Parece un intercambio pero realmente no lo es. Ni mucho menos simplemente que las circunstancias de mercado han dictaminado que Plasencia y La Palma vean como uno de sus jugadores se va al rival.

En el caso del Plasencia, el interés por Javier Simón venía de lejos y más después de la buena temporada que éste realizó en La Palma. La necesidad de construir una plantilla nueva y de garantías está haciendo trabajar a destajo a los de Dani García que sin embargo parece que vuelven a encauzar un proyecto ilusionante.

Por su parte La Palma ha conseguido la contratación de Diego Ferrero un alero que llegó a Plasencia procedente del Joventut y que espera seguir contando con minutos para continuar con su proyección como jugador.