RESULTADO: MELILLA BALONCESTO 74 ALGECIRAS CEPSA 70
MELILLA BALONCESTO: Casey (4), Perujo (5), Brown (4), López (8), Flanders (6), Martínez (6), Van Passen (23), Navarro (0), García (18).
ALGECIRAS CEPSA: Swinson (14), Canals (0), Serrano (2), Ruiz (6), Alexander (10), Stacey (24), Romero (3), Alonso (11).
El Melilla Baloncesto se reencontró con la victoria tras imponerse al Algeciras Cepsa en el Ciudad de Melilla por 74-70 al Algeciras Cepsa.
No fue ni mucho menos un gran partido, o al menos no fue todo lo vistoso que el público hubiera querido porque se disputó a un ritmo muy lento donde las defensas se impusieron claramente a los ataques.
Y es que si el Melilla Baloncesto quería sacar tajada del envite ante el equipo más anotador de la liga tenía que dejarse de florituras y ponerse el mono de trabajo para defender con uñas y dientes las bazas que tenía.
El tridente que presentó Porfirio Fisac -Stacey, Alexander y Swinson- no defraudó en absoluto, pero el tulipán blanco melillense -Peter Van Paassen- se encargó de contrarrestar los envites celestes.
Fulgurante salió el Algeciras, con el depósito lleno y con un 0-9 de parcial que hacía presagiar lo peor porque precisamente así comenzó el encuentro en tierras gaditanas y al final terminó como el Rosario de la Aurora. Pero la historia está para escribirla y eso hizo el Melilla Baloncesto, darle la vuelta a la tortilla y si en la primera vuelta fueron tres victorias consecutivas y en esta se llevaban tres derrotas, antaño tocaba perder y ayer tocaba ganar. Así fue y por méritos propios.
Un partido muy trabado donde los melillenses tardaron mucho en entrar en juego. Algeciras con Cepsa de gasolina y Melilla con gasoil que es más barato hasta el punto de no conseguir su primera canasta hasta los 335 de juego cuando ya iban 0-9, para llegar a la última curva en un puño -71-69 a 19 segundos del final-, pero donde los nervios dejaron paso a la frialdad que se echó de menos en León.
La calidad en pista era inmensa, de todos se esperaba algo y curiosamente, ante un equipo con el MVP de la liga y el veterano Marvin Alexander, era el rebote ofensivo el que mantenía a los melillenses a flote. A medida que pasaban los minutos las cosas se fueron nivelando porque las estrellas no terminaban de despuntar y el partido se jugaba a trabas para llegar al descanso con 31-30 para los melillenses.
A ese descanso Shaw llegó con su tarjeta en blanco y Brown con sólo dos puntos, mientras Josemi García seguía en su línea y se fue a los vestuarios con 12 puntos aprovechando la fijación de su rival en los dos americanos melillenses.
Por parte de los algecireños, las incomodidades en el ataque también hicieron su mella y Stacey -bien defendido por Josemi- sólo hizo cuatro puntos, mientras Aaron Swinson se quedó en 6.
Eso era el preludio de lo que iba a pasar en la segunda mitad. El partido se fue haciendo durísimo y la claridad en los ataques difuminándose aunque ya había duelos espectaculares como el de Brown con Stacey que ganó el algecireño con mucha diferencia, pero a falta de ataque, izquierdo mandó defensa, los melillenses apretaron los dientes y las cosas les fueron mejor hasta el punto de marcharse en el marcador hasta el 46-40 y coger un colchón de puntos interesante para afrontar el resto del encuentro.
Ese tercer cuarto finalizó con 50-45 para los melillenses.
Ya en el tramo final, Fisac intentó todo lo que pudo para cambiar una dinámica que veía claramente en contra. Dispuso una zona 2-3 rota enseguida por un mate de Lluis Martínez para después alardear con el tiro exterior donde hasta Van Paassen la metió de seis metros.
Los algecireños estaban recibiendo su misma medicina y Fisac, no tuvo otra que jugar con 4 pequeños para presionar y robar balones porque los melillenses se habían ido a los 10 puntos de diferencia (62-52 a 232 del final).
La disposición táctica tuvo su recompensa porque aunque no se robaban muchos balones sí que había mucha versatilidad en el tiro. un tiro que machacaron hasta la saciedad Stacey, Alonso y Juanma Ruiz con sendos triples, pero que sólo sirvió para acercarse a dos puntos a 19 segundos del final (71-69) pero justo en ese momento se les acabó la gasolina y sucumbieron por 74-70 merced al acierto de los melillenses en los tiros libres.
Francis Aguilera.