El Breogán conocerá su futuro como entidad deportiva en escasas horas, y lo cierto es que la situación se presenta al límite. El club necesita 300.000 euros más para cerrar el presupuesto necesario que les permita salir en LEB además de asumir los elevadísimos contratos firmados y la deuda contraida (un millón de euros) bajo la responsabilidad de la anterior directiva y organigrama técnico-deportivo (con Jesús Lence y Moncho López a la cabeza).
Hay que recordar que la fecha límite para inscribirse en la segunda competición de baloncesto de nuestro país, finaliza el próximo día 4 de Julio.
Así, tras confirmarse la continuidad de Leche Río (propiedad de Jesús Lence) como patrocinador y la entrada en escena de la empresa Monbús (propiedad de Raúl López) más las diferentes instituciones públicas (Xunta de Galicia, Concello de Lugo y Diputación Provincial), se hace necesario un esfuerzo más. Y todos los ojos están pendientes de la Diputación Provincial de Lugo, máxima accionista del club; que aunque ya confirmó una ayuda de 541.000 euros, ésta se encuentra lejos (menos de la mitad) de lo que anteriormente venía aportando y podría aportar en la actualidad. Tintes de claro origen político están detrás de esta decisión, y las exigencias pasarían por ver como el resto de instituciones aumentan su ayuda, para hacer lo propio.
Un tira y afloja que podría tener como resultado el adiós de un histórico del baloncesto nacional. Pues el Breogán de disolverse perdería todos sus derechos: su plaza en LEB y el canon ACB.
El club ya posee el aval necesario par su inscripción, pero en declaraciones al diario lucense “El Progreso”, Raúl López lo dejaba claro: “No tiene sentido inscribirse sin viabilidad posible. El plazo termina en la mañana del martes, y nos consta que la FEB no va ampliarlo ni un minuto porque hay otros clubes pendientes, alguno de Galicia, para asumir la plaza que dejaría vacante el Breogán”.
Por tanto, un fin de semana y 300.000 euros separan al CB Breogán de la desaparición.