La gran sorpresa de los Juegos Olímpicos llegó en la penúltima jornada de la primera fase de la mano Nigeria, que recordó el “Angolazo” de 1992 al convertirse en el primer país africano en derrotar a uno no africano desde entonces. Este resultado aprieta el grupo en el que también compite España y todas las selecciones llegan a la jornada final con opciones de clasificarse para los cuartos de final.
Nigeria arrancó el choque mostrándose contundente en la pintura de la mano de Alade Aminu y acertado desde el perímetro, con un Michael Umeh que encestó 3 triples en el primer cuarto. Sin embargo, Bojan Bogdanovic mostró por qué encabeza la tabla de anotadores de la cita olímpica y sumó 10 puntos para abrir la primera brecha en el marcador a favor de la selección croata (28-21). La vigente campeona del continente africano no estaba dispuesta a quedarse sin opciones de pasar a la ronda eliminatoria y anotó 8 puntos consecutivos para dar la vuelta al marcador, una vez más, gracias al acierto desde más allá del arco (39-43).
En la vuelta de los vestuarios y motivados por el resultado, los africanos salieron decididos a luchar por la victoria y consiguieron ir ampliando la ventaja conforme pasaron los minutos, liderados en ambos lados de la pista por un Ike Diogu que se mostró imparable en la zona. Croacia no encontró la forma de hacerles frente y la ventaja superó la decena antes de llegar al último período (56-70). Cinco puntos consecutivos de Bogdanovic señalaron el camino a la selección europea para acercarse a 4 tantos, pero tanto Josh Akognon como Ebi Ere contestaron desde el triple y acabaron cerrando una sorprendente victoria que les mantiene vivos en el campeonato (76-90).