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El partido comenzó con Bernard Hopkins como principal y casi único referente del ataque vasco. El ala pívot del Bruesa anotó 8 de los 16 primeros puntos de su equipo, que también tuvo las aportaciones puntuales de Rod Brown (aprovechando su potencia en las entradas a canasta) y de un Andy Panko que no se encontraba cómodo emparejado con Zach Morley.

En cambio. el Leche Río Breogán repartió mejor su juego, y aunque Maurice Jeffers llevó la voz cantante y anotó 7 puntos en el cuarto, la pareja inerior formada por el versátil Kickert y un bregador Morentin fue bastante importante para irse con cuatro puntos de ventaja al final del cuarto.

Un triple de Andrade junto a n 2+1 de Rod Brown en la reanudación supuso la mini-remontada del Bruesa GBC; que se mantuvo arriba a pesar de los buenos minutos de Clark y consolidó una pequeña ventaja refrendada más tarde con minutos volutariosos de Faverani.

El ritmo se volvió más vivo y este hecho fue beneficioso para los de Pablo Laso, que tuvieron más efectividad en el lanzamiento (Arco fue importante en este aspecto) y se fueron al final de la primera parte con 10 puntos de ventaja en el bolsillo (43-33).

Era el momento en el que el Breo tenía que reaccionar y por eso Paco García utilizó una zona 2-3 que sin embargo no do muy buen resultado. Además, la defensa presionante a toda la cancha que Laso ordenó en momentos puntuales puso en apuros la circulación de balón gallega, que con un ataque atascado vió como la diferencia llegó a aumentar hasta los 15 puntos.

Entonces llegó el momento de Dani López, que dirigió a su equipo intentando optimizar recursos para hacer valer su potencia física en el juego estático y la de Jeffers y rápidas transiciones que eran más frecuentes debido al bajón en los porcentajes de tiro.

Cuando la diferencia bajó de los 10 puntos el Breogán empezó a creer en la victoria, endureció su defensa y bajo tableros se empezó a repartir cera de la más dura. Con cuatro abajo los jugadores del Breogán lograron que Bruesa agotara una posesión sin lanzar. Posteriormente Kickert aprovechó una falta de B-Hop con dos tiros libres que confirmaban las sospechas: ¡había partido!

Y vaya partido. Dos jugadas después Tiras Wade ponía la ventaja del lado celeste (hoy negro) con un triple escorado. Hopkins ya no veía aro como en el inicio del choque y Uriz tuvo que asumir responsabilidades en ese aspecto, mientras que dos posesiones sin anotar frenaron a un Leche Río que segundos antes estaba lanzado.

Se entró en el último minuto con dos puntos de ventaja para el Bruesa, e inmediatamente después Andy Panko clavó un triple sobre la bocina de posesión que dejaba un 77-72 en el luminoso. Llegó la tranquilidad para los vascos, y más cuando Wade falló un triple y Panko, que estuvo en el momento clave, capturó el rebote.

El resto ya es historia, dos tiros libres de Andrade, un nuevo fallo de Kickert.. el Bruesa GBC terminó ganando un partido que se le atragantó mucho y jugará la final ante el Tenerife Rural.