Tiempos de cambio en Sopot. El Prokom no ha conservado ni el nombre que durante tantos años ha pasado por la Euroliga, y paseando su nueva denominación "Asseco Prokom", intentará lavar la imagen que han ido dejando en las últimas campañas, donde prometían mucho pero no conseguían casi nada.
Herencia del año pasado
Nada. O casi nada.
Aparte del entrenador Tomas Pacesas y del capitán indiscutible Filip Dylewicz, el Prokom ha derribado por completo hasta los cimientos de su equipo para reconstruir sobre una base limpia y empezar, por fin, con unos cimientos fuertes a base de hombres que creen un equipo y no nombres que atraigan la atención para ver cómo fracasan en Europa año tras año.
Pacesas ha sido todo en el Prokom: jugador activo, base suplente, líder del vestuario, enlace de la plantilla con el entrenador "de toda la vida" Eugeniusz Kijewski, del que se convirtió en asistente cuando se retiró de las canchas y al que sustituyó cuando por fin fue destituído el año pasado.
Tomas Pacesas es un hombre con tablas, que está ganando experiencia y que quiere hacer las cosas por orden. Conoce la Euroliga desde dentro, y sabe qué es lo que necesita un equipo para mantenerse en ella con dignidad. Por eso ha decicido poner punto y final a la política de sonados fichajes que acabó con sonoros fracasos. Adiós a los Gurovics, Wagners, Sows… corren otros tiempos en Polonia.
El único jugador que se mantiene es Filip Dylewicz, que cumple su duodécima temporada en el equipo polaco y tendrá la difícil misión de ejercer de capitán y conseguir de sus nuevos compañeros un vestuario unido, así como una implicación con el club polaco.
También sigue Adam Lapeta, o mejor dicho vuelve, ya que el joven pívot de 2,17 acabó la pasada temporada jugando en el filial del Prokom.
Los nuevos jugadores
El base del equipo será David Logan, el máximo anotador de la pasada Liga Polaca, y el hombre que llevó al Torow a ganar la liga regular y quedar finalista en el playoff. A sus 26 años, está empezando a explotar tardíamente tras una carrera que ha transcurrido por Israel y hasta tres equipos polacos.
Le acompañará en el puesto Aleksej Nesovic, un viejo conocido de la afición de Fuenlabrada que no acabó de encajar en la ACB ni en los esquemas de Luis Casimiro y acabó emigrando al Aris tras pocas jornadas la pasada campaña. Parece que en Polonia sí está encontrando su sitio y será capaz de demostrar sus dotes anotadoras y mejora en la dirección.
Daniel Ewing también será importante en el backcourt. Formado en Duke y con dos años NBA a sus espaldas jugando para los Clippers, afronta su segunda campaña en Europa tras una temporada en el Khimky. Debería superar los 10 puntos por partido. Completan las posiciones de base y escolta los jugadores polacos Tomasz Swietonski y Przemyslaw Zamojski, ambos destacados tiradores de la camada del 86.
En la posición de alero nos encontramos con Piotr Szczotka, un veterano polaco de 1,97 que ya tiene 7 años de experiencia en la liga polaca. Destaca por su físico y habilidades defensivas, y será un complemento muy útil.
En el interior juegan varios viejos conocidos de la Euroliga. El primero de todos es Koko Archibong, que disputó la competición con el Alba de Berlín dando muestras de su excentricidad y su gran físico. Le acompañará, normalmente saliendo desde el banquillo, Pat Burke. El ex-jugador de Baskonia, Gran Canaria y Real Madrid da un nuevo paso en su periplo europeo. Seguirá aportando dureza bajo aros y destellos de calidad en el ataque.
El fichaje estrella ha sido Ronnie Burrell, un 2,04 formado en la Universidad de NC-Greensboro y que ya llevaba dos años en el caladero alemán. La Bundesliga le ha servido como escaparate tras promediar 12 puntos y 5 rebotes el año pasado con el Telekom Baskets Bonn, liderando a su equipo hacia la final del playoff alemán. Completa la plantilla una extraña apuesta de Pacesas: Adam Hrycaniuk, un polaco que vuelve a su paístras jugar dos años en la Universidad de Cincinnati sin excesivo protagonismo.