Jornada de infarto esta jornada 17 que, además de cerrar la primera vuelta de esta temporada 2018/19, definiría las cuatro plazas restantes para acceder a la Copa del Rey 2019. En uno de los partidos del mediodía se enfrentaban Movistar Estudiantes y Delteco GBC, ambos en puestos de descenso, con los madrileños mirando de reojo a Tenerife por donde pasaban gran parte de sus opciones para ser el anfitrión de la Copa en menos de un mes.
Comenzaba el partido algo frío, fruto de la tensión que se respiraba en el WiZink Center y con Delteco GBC anotando todo lo que tiraba. Pronto se pusieron los guipuzcoanos por delante con unos acertados Sekulic y Pérez y un buen movimiento de balón en campo ofensivo. Sería llegando al ecuador del cuarto cuando los de Josep María Berrocal se deshicieran de todos los nervios y empezaban a realizar un partido mucho más serio en cualquier resquicio de la cancha. El conjunto estudiantil mostraba una mayor fluidez en ataque y en zona no dejaba una canasta fácil. No solo redujeron el déficit de 5 puntos sino que asestarían un parcial de 13-0 a partir de un 2+1 de Brizuela entrando hasta la cocina (11-13, min. 5). Con Whittington, Gentile y el escolta vasco dominando la ofensiva local y los de Valdeolmillos atascados en la otra parte de la pista se invertiría el dominador del marcador. Los colegiales recibirían solo cuatro puntos en los últimos 5 minutos y cerrarían el cuarto con una ventaja de 25-17 empezando con buen tono un partido crucial.
El segundo cuarto seguiría la tónica del final del primero con un Movistar Estudiantes controlando con mucha tranquilidad el tanteo y con un Gian Clavell encendido clavando dos triples consecutivos, uno de ellos con personal incluida (32-19, min. 13). Los suplentes rendían a buen nivel con un Víctor Arteaga que ha incrementado su confianza en su juego y Ludde Hakanson con una buena dirección del equipo. Corbacho era la mayor amenaza para reducir la ventaja y con un parcial de 10-2 en los siguientes tres minutos, se situarían a seis puntos de su rival. Un gran Arteaga devolvería la renta de diez puntos a Estudiantes hasta que a falta de un minuto, una dura falta de Caner-Medley sobre Burjanadze propiciaba 7 puntos consecutivos del de Delteco GBC y cerrando la primera mitad con un tanteo de 44-38.
Saldrían los dos conjuntos de vestuarios retomando las sensaciones del segundo cuarto y con los de Berrocal volviendo rápidamente a esa diferencia en torno a los dobles dígitos con un Gentile desatado y llevando a su defensor, Fede Van Lacke primero y Alberto Corbacho más tarde, al poste donde el italiano era infinitamente superior. Sería precisamente Van Lacke el que rompía la sequía en el marcador guipuzcoano con una gran canasta chocando contra Whittington y dejándola con suavidad en el aire (50-40, min. 24). Lo intentaban los vascos con Dani Pérez y Nevels, que trataba de meterse en el partido con insistencia, pero un buen trabajo conjunto de los telefónicos no permitía ningún movimiento abrupto en el resultado. Un triple de Clavell, que anunciaba así la exhibición que tenía preparada, y un mate de Mouhamed Barro finiquitaban el cuarto con un resultado provisional de 60-50 pero con la sensación de comodidad instalada en el WiZink Center.
Como veníamos diciendo, los últimos diez minutos se encontraron con un enchufadísimo Gian Clavell desde el inicio. Con dos triples desde sendas esquinas en jugadas consecutivas y continuando con seis puntos más, sentenciaba el encuentro con una diferencia superior a los 20 puntos (75-54, min. 35). Poco más pasaría en el partido mientras que el Palacio de los Deportes se convertía en una fiesta. Berrocal daba paso a los canteranos Sola y Grytsak y uno por uno se marchaban ovacionados el resto de jugadores. Cerraba el partido y la clasificación para la Copa del Rey 2019 una bandeja en suspensión, en el último segundo del propio Sola poniendo el broche de oro al 86-62 final.