La mítica Cibona de Zagreb vuelve a mirar a su pasado para intentar reverdecer viejos laurales, después de unos años difíciles en los que los objetivos del club no se han cumplido a ningún nivel. Para ello recuperan a gente como Prkacin, Longin o Kus, con la intención de mezclarlos con americanos que llegan de tapados, pero de gran calidad, y con los jóvenes salidos de la cantera del club de la C roja, en una plantilla plagada de novedades, que será dirigida por el mítico Velimir Perasovic.

Herencia del año pasado

Respecto al año pasado, salen jugadores que tuvieron un papel importante como Tre Kelley, Larry Ayuso o Sam Hoskin, pero que no dieron todo lo que se les pedía. También sale de la plantilla, un jugador que ha sido vital en los últimos años como es Levour Warren, un alero muy completo que le daba un plus al conjunto croata.

El equipo croata, ha querido dar un cambio de rumbo radical a su plantilla, y por ello, pocas de las bases de la pasada temporada pasada continúan, habiendo formado una columna vertebral prácticamente nueva.

Continua una de las esperanzas del equipo croata como es el pívot Luksa Andric, que parece que pasa por un periodo de ligero estancamiento, aunque a rachas podrá demostrar su buen físico, rapidez, defensa, rebote y buena mano. Marin Rozic, coge más protagonismo esta temporada en la posición de tres, realizando un trabajo importantísimo en ambas partes de la cancha.

Jugadores que apenas tuvieron protagonismo el año pasado y que este adquirirán cierto peso en el equipos son Vukusic, un cuatro potente que le gusta jugar muy agresivo y Princ, un exterior muy intenso y con cierta habilidad para anotar desde fuera. Además siguen en la plantilla el escolta Vrbanc, y el pívot Kastropil, que puede dar minutos defensivos y de intimidación. Suben de la cantera, Filip Kruslin y el 3-4 todoterreno Tomislav Zubcic, con incursiones del poderío físico de Radosevic.

Los nuevos jugadores

En las novedades de este año, destacan los fichajes de tres americanos, Homan, Marshall y Calloway y los regresos de Kus, Longin y Prkacin, además del fallido regreso de Damir Markota, que tuvo problemas disciplinarios mientras se recuperaba de su lesión de menisco, y que ha buscado acomodo en el Vive Menorca.

Davor Kus, regresa después de un irregular paso por el Unicaja con un final totalmente agrio para sus intereses y para su antiguo club. Kus, vuelve a un lugar donde se siente cómodo y puede demostrar que sirve para este nivel gracias a un buen conocimiento del juego y su muñeca. Le acompaña en su regreso al exterior de la Cibona, otro ex acb como Longin y sus rachas anotadoras.

Pero de los regresos, destaca el de Nikola Prkacin, que es el motor, cerebro y líder de este nuevo Cibona. Su gran visión de juego, habilidad para el pase, veteranía, y capacidad para jugar con su prodigiosa mano izquierda le convertirán en el factor clave de este equipo.

Robert Troha llega del Helios, tras una larga carrera en el baloncesto balcánico para ofrecer intensidad desde el banquillo y buen rango de tiro.

Desde america, la Cibona vuelve a desmotrar que tiene buen ojo para fichar americanos. Homan llega tras hacer una buena temporada en el Slaks Wroklaw, con un contrato temporal,  para aportar muchos kilos y presencia en la zona, además de tener varios movimientos ofensivos en ataque como el semigancho. Earl Calloway es el nuevo base titular, que tiene la difícil misión de hacer olvidar la alargada sombra de Scoonie Penn que viene durando mucho tiempo. Buen pasador, rápido y buen penetrador, será clave su temporada para poder evaluar al conjunto de Zagreb.

Rawle Marshall llega tras una gran temporada en Hemofarm tanto en Uleb Cup como en la Liga Adriática. Se trata de un alero muy espigado y rápido, que ofrece un poder anotador muy alto. Bueno con el campo abierto, habilidoso en la media distancia, creándose sus tiros, y con buena mano en situaciones no muy complejas desde la larga distancia.