Hace más o menos una década, la LEB Oro era considerada una de las competiciones más atractivas de Europa. Proyectos ambiciosos, jugadores de nivel con sueldos notables, público en las gradas…. Algo que parece quedar a día de hoy muy, muy lejos. La crisis ha afectado al basket y de forma especialmente aguda, a las competiciones FEB. Si a esto le unimos las condiciones exigidas para el ascenso a la ACB, prácticamente imposibles de cumplir en la actual tesitura económica, el resultado es un panorama desolador. Las estrecheces económicas y la falta de objetivos reales han hecho que la LEB Oro se convierta prácticamente en una competición semi-profesional, donde los salarios mileuristas comienzan a ser un lujo para el jugador medio. Hay clubes que partirán el próximo curso con un presupuesto inferior a los 200.000 euros para plantilla y cuerpo técnico.
Uno de los jugadores nacionales con mayor pedrigrí en LEB Oro ha utilizado las redes sociales para manifestar el estado de ánimo de parte de sus compañeros. Miki Feliu, sin pelos en la lengua:
Estos días he hablado con ex compañeros míos, jugadores top de la LEB. La sensación que percibo hablando con ellos es q el deseo y pasión +
— Miquel Feliu (@mikifeliu) 31 de julio de 2016
Cada vez esta más bajo por como estan las cosas. Contratos cada vez más bajos, sin objetivos deportivos reales,…
— Miquel Feliu (@mikifeliu) 31 de julio de 2016
Es una lástima. El estado de ánimo general es muy bajo y creo que hasta día de hoy no lo había palpado de manera tan clara. Es muy triste
— Miquel Feliu (@mikifeliu) 31 de julio de 2016
Se que el paradigma ha cambiado, pero dice mucho de cómo estan las ligas FEB q jugadores con opciones reales ACB por nivel y todavía jóvenes
— Miquel Feliu (@mikifeliu) 31 de julio de 2016
Esten encarando su futuro despues del baloncesto de manera que ahora mismo éste es menos prioritario q hace unos años. Han dejado de "creer"
— Miquel Feliu (@mikifeliu) 31 de julio de 2016