¡Fracaso! Tan solo una palabra, una contundente palabra que resume el paso del Panathinaikos por esta Euroliga. Un fracaso que se ha venido gestando durante todo este Top 16, para acabar confirmandose con una derrota en Belgrado ante el Partizan por 82 a 73, consiguiendo así una machada histórica.
El vigente campeón de Europa, se la jugaba a cara o cruz ante una de sus bestias negras, un equipo que en los últimos años se le ha dado francamente mal y en una pista que siempre ha destilado una magia especial. Precisamente fue esa magia, la de un Pionir abarrotado la que guió a un equipo de guerreros, a ganar a la plantilla más imponente del continente, liderados por un Milt Palacio que está haciendo una temporada descomunal, liderando, dirigiendo, anotando y decidiendo, hoy no fue menos. Un equipo, en el que hay dos líderes Pekovic y Palacio– pero en el que nadie es imprescindible, porque cada uno tiene claro su papel como la veteranía de Dusan Kecman o el juego todoterreno del jovencísimo Tepic-, pero que por encima de todo existe una palabra: EQUIPO.
Curiosamente, esto es lo que le falta al Panathinaikos, toda una colección de estrellas, una auténtica galaxia, como hace años que no se veía, pero que no ha sabido jugar en toda la temporada como equipo. Se veía venir esta caída, ya que han jugado toda le temporada muy mal, pero su bache en el último mes ha sido especialmente grave. Obradovic, lleva dos años, practicando un juego ofensivo escaso, con el que había conseguido resultados gracias al juego defensivo. Pero este año, el bajón defensivo, ha conseguido que el ocaso del juego de bloqueo directo, penetración y juego por parejas, llegue al ocaso en la polis griega de Atenas.
El mal juego, y los egos desmesurados, pueden ser el fin de la era de Obradovic en Atenas, y el fin de la fanfarronería sin límites de los hermanos Giannakopoulos Podemos fichar a quien queramos, cuando y como queramos- que fueron el comienzo de esta debacle sin límites.
King Solomon
Un Abdi Ipekçy con un ambiente espectacular fue el lugar donde fue coronado el Rey Solomon. El público lo coronó, con pancartas en referencia a su coronación, y el respondió en su día. Es un jugador al que le va la marcha, ya lo demostró en su soberbia actuación en la Final Tour ante el Tau Cerámica precisamente, y hoy lo ha vuelto a hacer. Salió al igual que su equipo enchufado, y enchufando, formando con Basak, un dúo letal desde el exterior. Los otomanos que se jugaban el todo por el todo, sentenciaron por vía rápida, ante un Tau, que utilizó el partido para experimentar, y salir de compras por el Gran Bazar de Estambul.
Los vitorianos ahora intentarán conseguir la Final Four, en la eliminatoria ante el sorprendente Partizan, mientras que los turcos, serán la perita en dulce contra la que se encontrará el Montepaschi.
Sin gasolina
Lietuvos Rytas, ganó su grupo en la liga regular, llegaba a este Top 16 a un grupo muy favorable para sus intereses, pero poco a poco se la ha ido acabando la gasolina en una temporada que se le ha hecho excesivamente larga, sobre todo motivada por la plaga de lesiones que han sufrido. Hoy los americanos del Aris fueron demasiado para el conjunto de Trifunovic.
Al final todo esto ha ido sumando, y han acabado por caerse de la competición con una derrota en Salónica. Necesitaba de la ayuda del Tau, pero finalmente han sido ellos mismos los que se han encargado de salir de la Euroliga, por segunda vez a las puertas de los cuartos de final.
Con retales rumbo a la Final Four
Montepaschi Siena cumplió con su parte del contrato al conseguir una fácil victoria en el Pala Mens Sana, ante un Efes que ya tiró sus opciones por la borda al cortar a tres americanos Wright, Nicholas y Woods– tras el affaire de Belgrado. Sato y McIntyre, lideraron a los toscanos, con 25 puntos y 14 puntos y 7 asistencias respectivamente. Curioso es el caso de Romain Sato, que llegó a Europa vía Lega Due, para recalar posteriormente en el Barcelona, donde pasó sin pena ni gloria. Llegó a Mens Sana, un equipo creado con muchas sobras de otros equipos, que se ha convertido en una de las mejores squadras del continente.
Sato se ha convertido en un jugador muy polivalente, con un físico y capacidad atlética espectacular, a la que ha añadido una sorprendente capacidad anotadora, sobre todo sorprendente su mejora en el tiro exterior.