CIUDAD DE HUELVA 80 GIJON 81

CIUDAD HUELVA: Alex Burgos (14), Camacho (10), Antonio Gómez (2), David Fernández (5), Stuckey (19) -cinco inicial-, Vickery (16), Montaner (0), Rojas (2), Oscar Rodríguez (6) y Doblado (6).

GIJON: Urreizti (14), Poves (11), Modderman (21), Antxón Iturbe (2), Prickett (8) -cinco inicial-, Rubén Burgos (12), Kortaberría (10) y Rubén Suárez (3).

Parciales: 18-25, 44-36 (26-11), 54-64 (10-28) y 80-81 (26-17).

La suerte dictó sentencia en el duelo de necesitados. En un final agónico, la fortuna, en forma de nefasta actuación arbitral, inclinó la balanza del lado de un Gijón que puso fin a su serie de cuatro partidos sin ganar. Por el contrario, el resultado ratifica la gravedad de la crisis del Ciudad de Huelva que suma su séptima derrota consecutiva, cuarta en los últimos cuatro encuentros disputados en el Palacio, y termina la primera vuelta de la regular en puestos de play-off de descenso.

Una situación que podría precipitar la toma de medidas drásticas por parte del consejo de administración de la entidad. Claro que, dada la buena imagen del equipo y la previsible recuperación de todos los lesionados tras el paréntesis navideño, la directiva podría optar por conceder un crédito extra a la presente plantilla, a la espera de los dos trascendentales partidos ante Complutense e Inca, con que se abrirá el próximo año baloncestístico.

Con Vickery recién salido de su lesión, con Oscar Rodríguez mermado por un proceso gripal, con Doblado infiltrado por una contractura en los abductores y con Ávila y Morón fuera de combate, Bioque apostó de salida por la defensa, con Gómez y Camacho convertidos en sombras de los dos hombres más peligrosos del Gijón. El canterano contuvo a Poves, pero el versátil Modderman (12 puntos en el primer cuarto) le hizo un traje al cordobés. Apoyado en el juego de su alero americano, Gijón alcanzó en clara ventaja la primera estación de paso del partido (18-25).

La situación no invitaba al optimismo, pero por una vez el segundo cuarto sonrió al Ciudad. Bioque rebuscó en el fondo de su banquillo y encontró en Rojas al antídoto de Modderman. En la otra canasta, el despertar de Stuckey, la garra de Burgos y, sobre todo, la exhibición de Vickery (13 puntos y 3 triples), permitieron a los onubenses voltear el resultado al descanso (44-36).

La continuación resultó una versión corregida y aumentada de la primera mitad. De nuevo el cuarto impar fue propicio para los intereses visitantes. Pese a que nada más arrancar, un triple de Doblado daba a los onubenses su máxima ventaja (47-38), la reacción astur no pudo ser mas demoledora. Urreizti y Poves condujeron a los suyos a un parcial 3-22, y el choque volvió a cambiar de rumbo (54-64 al término del tercer cuarto).

El último periodo, como correspondía al guión del partido, fue del Ciudad. Un oportuno cambio a zona colapsó el ataque gijonés, y el empuje del público y del cinco local llevó el duelo a un final de infarto (75-75 a dos minutos de la conclusión).

De ahí en adelante, colección de despropósitos, incluidos los de la pareja arbitral, que castigaron a los locales con dos faltas antideportivas y una técnica al banquillo en ese lapso de tiempo. Aún así, Alex Burgos con el reloj a cero, tuvo tres tiros libres para forzar la prórroga, pero falló su segundo lanzamiento. Hubiese sido lo más justo, pero el deporte sólo entiende de resultados.

LA CLAVE: la nefasta actuación de los colegiados Ángel De Lucas y David Guillán, que con sus erróneas señalizaciones minimizaron las opciones de victoria de los locales.

LA FIGURA: la presencia de un alero alto sigue haciéndole mucho daño al Ciudad de Huelva. Esta vez, fue Joe Modderman (21 puntos con un 72% en los tiros y 8 faltas recibidas) quien se aprovechó de las dificultades de los onubenses.