Los Bulls acaban con Atlanta y desafían a Miami

Chicago volverá a disputar la Final de la Conferencia Este trece años después. En aquella ocasión, un tal Michael Jordan lideraba a Chicago hacia su segundo threepeat en un período de ocho años. En ésta, Derrick Rose, otro chico tocado por los dioses, sueña con devolver a la cima a una franquicia que, en gran parte gracias a él, ha vuelto a creer.

Atlanta no pudo forzar el séptimo partido (73-93). Cayó honrosamente en una serie (4-2) en la que luchó pero no pudo ocultar su inferioridad. Primero, ante la magia del actual MVP, un tifón que devasta rivales. Y segundo, y más importante, ante un bloque tan sólido que parece no tener fisura alguna por la cual ser desarmado.

Porque esos son los Bulls que está construyendo Tom Thibodeau. Un equipo con mayúsculas, con una predisposición defensiva sublime, una ejecución precisa y que en ataque se encomienda al genio de su lámpara. Pero Derrick Rose no está solo y sus escuderos parecieron dar un paso al frente justo en el preludio a la batalla de entre las batallas, la que medirá a Chicago con Miami, los dos colosos emergentes del Este, por un puesto en las Finales.

El sexto encuentro no tuvo historia. Y no la tuvo porque Chicago no quiso. Rose avisaba horas antes del duelo, y hablando en sentido grupal, de que se trataba de "el encuentro más importante de sus vidas". Verdaderamente lo pareció, porque los Bulls salieron decididos a no dar resquicio a la esperanza a su rival.

Nadie faltó a la cita. Carlos Boozer (23 puntos y 10 rebotes) se reencontró consigo mismo, apoyado en la ‘pintura’ por un Joakim Noah tan hiperactivo como siempre. Luol Deng ejercía de jugador total y Rose (19 puntos y 12 asistencias) asumía la función de motor generador de la máquina. Una máquina que tenía, como siempre, en una defensa sobresaliente su factor diferencial.

Pronto alcanzaron una renta de dobles dígitos (17-27, primer cuarto) y ya nunca permitieron a los Hawks pensar en que la victoria, la remontada en este caso, era posible. Fueron Josh Smith (18 puntos) y Joe Johnson (19), las cabezas visibles del proyecto de Atlanta, los que más empeño pusieron.

Pero estuvieron solos, porque Jamal Crawford (8 puntos, con 2/10 en tiros de campo) volvió a perderse una vez más en la telaraña defensiva de Chicago y el resto no supo como hacer frente al ‘ogro’ que había enfrente. Al Horford estuvo superado en la zona y Jeff Teague, que jugó mermado por un golpe en su mano derecha que le hizo marchar a vestuarios en el primer cuarto, fue esta vez chispa pero sin llegar a fuego.

Atlanta se diluyó a través de pobres porcentajes, probando jugar con grandes y con pequeños, buscando la zona y el tiro exterior. Pero sin frutos. Chicago fue superior, nunca permitió acercamiento alguno y acabó con el partido a comienzos del último período, superando la veintena de puntos de diferencia y convirtiendo en minutos de la basura los finales del sexto partido.

Miami ya espera en la siguiente ronda, con el trono del Este en juego y el pasaporte a las Finales. Es el desafío de los Bulls a unos Heat que acabaron con las ilusiones de los Celtics y quieren hacer lo propio con el bloque de hormigón que dirige Tom Thibodeau. Veremos si los ‘Beach Boys’ sí son capaces de perforarlo.

Pau Gasol, elegido en el segundo Quinteto del Año.

La NBA dio a conocer los nombres de los jugadores que integraron los tres mejores Quintetos de la temporada, después de que la prensa ofreciese su veredicto y premiase a los jugadores más destacados del curso.

No hubo sorpresa en el caso del Primer Quinteto. Formado por el MVP, Derrick Rose (Chicago), el Jugador Defensivo del Año, Dwight Howard (Orlando), el máximo anotador, Kevin Durant (Oklahoma City), el jugador más votado por los periodistas, LeBron James (Miami), y Kobe Bryant (Los Angeles Lakers), que alcanza el reconocimiento por novena ocasión en su carrera.

Sí hubo espacio para la novedad en el Segundo Quinteto. Russel Westbrook (Oklahoma City) y Dwyane Wade (Miami) parecían seguros en el backcourt, Dirk Nowitzki (Dallas) y Amar’e Stoudemire (New York) ocupaban los puestos de forwards, mientras que el español Pau Gasol ha sido el center designado.

Es la primera vez que el pívot español de los Lakers es distinguido con un hueco en el Segundo Quinteto del Año, ya que los dos años anteriores fue incluído en el Tercero. Es, por tanto, una pequeña alegría para un Gasol que ha estado lejos de su nivel en Playoffs, siendo una de las causas de la prematura eliminación de los Lakers, campeones los dos últimos años.

Por último, el Tercer Quinteto queda formado por Chris Paul (New Orleans), Manu Ginobili (San Antonio), LaMarcus Aldridge (Portland), Zach Randolph (Memphis) y Al Horford (Atlanta).

Como curiosidad, cabe reseñar que es la primera vez que Tim Duncan (San Antonio) no forma parte de ninguno de los tres mejores quintetos de la temporada. Pese a ello, Duncan sigue siendo, junto a Kobe Bryant, el jugador en activo con más presencias (nueve) en el Mejor Quinteto del Año.

ASÍ MARCHAN LAS SEmifinales de conferencia

ESTE

Miami Heat – Boston Celtics 4-1

Chicago Bulls – Atlanta Hawks 4-2

OESTE

Oklahoma City Thunder – Memphis Grizzlies 3-2

Los Angeles Lakers – Dallas Mavericks 0-4

*En negrita, los equipos clasificados para las Finales de Conferencia