El Real Madrid SE LA JUEGA ante un Bayern envuelto en la polémica

 

El Real Madrid de baloncesto tendrá que superar su última prueba de fuego para entrar a los Playoffs de la Euroliga. Tras la derrota en casa ante el Paris Basketball, el equipo de Chus Mateo se lo jugará todo este viernes frente al Bayern Múnich, que llega al Movistar Arena con la moral alta, pero también con el foco mediático encima por la polémica generada tras su victoria ante el Estrella Roja.

El conjunto bávaro logró una épica victoria en la prórroga (97-93) ante el Estrella Roja para ganarse el derecho a luchar por la última plaza de acceso a cuartos. Sin embargo, lo ocurrido tras el pitido final ha eclipsado lo deportivo.

 

El partido terminó con tensión máxima y un enganchón entre el técnico del Bayern, Gordon Herbert, y el veterano serbio Nikola Kalinic, que estuvo cerca de ir a mayores. Aunque ambos fueron separados por compañeros y miembros de los cuerpos técnicos, el episodio dejó una imagen desagradable.

 

 

Con ironía, Herbert intentó restar importancia a lo sucedido con un jugador que nunca tiene pelos en la lengua: “Estábamos hablando de los resultados de hockey de anoche”, declaró el canadiense. “Yo estaba decepcionado porque mi equipo perdió. Hablamos sobre los playoff de hockey que comienzan en breve”, añadió en tono sarcástico.

Más allá del incidente entre Herbert y Kalinic, lo que ha desatado aún más controversia han sido las duras declaraciones del entorno del Estrella Roja, que ya ha tenido algún que otro episodio curioso esta temporada, sobre el arbitraje del partido.

 

El técnico griego Ioannis Sfairopoulos mostró su indignación por una acción clave en los últimos segundos del tiempo reglamentario, que pudo haber cambiado el destino del encuentro: “Creo que al final del partido fue una falta ofensiva que no pitaron. Pidieron una falta defensiva”, dijo a EuroLeague TV.  “Fue una falta ofensiva antes de la defensiva. Deberían haber sido dos tiros libres para nosotros y el partido se habría acabado”.

 

Pero el momento más tenso llegó con las palabras del presidente del Estrella Roja, Zeljko Drcelic, quien no se mordió la lengua tras lo vivido en Múnich: “Lo que vimos toda la temporada, lo vimos también esta noche. Nadie nos honra, y nos tratan como si debiéramos ser honrados por jugar. Les pagáis para que os roben... ¡Qué vergüenza!”, declaró desde la pista del Audi Dome. “Los errores directos de los árbitros llevaron el partido a la prórroga. No tengo palabras para el comportamiento del entrenador rival; es vergonzoso”.

Mientras el Bayern llega con el foco fuera de lo deportivo, el Real Madrid se juega su continuidad en la competición. Los blancos no pudieron cerrar su clasificación directa y ahora deberán superar este último escollo en casa si quieren mantenerse vivos en la lucha por el título.

De lograrlo, el premio no será menor: una eliminatoria contra Olympiacos, líder de la temporada regular, que espera rival en cuartos. Será un partido sin red para los de Chus Mateo. Pero también para el Bayern, que llega envuelto en polémica, pero con el objetivo claro de sellar su billete para los Playoffs.