirigentes y técnicos de la entidad.

El veterano escolta de 36 años había disfrutado de pocos minutos en las últimas semanas, en las que además sufrió una lesión muscular en un brazo. Ya recuperado de sus molestias, no disputó un solo segundo en la victoria del Lleida Bàsquet en Alcázar y tan solo seis minutos en el agónico triunfo ante el Canarias en que terminó con valoración negativa. El cuerpo técnico le dio una nueva oportunidad ante el Breogán pero no fue suficiente para revertir su imagen en lo que a comportamiento se refiere, a pesar de anotar siete puntos.

De todos modos, la actitud de Corey Brewer dentro de las canchas, al menos durante la primera vuelta de la competición, ha sido intachable y se había mostrado como el principal referente exterior en tareas defensivas del conjunto de Raventós. El propio técnico había declarado en más de una ocasión que era "el alma del equipo" y un ejemplo para sus compañeros, además de un líder en los momentos calientes de los encuentros. Tampoco dudaba en ser el primero en animar a sus compañeros desde el banquillo, como si de un entrenador más se tratara, por lo que sorprende este desenlace negativo e inesperado que ha tenido su, probablemente, última experiencia deportiva en España. No obstante, sus números en los 20 partidos que ha disputado en la Adecco Oro no han sido especialmente brillantes. Ha promediado 8 puntos, 1.4 rebotes, 1.5 asistencias y 6 tantos de valoración por encuentro, jugando una media de 19 minutos. Aún así, en su mejor actuación de la temporada superó con creces estas cifras, pues consiguió 33 puntos ante el Ford Burgos que, además de convertirlo en el máximo anotador de la jornada, fueron decisivos para que el Lleida lograse una victoria de prestigio.

Corey Lavelle Brewer es un base-escolta estadounidense que no ocupa plaza de extracomunitario al estar casado con una española. Inició su formación baloncestística en la Universidad de Oklahoma, enrolándose posteriormente en ligas comerciales de Estados Unidos antes de dar el salto a Europa de la mano de Marco Crespi en la temporada 2000-01 para jugar en el Biella de la Legadue donde fue máximo asistente de la competición con 4.3 asistencias a las que añadió 17.3 puntos y 3.8 rebotes. El técnico transalpino lo trajo a Caja San Fernando, equipo al que guió hasta la Copa del Rey junto a Antonio Granger con buenos números: 19 puntos, 4.7 rebotes, 3 asistencias y 1.6 robos de balón. Sus actuaciones con el conjunto de Sevilla no pasaron inadvertidas y firmó por Estudiantes, equipo con el que disputó la ULEB Cup (dos semifinales consecutivas) y llegó a la final de la liga ACB en 2004. Logró convertirse en un ídolo de la hinchada estudiantil, la cual le sacó el apodo de "Anaconda" por el que aún se le conoce a día de hoy, durante dos temporadas para emprender nuevos retos en otros países la temporada siguiente como ascender a la histórica Virtus Bolonia (2004-05) o llevar a Euroliga al Aris de Salónica griego (2005-06), con el que logró también el subcampeonato de ULEB. La temporada posterior militó en el Spirou belga y, a final de temporada, volvió a cambiar de equipo firmando por el KK Zadar croata con el que logró el campeonato de liga de Croacia y participar en la Final a Cuatro de la Liga Adriática. La temporada 2008-09 Brewer la inició en el ASK Riga de Letonia, con el que alcanzó 13 puntos, 4 rebotes y 3.5 asistencias en su campeonato de liga y 19 puntos, 4.3 rebotes y 2 asistencias en la Eurocup. Esa misma campaña acabó volviendo a España, de nuevo a Estudiantes, como sustituto de Cummings promediando 9.8 puntos, 2,2 asistencias, 1.6 rebotes y 1.3 robos de balón. "Anaconda" Brewer contribuyó activamente a la salvación del MMT Estudiantes aunque no renovó con "el equipo de su vida". La pasada campaña la empezó sin equipo y la finalizó en las filas del Pinar Karsikaya de la TBL turca sin destacar demasiado. El pasado verano firmó un contrato con el Lleida Bàsquet, debutando así en la Adecco Oro. En los pocos meses que ha estado en tierras catalanes se había ganado un hueco en los corazones de la afición del Barris Nord por la entrega que añadía a cada partido que jugaba, aunque en las últimas semanas su comportamiento fuera de la pista ha precipitado su abrupto desenlace con la entidad leridana. Un triste final para la carrera del americano, un jugador emblemático en el baloncesto de nuestro país. Veremos si sigue luchando, a los 36 años, por continuar su carrera deportiva en el baloncesto de alto nivel, aunque seguramente sea lejos de nuestras fronteras.

El cuerpo técnico del Lleida Bàsquet, con Josep María Raventós y Joaquín Prado a la cabeza, deberá decidir ahora, con el beneplácito de la directiva del club, si afronta el fichaje de un sustituto o bien opta por preservar la delicada economia de la entidad. En caso de producirse la segunda opción, el canterano Oriol Jorge tendría que disputar más minutos y Marc Rubio obtendría un rol más determinante dentro del equipo. Cabe recordar que, en caso de intentar abordar una nueva incorporación, esta debería concretarse antes del 28 de febrero, fecha límite para realizar traspasos o fichajes en la Adecco Oro.