Partido de alta tensión entre Olympiacos y Herbalife Gran Canaria en el feudo griego. Para los visitantes, era un choque de vital importancia, estando en medio del pelotón de la clasificación, con 5 victorias y 8 derrotas. La tensión y nervios se notaron desde el comienzo, y la experiencia adoptaría una importancia clave.

- Ventaja física de Olympiacos. El tempo del partido lo marcaron de principio a fin, y daba la sensación de que Herbalife Gran Canaria iba a remolque de los griegos, quienes les doblegaron. El escaso fondo de armario de los visitantes se vio acusado con la lesión de Radicevic.
- Lesión de Nikola Radicevic. El serbio tenía un importante papel en el encuentro, y su lesión en el tobillo al comienzo del encuentro obligó a Albert Oliver a acaparar una mayor cantidad de minutos. Acusaron la falta de alternativas, y se notó en el desgaste físico.
- Vassilis Spanoulis, el “sheriff” de la Euroliga. Fue el auténtico líder de Olympiacos, y demostró por qué es considerado uno de los mejores bases de Europa. Partido muy eficiente del griego, con 21 puntos, 4 rebotes, 8 asistencias y 1 robo en 21 minutos, para irse hasta los 31 de valoración.

Partido muy tenso, donde las defensas fueron las principales protagonistas en los primeros diez minutos de partido. Victor García se centró en frenar al MVP de la anterior jornada, Nikola Milutinov. A Ondrej Balvin le tocaba bailar con la más fea, pero salió muy motivado en ambos lados de la cancha. La lesión de tobillo de Radicevic obligó a Albert Oliver a agarrar el timón de los canarios, sin recambios para el puesto de base, lo que les lastró de cara al resto del partido.
Pero el poderío físico de los de David Blatt se plasmó sobre el parqué. Georgios Printezis fue muy superior a Xavi Rabaseda y Kim Tillie (8 puntos en el primer cuarto), y la defensa obligó a Herbalife Gran Canaria a hacer muchos tiros forzados, y se marcharon con una ligera ventaja al segundo cuarto (20-14).
El siguiente cuarto se puede resumir en experiencia. Los curtidos jugadores de Olympiacos se pusieron el mono de trabajo ante un Herbalife Gran Canaria con escaso fondo de armario. Los locales llevaron el partido a su terreno, y marcaron el ritmo de partido durante los diez minutos. Un polivalente Vassilis Spanoulis dirigió a su equipo a la perfección, buscando el pick & roll y abriendo espacios para dejar a los tiradores liberados, unidos a la ventaja física, permitieron anotar 32 puntos, ante los 19 de los de Victor García, quienes se encontraban incómodos e intimidados en pista, haciendo posesiones muy largas y sin fluidez. Finalmente se fueron al descanso con una cómoda ventaja (52-33), con 9 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias y un robo en menos de 10 minutos de Vassilis Spanoulis, que se fue con 17 de valoración a los vestuarios.
Doing it on BOTH ends!@ZachLeDay32 with the rejection! ❌#7DAYSMagicMoment pic.twitter.com/qwW3vxVrhn
— EuroLeague (@EuroLeague) 20 de diciembre de 2018
El tercer cuarto fue muy igualado (21-21), donde Herbalife Gran Canaria apostó por abrir el campo en ataque, buscando el triple como principal arma ofensiva, ante la sólida defensa en la pintura griega, y con buen porcentaje de acierto.
Pero Vassilis Spanoulis ofreció un clínic de baloncesto. Organización, dirección y anotación, para mantener la distancia con los canarios, siendo muy eficiente en sus minutos en pista.
Olympiacos juega un pick&roll muy peculiar, donde el pívot se clava a la altura del tiro libre, esperando a que los jugadores de las esquinas corten a canasta, y fue un auténtico puñal. La mano de David Blatt da sus frutos.
El último cuarto tuvo una tónica similar que el tercero, donde Herbalife Gran Canaria fue más agresivo, buscando arriesgar, tanto en ataque como en defensa. Olympiacos cerró el tiro exterior, y pusieron 3 tapones en el último cuarto, minando la moral de los jugadores interiores canarios.
Pese a ello, Spanoulis se encontraba como pez en el agua, y se echó el equipo a la espalda para evitar cualquier intento de remontada de los visitantes. Finalmente, la experiencia y capacidad física fueron determinantes en un segundo cuarto que se mantuvo el resto del encuentro.


