Zonas alternativas en defensa, con una gran agresividad en los contactos, disciplina defensiva… y un ataque con los roles bien asumidos acaba por reventar a una Francia que comenzó bien, pero que cayó por su propio peso. La lesión de Tunceri, único lunar turco.

Con dudas sobre cual sería la cara que mostraría Francia tras las dos últimas derrotas ante Lituania y Nueva Zelanda, los de Vincent Collet salieron serios, atacando con paciencia y aguantando los primeros envites turcos con buenas acciones de Nando de Colo (15 puntos, 3 rebotes y 1 asistencia) y Boris Diaw (21 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias).

 Pero la seriedad no es el único ingrediente necesario para vencer a los anfitriones, y Francia no fue capaz de da respuesta a la zona turca en todo el partido. Los últimos minutos del segundo cuarto y los primeros del tercero sirvieron para certificar un 16-0 a favor de Turquía que parecía inevitable. Collet no encontró en el descanso la forma de atacar la zona turca y el 53-28 del minuto 25 encendió la fiesta en Estambul.

Tanjevic ha construido un equipo que muere en defensa con una agresividad (consentida) que dificulta y ahoga los ataques contrarios. Todos cumplen, todos llegan y todos se sacrifican. En ataque, sistemas donde brillan Turkoglu (20 puntos, 4 rebotes y 5 asistencias) e Ilyasova (9 puntos y 5 rebotes menos fino ante Francia) y donde todos tienen la posibilidad de aportar, con Asik (10 puntos y 5 rebotes) como finalizador clave. Además, hoy hay que unirles el nombre de Sinan Güler (17 puntos y 3 asistencias), muy acertado hoy. Pero, en conclusión, hay que decir que todos los jugadores otomanos conocen su papel, todos lo asumen y todos reman en la misma dirección.

 El único lunar para Turquía, la lesión de su base Kerem Tunceri, que se torció el tobillo en un choque con De Colo y terminó el partido con el pie en alto y hielo. Su presumible baja, unida a la de Engin Atsur en la preparación, deja mermados a los turcos en la posición de base, donde la responsabilidad caerá en mayor medida en Ender Arslan. En cuartos de final, Turquía pondrá a prueba esta “debilidad” ante los bases eslovenos Lakovic y Dragic, en estado de gracia.

 Collet, seleccionador francés, no probó alternativas ante la zona, y Casseur y Jackson, sus mejores lanzadores, no salieron hasta los segundos finales. Francia abandona un Mundobasket en el que quizá pudo haber progresado de no haberse topado ante uno de los favoritos. La noche de hoy, se volverá a recordar la derrota ante Nueva Zelanda por 12 puntos que les obligó a jugar ante Turquía.

Extenso resumen del encuentro: