CSKA no perdona el mal final de encuentro de Gescrap Bizkaia (79-60)

CSKA de Moscú volvió a demostrar el porqué de su etiqueta de favorito para llevarse la presente edición de la Euroliga. Gescrap Bizkaia se mantuvo en el partido haciendo la goma durante buena parte del mismo, pero fue durante castigado por los moscovitas en una recta final en la que los de Katsikaris echaron por tierra la buena labor realizada hasta ese momento. Ganó CSKA por 79-60 con un Milos Teodosic imperial, que coqueteó con el triple-doble (18 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias).

Gescrap Bizkaia fue castigado duramente en el comienzo del encuentro. Los bilbaínos cometían hasta 11 faltas personales en el primer periodo, pese a que su defensa no destacaba precisamente dura. Muchas faltas innecesarias y CSKA que no perdonaba una. Los rusos, además, se mostraban casi infalibles en el tiro exterior (5/8 en triples)., con un Andrei Kirilenko omnipresente 10 puntos, 2 rebotes y 2 tapones. El chaparrón al final del primer periodo cesaba y el resultado final era de 26-15.

A partir de ese momento, Gescrap Bizkaia se asentó en la cancha, empezó a jugar con mayor criterio y minimizando sus carencias ante un CSKA de Moscú al que se le mojaba la pólvora y dejaba de anotar con fluidez. La pareja de bases –Aaron Jackson y Raül López– era los mejores en un equipo bilbaíno que hacía la goma sin perder de vista en ningún momento en el marcador al CSKA de Moscú. Al descanso, el resultado era de 41-36, con un parcial favorable en el segundo periodo de 15-21 para los vascos. Los mismos parámetros se mantendrían al regreso de vestuarios; Gescrap aguantaba a rebufo de CSKA y lograba neutralizar los intentos de ruptura del encuentro por parte de los rusos. Así, a dos minutos del final del tercer periodo el CSKA se ponía 12 arriba (58-46). Momento crítico que sería superado por Gescrap Bizkaia gracias a un par de triples de Raül López, que dejarían al equipo bilbaíno muy metido, de nuevo, en el partido (58-52).

En el comienzo del periodo definitivo Gescrap Bizkaia tuvo la oportunidad de situarse a la altura del CSKA de Moscú, pero las ideas parecían acabarse en los vascos. Los ataque se rifaban desde la línea de 6.75, perdiendo el buen criterio de minutos anteriores. Milos Teodosic olía la sangre de su víctima y tomó, con Jamont Gordon como mejor escudero, las riendas del encuentro para fulminar definitivamente a su rival. Un fallo de Raül López en el triple para que en la siguiente acción el genio serbio anotara desde el 6.75 dejaba las cosas en lo que pudo ser un -3 para los visitantes, en un +9 para el CSKA de Moscú (63-54, min. 33). Gescrap Bizkaia decía adiós al partido, sucumbiendo finalmente por 19 puntos, (79-60), castigo demasiado duro para la buena labor realizada durante muchos minutos. Pero es que el CSKA no hace prisioneros en la batalla.

Exhibición de Milos Teodosic en la cancha, un talento puro que domina todo lo que ocurre en la cancha, recordándonos por momentos al añorado Drazen Petrovic. También dio lo mejor de si Andrei Kirilenko (20 puntos, 12 rebotes y 2 tapones), un auténtico pulpo cuyos tentáculos llegan a todas partes en la cancha. Un lujo poder verlos en acción el próximo miércoles en Miribilla. Un equipo que juega como los ángeles, un basket de muchos quilates. Anotaron 23 tiros de campo y sumaron 23 asistencias. Datos que hablan a las claras sobre como mueven la pelota en ataque con un Teodosic como mariscal de campo. Muchos podrán decir dentro unas décadas que vieron a "aquel CSKA de Moscú de los Teodosic, Kirilenko y compañía". Cuando pasen las semanas, el aficionado bilbaíno sabrá valorar en su medida el hito logrado por el joven club vasco.

En Gescrap Bizkaia, Jackson (12 puntos) y López (13 puntos) fueron los jugadores con mayor acierto en ataque, con buenos minutos de Dimitrios Mavroeidis (9 puntos y 3 rebotes), optimizando los balones que le llegaron en las cercanías del aro. 3-4 posesiones mal gestionadas por los de Katsikaris y la superioridad moscovita en el rebote (45-30, incluyendo 14 rebotes ofensivos para CSKA) fueron su sepultura ante un equipo con marchamo NBA. Por lo demás, buena labor en líneas generales.

Montepaschi Siena – Olympiacos : Los italianos salvan un match-ball

Por Alberto Rubio

En un final de infarto muy igualado, el Montepaschi Siena logró una sufrida victoria que le permite seguir vivo en la eliminatoria. Ivkovic supo jugar todo el encuentro con el estado de nervios de los italianos, muy afectados por el tropiezo del primer enfrentamiento.

Los griegos salieron lanzados y, con un Pero Antic dominador (11 puntos y 15 de valoración en el primer cuarto) y con Mantzaris secando a McCalebb y convirtiendo el partido en un 4 para 4, comenzaron dominando el marcador. Pero McCalebb aprovechó el descanso de su perro de presa y con 6 puntos en el final del cuarto, superando la débil defensa de Acie Law, dejó el electrónico favorable a su equipo (22-18).

Olympiacos pagó en el segundo cuarto la falta de banquillo. Montepaschi logró desarbolar a su rival. El ritmo de ambos equipos mostrado en el primer cuarto, que fue espectacular, bajó por parte de los helenos, y Rakocevic, pero sobre todo, Lavrinovic, rompieron el encuentro y pusieron el electrónico muy favorable a su equipo. Amenazaban por romper el partido, pero los 9 puntos de Printezis lograron mantener con vida a los griegos al descanso (48-35).

Tras el paso por vestuarios, era vital salir bien por parte de Olympiacos para seguir en el encuentro. Keselj tomó el mando en ataque y con un 0-6 despertaba los fantasmas de los italianos. El brazo se encogía y el balón quemaba, necesitaba algo a lo que agarrase Siena para mantenerla ventaja.

Y esa bandera la cogió McCalebb. Sus 12 puntos casi consecutivos permitieron resucitar a los italianos e incluso terminar ganando el tercer cuarto (67-53). Pero los fantasmas estaban en la cancha y se sentía en el Pallaestra.

Ivkovic supo transmitir a su equipo que había opciones de ganar. Y no decayeron los helenos, que volvieron a meterle picante al encuentro. La tensión crecía con cada canasta griega y, ha falta de respuesta por parte italiana, la diferencia se reducía. Llegó hasta los dos puntos ha falta de menos de dos minutos (75-73).

Entonces aparecieron las estrellas italianas. Un David Andersen que no había tenido un buen partido admitía responsabilidades y, sacando personales que le llevaban al tiro libre, sumaba para su equipo.

Llegó entonces un intercambio de tiros libres entre ambos conjuntos con los italianos con ligera ventaja. Se notó la tensión en los errores finales desde la personal de McCalebb, Andersen y los dos que erró Rakocevic, que daba a Olympiacos bola a falta de 5 segundos para vencer.

Pero McCalebb robaba la bola cuando Printezis intentaba cruzar la pista y daba así la victoria a Montepaschi Siena (81-80) que les permite llegar vivos a El Pireo, donde deberán vencer al menos un encuentro la próxima semana para seguir vivos y lograr devolver la eliminatoria a Italia en un hipotético quinto encuentro.