Octavos de Final (Barcelona)

Estados Unidos 86 – México 63

LA CRÓNICA:

Estados Unidos salía algo frío, fallón en el lanzamiento de larga distancia pero con un Faried atento en ambas canastas para barrerlo todo y otorgarle a su equipo segundas oportunidades. Así, y con Curry anotando desde lejos, parecía que el partido podía acabar tras apenas cinco minutos, cuando se consumaba el 13-2. México se parapetó tras la defensa zonal y obtuvo buenos resultados, un parcial de 0-7 que mantenía la igualdad una vez sobrepasado el ecuador del primer cuarto. La dupla Curry-Faried volvía a funcionar y además, 'Coach K' introducía a su segunda unidad para mantener el nivel de intensidad. El resultado: Estados Unidos se iba con diez de ventaja al final del primer cuarto: 23-13. 

Una vez amasada la renta básica de los diez puntos, Estados Unidos tan solo tenía que mantener el camino adoptado para lograr la victoria. Ayudaba también la cantidad de errores cometidos por el equipo mexicano, que curiosamente caía más veces en la tentación de cometer pasos que su rival. Únicamente Ayón parecía tener puntos en sus manos para México y eso no era suficiente, la renta se incrementaba hasta el 35-19 que marcaba el electrónico a cinco minutos para el descanso. El partido se atascaba y en esos momentos tenía que aparecer de nuevo Faried para otorgarle segundas oportunidades al conjunto estadounidense. En el otro aro, Ayón tomaba las riendas de la anotación y eso lo pagaba México que se iba al descanso con quince de desventaja: 42-27. 

El tercer cuarto comenzó como había acabado el segundo, frío. Tan sólo el talento y acierto de Curry le daba algo a la parroquia del Sant Jordi con lo que exclamar admiración. Con eso y la defensa, la diferencia se iba hasta los veinte, 47-27. Más de Curry para gozo de los asistentes al partido, rompiendo el partido definitivamente. Se deshizo ahí el equipo mexicano, bajando notablemente la intensidad defensiva, lo que sumado a la nula capacidad anotadora mostrada en el cuarto llevaba la ventaja estadounidense hasta los treinta a un minuto de acabar el cuarto, que finalizaba con 66-38. 

Con el encuentro ya decidido, poco más había por ver. Ambos conjuntos intercambiaron canastas durante los últimos diez minutos, lo que servía para ver a los menos habituales de ambos equipos. Al final, victoria sin paliativos de Estados Unidos que ya está en cuartos tras ganar por 86-63.

LAS CLAVES:

  • Stephen Curry: No es que el partido estuviera abierto, pero la actuación del de los Warriors en el tercer cuarto ha sido lo mejor del partido. 11 puntos en un suspiro para romper el partido. 
  • Los triples de México: El equipo llegaba con un 40% de acierto desde el triple y apenas fue capaz de anotar 3 de 14 en el partido contra Estados Unidos. 
  • Los interiores estadounidenses: No son tipos brillantes y su aportación puede ser cuestionable, pero son auténticos obreros quele otorgan recursos suficientes a EE.UU. Rebote, intimidación y segundas oportunidades. 
  • Ayón y poco más: México mostró sus carencias ofensivas en el partido de cuartos en el que tan solo Gustavo Ayón estuvo a la altura con 25 puntos. 
  • Poco brillo estadounidense: Estados Unidos fue capaz de superar los minutos en los que tuvo poco brillo jugando con mucho oficio. 

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ASÍ LO VIERON: 

Gustavo Ayón (México): "Somos un conjunto de seres humanos muy bueno, siempre estamos felices, se gane o se pierda y esperamos seguir en esa línea para en un futuro conseguir cosas buenas para la selección". 

"Me he sentido muy bien del hombro, el que me ha dado molestias ha sido el bueno, pero al final el sacrificio de pasar todo el verano sin estar con la familia ha merecido la pena". 

"Voy a hablar con mi agente y tomaré la decisión para que mi familia esté bien, sea donde sea". 

Jorge Gutiérrez (México): "Fue una actuación histórica pero no estamos satisfechos, queremos seguir mejorando, queremos seguir poniendo el nombre de México en este tipo de competiciones". 

"Necesitamos seguir mejorando individualmente". 

Kenneth Faried (Estados Unidos): "No importa contra quien jugemos, tenemos que jugar duro; queremos ganar cada partido, queremos volver a casa con el oro, esa es nuestra misión". 

"Somos un equipo, no hay ningún egoista que quiera meter veinte puntos cada partido, respetamos el juego y respetamos cada equipo contra el que jugamos". 

"No tenemos nada que ver con el 'Dream Team', es completamente diferente".