CIUDAD DE HUELVA 103 MELILLA 98
HUELVA: Vickery (5), Burgos (16), Rojas (9), Óscar Rodríguez (26), Stuckey (16) -cinco inicial-, David Fernández (9), Antonio Gómez (5) y Doblado (17).
MELILLA: Harris (33), Schutte (11), Juanma Rodríguez (13), Quique López (14), Michael Wilson (17) -cinco inicial-, Narros (8), Dani López (2), Torrubia (0) y Considine (0).
Reza el dicho que lo que no puede ser no puede ser y además es imposible. Los múltiples contratiempos sufridos por el Ciudad de Huelva a lo largo de la semana, agravados a última hora por la lesión de Javi Montaner, colocaban a los onubeneses en clara inferioridad en vísperas de su encuentro ante el Melilla.
Pues bien, visto lo visto anoche en el Palacio de los Deportes, este Ciudad de Huelva es capaz de lograr lo imposible. Con un equipo mermado en sus efectivos (bajas de Camacho, Ávila y Montaner), con la peor actuación que se le recuerda a Joey Vickery (sólo 5 puntos), con Benito Doblado recién llegado (apenas tres entrenamientos) y con la mejor versión de Tony Harris (33 puntos y 5 triples) enfrente, los de Antonio Bioque sacaron a relucir su mayor carácter para alzarse con un épico triunfo en un partido de infarto que necesitó del tiempo suplementario para su resolución.
Durante la primera mitad, Melilla ejerció el mando del choque con suficiencia. De la mano de Harris, que inició su particular exhibición anotando 14 puntos en el primer cuarto, los norteafricanos fueron adquiriendo ventajas cada vez más sólidas hasta alcanzar una máxima renta de nueve tantos (24-33 en los albores del segundo cuarto). Vickery estaba fuera del partido y los onubenses sobrevivían a duras penas gracias a la aportación del triángulo Burgos-Óscar Rodríguez-Stuckey. Pero sería una falta antideportiva de Harris sobre Antonio Gómez al filo del descanso, la que permitiría a los locales recortar las diferencias (41-47 en el intermedio).
En la reanudación, Ciudad de Huelva continuó con la remontada. Con un Óscar Rodríguez espectacular (26 puntos, 10 rebotes y 3 tapones) los onubenses conseguían adelantarse por primera vez en todo el encuentro (57-55 mediado el tercer cuarto). Doblado estrenó su casillero anotador como jugador del Ciudad con un triple y, poco después, ocho puntos de carrerilla del escolta sevillano posibilitaban a los locales mantener su exigua ventaja (67-66 a la conclusión del tercer parcial).
Las alternativas prosiguieron a lo largo y ancho del cuarto periodo, entrándose en el último minuto con todo por decidir (86-86). Harris con un estratosférico lanzamiento desde nueve metros encontraba cumplida respuesta en el tercer triple de Doblado, pero dos tiros libres del base norteamericano situaban en franquía a Melilla (89-91) a falta de 6 segundos. Vickery erró en su penetración pero David Fernández enmendó el fallo del canadiense con un palmeo sobre la bocina que llevaba el júbilo a las gradas y el duelo a la prórroga.
En el tiempo extra, el único triple de Vickery y una nueva canasta de Óscar Rodríguez reportaron a los de Bioque una ventaja de salida (96-91) que sabrían mantener hasta el final gracias al aplomo en los tiros libres de Burgos y David Fernández.
LA CLAVE: El palmeo de David Fernández en la última jugada del tiempo reglamentario. Con su acción, el pívot bilbaíno forzó una prórroga en la que los onubenses por el factor psicológico-ambiental y por las eliminaciones de Juanma Rodríguez y Quique López tenían las de ganar.
LA FIGURA: Es el mejor cuatro de la liga cuando quiere, y ante Melilla, Óscar Rodríguez quiso. Fue el máximo anotador del partido (Harris aparte), el máximo reboteador, el máximo taponador y el más valorado.