Tarde movida en las oficinas del Força Lleida Club Esportiu. La entidad leridana ha anunciado tres nuevas incorporaciones para su proyecto en la Adecco Oro. Todas ellas con unos denominadores comunes: juventud, inexperiencia y muchas ganas de hacerse un hueco en el baloncesto europeo. El estadounidense James Johnson y el argentino Juampi Sutina integrarán la pareja de escoltas del equipo de Joaquín Prado. Por su parte, el canadiense con pasaporte de Chad Djim Bandoumel dará consistencia a la pintura. La guinda de la plantilla puede ser el pívot Pierre Oriola, que con toda probabilidad llegará a Lleida en calidad de cedido por el Assignia Manresa.

James Johnson es un escolta norteamericano de 22 años y 1.82 metros de altura. Nacido en Queens (Nova York), vivirá en Lleida su primera experiencia profesional tras desarrollar todo su ciclo universitario en Quinnipiac Bobcats (NCAA), donde ha jugado 127 partidos con un rol importante. La última campaña, en su año sénior, promedió 16.5 puntos, 3.3 rebotes y 3.5 asistencias en 36 minutos de juego por encuentro.

Johnson llega a la Adecco Oro con la vitola de anotador. Destaca por su buen tiro exterior (porcentajes cercanos al 40% en triples) y, además, está capacitado para jugar de base. El último año se ha convertido en el máximo anotador histórico de los Quinnipiac Bobcats, universidad en la que también se formó James Feldeine, con quién llegó a coincidir. En la posición de escolta del Força Lleida le acompañará Juampi Sutina, viejo conocido de la afición leridana tras su paso por el Lleida Basquetbol.

Juan Pablo Sutina Bustamante es un escolta argentino de 22 años y 1.92 metros de altura. Posee la nacionalidad española y redondeará un perímetro que integran Miquel Feliu y Sergi Pino, además del ya mencionado James Johnson.

Nació en Argentina el 9 de febrero de 1990 e inició su formación baloncestística en su país natal. Concretamente, en el Club Atlético Independiente de Avellaneda. Posteriormente, recalaría en dos clubes más de la localidad de Salta antes de volar hacia España con apenas trece años para enrolarse en las filas del Janubio canario. Los coordinadores de la base del Lleida Bàsquet no tardaron en fijarse en él y, tan solo una temporada después, Sutina ya formaba parte del cadete del club catalán. Militó en el Barris Nord hasta que concluyó su formación. Fue en la campaña 2008-2009, en la que militó en el C.B. Monzón (EBA), vinculado de los ilerdenses. Anteriormente ya había incluso debutado con el primer equipo del Plus Pujol Lleida (Adecco Oro), en un partido ante Alerta Cantabria que terminó con dos puntos en su casillero. Volvió a la plantilla del Lleida Bàsquet tras el descenso administrativo del club a la liga EBA. Con el regreso del club a la Adecco Oro sólo una temporada después se quedó sin sitio en la plantilla y regresó a Monzón. En febrero de 2011 le llegó la oportunidad de probar suerte en la Adecco Plata, pues Mateo Rubio contó con él para su ADT Tarragona.

El pasado curso tuvo que regresar a la liga EBA ante la falta de oportunidades en categorías superiores. Jugó en el Recinor Ferrol con unos promedios de 14.9 puntos (66% T2, 35% T3, 90% TL), 3.9 rebotes, 1.7 asistencias y 16.2 de valoración en más de 31 minutos por partido. El argentino puede ocupar todos los puestos exteriores gracias a su intensidad defensiva, agresividad y eficiencia en el tiro. Deberá aportar todo ello saliendo desde el banquillo, en los minutos que le conceda el técnico Joaquín Prado.

Por su parte, Djim Bandoumel es un ala-pívot canadiense de 25 años y 2.03 metros de estatura. Posee pasaporte de Chad (cotonou), por lo que no ocupará plaza de extracomunitario. 

A pesar de nacer en Nigeria, se crió en Quebec (Canadà). Su formación baloncestística tuvo lugar en la Universidad de Idaho (NCAA), donde promedió en su año sénior 8.7 puntos, 5.2 rebotes y 1.5 tapones. Se convirtió en uno de los mejores taponadores de su conferencia y en un jugador carismático gracias a su expresividad y entrega. Atlético y explosivo, corre muy bien la pista y es capaz de jugar por encima del aro, dotando de espectacularidad a sus acciones. Muy buen reboteador y taponador, destaca especialmente en la faceta defensiva. Debe pulir su tiro de media distancia, con el que cada vez va cogiendo más confianza.