· El mate de Urazmanov
· Entrevista a Urazmanov y Korolev
· Urazmanov y Korolev, internacionales con rusia
· La NBA les espera
. Cómo conseguir vídeos con espectaculares jugadas de Korolev y Urazmanov y otros jugadores

El mate

“Al diez, al diez, hazle fotos al diez”, me indica mi compañero desde la grada. Nos situamos en la línea de fondo pensando que con nuestra humilde cámara no vamos a poder tomar ni una sola instantánea decente del base del CSKA de Moscú, que en esos momentos se está enfrentando al Estudiantes en busca de una plaza en las semifinales. Urazmanov, que así se llama el susodicho, se mueve dirigiendo a su equipo por fuera de la línea de tres puntos, muy lejos de nuestro objetivo. Apenas unos minutos antes se había decidido a penetrar a canasta aprovechando un desajuste defensivo y dejando a su par en el suelo con la arrancada. La jugada había acabado con un portentoso mate a dos manos que había dejado boquiabiertos a los muchos espectadores presentes en el pabellón.

“Mala suerte” -pensamos- “otra jugada así no se va a repetir y las fotos que podamos hacerle no van a ser gran cosa…”. Nos quedamos con el pensamiento a medias. Cámara en mano, presta para apretar el disparador, somos testigos de una repetición de la jugada anterior con su espectacularidad elevada a la enésima potencia. En estado de shock por lo que acabamos de presenciar, comprobamos si nuestro dedo ha pulsado el botoncito de la cámara justo a tiempo, si ha escapado al pasmo general para actuar por cuenta propia y archivar el vuelo de Artur para siempre.

¡Bingo! ¡Lo tengo! Urazmanov ha iniciado el ataque de su equipo. Como siempre, dirige a su equipo a casi siete metros del aro. De repente, recibe un bloqueo perfecto a su derecha de su compañero Gusev, esto le libera de su par y en esos momentos lo ve claro. Un pasillo se abre ante él y con un primer paso potentísimo inicia la penetración. Su par se ha quedado en el bloqueo y no puede seguirle, las ayudas llegan tarde y tan sólo Cabot se interpone entre el decidido base y el aro. El “pequeño” –esa sensación producía cuando lo veías en la cancha en medio de sus compañeros- jugador ruso inicia el salto, intuye que Cabot intenta taponarle por detrás, así que esconde el balón a la altura de la cintura mediante un rectificado que le obliga a jugársela a aro pasado. No hay problema, como por arte de magia, cuando su eventual defensor ya está cayendo de nuevo al suelo, Urazmanov se eleva todavía más, extiende sus brazos elevando el balón a la vez que vuela por el aire del pabellón y la hunde de espaldas.

La reacción de todos los presentes en aquel CSKA de Moscú – Adecco Estudiantes de la segunda jornada del 26º Torneo Junior de l’Hospitalet fue la misma. Una enorme exclamación, mezcla de asombro, de admiración y de incredulidad que llenó el pabellón mientras Urazmanov regresaba a la defensa como si no hubiera ocurrido nada.

“Mi padre me ha enseñado a saltar así”

Tras el partido, tuvimos el privilegio de poder charlar con este prodigio de jugador. Además, junto a él hablamos con otra de las estrellas del CSKA junior que participó en el torneo: Yaroslav Korolev.

Asombrados por la increíble potencia de salto de Urazmanov le preguntamos que cómo era capaz de volar de aquella manera… “mi padre es atleta y me ha enseñado a saltar así”, nos cuenta. Pese a esa cualidad, el base es consciente de que debe “mejorar aspectos como el dribbling y el tiro para ser mejor jugador”. Cuando le preguntas por sus jugadores favoritos, Artur tiene muy claro que “Kirilenko no, me gustan otros jugadores. En el CSKA son Holden y Papaloukas –los bases del equipo, claro- y en la NBA Mike Bibby”. Nos cuentan que ha mejorado mucho como jugador durante el último año y nos explica que tuvo “una lesión de rodilla por la que estuve ocho meses sin jugar. Ahora quiero jugar por encima de todo y tengo una gran fortaleza que me ayuda a mejorar”.

Otra de las estrellas rusas del torneo fue, sin duda, Yaroslav Korolev, un alero de 206 centímetros, muy rápido y ágil para su estatura, lo que le permite jugar en diversas posiciones. Además, su potencia de salto es también espectacular como demostró al proclamarse campeón del concurso de mates.

En un buen castellano –su padre es seleccionador de Costa Rica y ha vivido en aquel país durante cuatro años- nos cuenta que puede “jugar en distintas posiciones, de dos, de tres y de cuatro y esto es muy bueno. Si tengo enfrente un jugador que es más bajito que yo, entonces juego como cuatro y si soy más rápido juego como dos o como tres. Puedo pasar, puedo hacer tiros, …”. El alero, que ya forma parte del roster oficial del primer equipo del CSKA asegura que “lo mejor es que con mi altura yo puedo driblar bien y no soy muy lento. Llevo once años jugando a baloncesto y entiendo el baloncesto. Veo toda la cancha desde mi posición y hago buenos pases, puedo anotar triples. Ayudo al equipo todo lo que puedo”

Curiosamente, y pese a tener unas características físicas parecidas en algunos aspectos a la estrella rusa de la NBA, Korolev nos cuenta que su imagen como jugador “no es Kirilenko porque tengo que ser como él en defensa pero quiero ser mejor que él en ataque. Creo que Anthony Parker, del Maccabi, es mi jugador preferido”.

Como decíamos, Korolev ya forma parte del primer equipo del CSKA de Moscú, que lo fichó el pasado verano del Avtodor, aunque apenas ha jugado unos minutos en dos partidos con “los mayores”. Otro jugador del conjunto ruso presente en Hospitalet, Vasiliy Zavoruev, compañero de generación de Korolev, también se encuentra integrado en la primera plantilla del CSKA y éste sí disfruta habitualmente de minutos en la Superliga A rusa. Dicen de él que es el mejor jugador de esa generación en el CSKA y en el Torneo demostró una gran madurez y superioridad ante todos sus rivales.

El presente y futuro de Rusia

Los dos jugadores protagonistas de esta historia y sus compañeros de equipo forman la base de la selección rusa junior. El CSKA ha formado un conjunto temible, bien entrenado y mejor preparado bajo el mando de un histórico como Bazarevich. Así nos lo cuenta Pau García, intérprete del equipo ruso y, además, técnico del Esplugues de primera nacional: “He tenido la oportunidad de trabajar con el equipo júnior del CSKA de Moscú en tres ocasiones (dos en el Torneo Junior de L’Hospitalet y una en el Euroleague Junior Tournament) y la verdad es que, comparativamente con los otros muchos equipos juniors europeos con los que he podido trabajar, este es un equipo diferente. Ya no solo por la calidad innegable de sus jugadores, sino por su comportamiento y estructura absolutamente profesional.”

Korolev y Urazmanov son dos claros ejemplos de lo que supone el CSKA en el baloncesto de su país. Ambos han formado parte de la selección rusa en categorías inferiores y ahora se han convertido tanto en compañeros de selección como de equipo, al incorporarlos el CSKA del Avtodor Saratov y del Ural Great de Perm respectivamente. Juntos, por ejemplo, participaron en el Campeonato de Europa cadete de 2003 en España, en el que consiguieron la medalla de bronce al imponerse al anfitrión en el partido por el tercer y cuarto puesto. Korolev también participó en el IV Torneo de basket de selecciones junior Villa de Torrejón junto a Zavoruev y Sheleketo, como únicos representantes de la generación del 87 de la selección rusa junior. Allí, Korolev se impuso en el concurso de mates igual que lo hiciera en Hospitalet.

Korolev y Urazmanov, prospectos NBA que aún deben madurar

El propio Pau García nos cuenta cómo vio a estos dos potenciales jugadores NBA enfrentándose a un equipo senior, ya que un día antes del torneo de Hospitalet jugaron un amistoso que enfrentó al CSKA junior con el equipo que él dirige, el Eplugues. Pau nos cuenta que “he podido contrastar a este equipo jugando contra un equipo sénior de Copa Catalunya (1ª Nacional), que yo mismo dirijo, en un partido amistoso celebrado el pasado 3 de enero. Podemos destacar muchos jugadores pero hay tres que llaman la atención sobremanera, Yaroslav Korolev, Vasily Zavoruev y Artur Urazmanov.”

“Korolev es un jugador de un impresionante futuro. Tiene una gran ambición y hambre de éxito, ama los desafíos y respira baloncesto desde la cuna, no en vano su padre fue jugador profesional y en la actualidad seleccionador de Costa Rica. Tiene un carácter muy abierto y detecta con facilidad todo cuanto acontece alrededor del partido. Busca desafíos constantemente. Recuerdo cómo me interrogaba sobre si pensaba que Sotirios Manolopoulos (MVP y máximo anotador del Torneo) era mejor que él, si le veía más fuerte, estuvo dos días como loco por enfrentarse a él y “ponerle en su sitio”, como le brillaban los ojos… Técnicamente muy completo, sabe usar bien el físico a pesar de que debe mejorar aún sus prestaciones musculares. El aspecto más negativo es la excesiva intensidad con la que vive el partido, contra nosotros fue fácil sacarle del partido con alguna que otra artimaña de veterano, incluso acabó llevándose una técnica por protestar. Si domina y canaliza positivamente esa emotividad será un jugador de los buenos de verdad.”

“Por su parte, Artur es la concentración hecha jugador. Controla perfectamente todas sus constantes y posibilidades. Tiene una capacidad de salto prodigiosa, producto del trabajo especifico que realiza con su padre (ex-saltador de altura) y de una innegable capacidad natural. Artur es un jugador poco comunicativo -sólo habla ruso- y extraordinariamente serio. A pesar de no ser un líder natural, es extraordinariamente respetado por sus compañeros. Como jugador es despiadado y arrogante, capaz de sacarle las miserias a cualquiera si no está a la altura. Ha pasado de no jugar casi nada, a ser el director de juego imprescindible, tras haber superado una gravísima lesión de rodilla gracias a su carácter durísimo y tenaz. Es uno de los jugadores de su edad más maduros y centrados con los que jamás he podido convivir. Mi única inquietud se disparó precisamente en el partido que jugaron con nosotros. Iniciado el tercer cuarto perdíamos de 18 puntos y con festival del CSKA, nos estaban borrando de nuestra propia cancha. Tras tiempo muerto, cambiamos a zona 2-3 contra la que se estrellaron de manera estrepitosa, en poco mas de 12 minutos de partido nos pusimos 1 punto arriba, para forzar la prórroga y acabar ganándoles de 5 puntos. Aquí pude comprobar el talón de Aquiles de Urazmanov. No supo improvisar soluciones para su equipo. Siguió de manera autómata el guión establecido, no acertó al leer la defensa y a buscar sus puntos flacos. No dio instrucciones a sus compañeros para que corrigieran su posición, y ha sido la única vez que le vi comportarse como un base de 17 años, al que le superaba la falta de experiencia. Pero. a pesor de ello, me uno al club de los que pagarían de su bolsillo por entrenar un jugador como Artur

Colaboran: Carlos Jiménez y Pau García (entrenador del Esplugues e intérprete del CSKA de Moscú)

ARTÍCULOS RELACIONADOS
¿Quieres conseguir videos del torneo con espectaculares jugadas de Korolev y Urazmanov y otros jugadores?

Resúmenes, fotos, análisis del torneo de Hospitalet