Lucentum ha fichado al escolta Carlos Cazorla, que se ha convertido en el
primer refuerzo para el perímetro de los alicantinos. El canario regresa
así a las órdenes de Óscar Quintana, con el que ha sido jugador durante
cinco temporadas: cuatro en Fuenlabrada y una en el Caja San Fernando. El
técnico lucentino ha mantenido diferentes conversaciones con el jugador
nacional y tanto el conocimiento mutuo que tienen el uno del otro así como
la ambición y ganas demostradas por el escolta han sido clave para cerrar
la operación.

Cazorla, ejemplo de sacrificio y capacidad defensiva donde los haya,
procede del Vive Menorca, con el que disputó la pasada campaña 30
partidos, que le hicieron superar la marca de los 400 encuentros
disputados en la ACB y los 8.000 minutos.

El escolta se inició en las categorías inferiores del TAU, con el que
debutó en ACB en la temporada 93-94 con tan sólo 16 años. No obstante, no
fue hasta la campaña 95-96 cuando el jugador de Las Palmas se hizo con un
hueco en el primer equipo baskonista, en el que jugó tres temporadas
consecutivas, logrando una Copa de Europa y un subcampeonato de la ACB.
Ya en la temporada 98-99, Cazorla recaló en el Fuenlabrada, donde Óscar
Quintana era el primer entrenador. Sus pasos se mantuvieron unidos durante
cuatro campañas, en las que Cazorla, además de labrarse un importante
nombre en la ACB, logró diversos éxitos internacionales, como una Medalla
de Bronce en la Universiada de 1999 o la Medalla de Oro en los Juegos del
Mediterráneo disputados en Túnez en el año 2001.

Tras su paso por el equipo madrileño, el nuevo jugador lucentino fichó por
el Caja San Fernando, en el que jugó durante cinco temporadas
consecutivas, antes de verse obligado a dejar el equipo por lesión el
abril de 2007. En el equipo cajista también coincidió con Óscar Quintana
durante unos meses.

Ahora, a sus 31 años, afronta el reto de devolver a un equipo a la mejor
liga europea, tras un año complicado en Menorca, como él mismo reconoce:
“Esta última temporada ha sido un tanto complicada para mí y tengo ganas
de reencontrarme conmigo mismo y volver a sentirme importante en un
proyecto”.

Para Cazorla, el hecho de que el técnico sea Óscar Quintana ha sido
decisivo: “Óscar siempre ha sacado de mí el mejor rendimiento y ha sido un
valor importante para que me decidiera por fichar en Alicante”. Respecto
al proyecto que está conformando Lucentum, Cazorla no tiene dudas: “Me
gusta mucho. Si todo se cumple se juntará un grupo de trabajadores muy
importante en el que todos tenemos la ilusión y las ganas de devolver al
equipo a la ACB”.

Nota de prensa ofrecida por Lucentum Alicante.