No decepcionó la gran final de Copa. Nervios, intensidad, sonrisas, lágrimas y hasta una prórroga para proclamar al CB Aracena campeón. Los de Xavi Pascual pudieron con un Plasencia que contó con el apoyo de tres mil personas y con la última oportunidad para deshacer el empate al que se llegó al término del tiempo reglamentario.

La final mostró a dos equipos atenazados, con demasiado miedo a perder y ello repercutió en el espectáculo. Plasencia, espoleado por su público, dominó durante más minutos el marcador, aunque con diferencias mínimas, pero Aracena nunca le perdió la cara al partido. Los catalanes hicieron un buen trabajo defensivo y se encomendaron a su calidad ofensiva para torear las envestidas de Plasencia. Así, se llegó con empate al final del partido, después que Canals cometiera personal en ataque en la última acción. El tiempo extra dictó sentencia.

En la prórroga, se impuso la mayor profundidad de banquillo de Aracena. Los de Xavi Pascual pronto cogieron una ventaja considerable en el marcador y Plasencia se lanzó a un ataque desesperado que acabó siendo suicida. Al final, 71 a 80, Aracena, campeón de la IIIª Edición de la Copa LEB-2.