RESULTADO: ULLA OIL ROSALÍA 66 LEÓN CAJA ESPAÑA 71

ULLA OIL ROSALÍA: Lolo Castro (11), Boccia (22), Koke (8), Valentine (4), Wideman (16) —cinco inicial— Mena (1) y Real (4).

LEÓN CAJA ESPAÑA: Larragán (8), Brown (19), Julio González (14), Jorge García (3) y Tchiloemba (16) —cinco inicial— Evans (2), Sony Vázquez (7), Llorente (2) y Ferrer (0).

PARCIALES: 19-19; 23-18; 15-13; 9-22.

CRÓNICA

Muy poco necesitó hacer de bueno el León en su visita a Santiago para llevarse la victoria final. Los locales de nuevo encontraron en su mal último cuarto la justificación a su derrota a pesar de que hasta ese momento se habían mostrado superiores aprovechando los malos porcentajes de tiro de los leoneses.

Bajo la batuta de Lolo Castro, el acierto de Boccia y el poderío interior de Wideman bastaron para que los santiagueses campasen a sus anchas por la pista. El León no daba muestras de del poderío que se le presuponía y su desacierto en ataque era una constante en su juego.

Lo peor para los locales era que la ventaja no superaba en ningún momento los 10 puntos y el partido siempre estuvo muy abierto. Con el lógico temor de un mal cuarto llegaron los de Díaz al descanso (42-37), temores que se confirmarían al final.

Wideman seguían siendo el gran baluarte local mientras Tchiloemba y Brown comenzaron a tomar las riendas de los visitantes tras el descanso. Así poco a poco los leoneses consiguieron superar los 7 puntos de desventaja con los que llegaron al último cuarto (57-50) y las dudas empezaron a aflorar en los locales.

Los minutos pasaban y el bloque en los jugadores locales se repetía una vez más. Simplemente con el acierto de Brown, que llevó el ataque de su equipo en el tramo decisivo, el León consiguió una victoria muy importante de cara al play off pero que deja dudas sobre su rendimiento colectivo hasta el punto de que en las próximas horas puede llegar un fichaje a las filas de Salvo.

LA CLAVE: El acierto de Brown y Tchiloemba tras el descanso.

EL MEJOR: Brown que superó los 2 puntos con los que llegó al descanso para cargarse a sus espaldas el juego de ataque de su equipo en el tramo decisivo.