Todavía colea el polémico final del pasado viernes en Mahón, donde el Ourense consiguió la victoria con una espectacular canasta de Kuisma sobre la bocina en tan sólo 8 décimas.
El conjunto balear firmó el acta del partido bajo protesta y ahora ha mandado el vídeo y un recurso a la Federación para intentar que se repitan las últimas 8 décimas.
No parece que el recurso tenga muchos visos de prosperar ya que la canasta aunque parezca imposible pueda que esté dentro del tiempo, además de que los árbitros del partido la dieron como buena. Lo curioso del caso es que esta última jugada viene precedida de un claro error de la mesa.
Menorca dispone de una última posesión de 24 segundos que consume tras una infracción de Salva Camps cuando quedaban 28 segundos de partido. Lo extraño es que después de que suena la bocina de los 24 segundos tan sólo queden 8 décimas de juego.
En cualquier caso será la Federación la que decida que se debe hacer con este final de partido tan polémico.