Durante la entrevista, Mar Rovira no para de saludar a miembros del UB Barça, donde jugó la temporada 2004-2005. Reconoce que formar parte de aquella plantilla con Laia Palau, Isa Sánchez, Tracy Reid o Razza Mujanovic (Brcaninovic) fue una inversión para aprender". Y lo hizo con 24 años, "cuando pocas jugadoras están dispuestas a arriesgar". Ahora la base catalana es una de las referentes del Acis Incosa León, en el que lucha por clasificarse "cuanto antes" para el playoff. Algo que ve imposible "si no hay un compromiso firme".
Lleváis una temporada muy rara: ganáis mucho, perdéis demasiado No parecéis un equipo sólido.
No lo somos. Somos un grupo poco fiable, quizás porque no hay química, una buena conexión entre las jugadores exteriores y las interiores. Ni estamos muy compenetradas ni, a veces, tenemos todas la misma intensidad. Eso sí, si nos clasificamos para los playoff nos pueden salir dos partidos seguidos muy buenos y liarla Pero como somos tan irregulares, nunca se sabe.
Hoy, más que otros días, la lucha por el rebote era clave. El UB Barça es el segundo mejor equipo en este aspecto, y ha cogido 15 capturas más.
No conseguimos ganar a ningún equipo que tenga mucha capacidad reboteadora. Tenemos un gran contraataque y contra esas plantillas no podemos hacer casi ninguno. Y si no podemos jugar como mejor sabemos, no defendemos bien y no cogemos segundos rebotes
Habéis cogido segundos rebotes ofensivos, pero los habéis fallado.
Sí, porque ya es estrés mental. Tienes que meterla a la primera porque sabes que la mayoría de las veces no vas a recuperar el balón y, si lo coges, erras porque no te lo esperabas. O porque físicamente no estás bien. No somos ni tan malas como hoy ni tan buenas como cuando ganamos tantos partidos seguidos. Somos un equipo de media tabla que, si nos unimos, podemos ser muy buenas. Aunque si no lo hacemos, como ante el UB Barça, podemos llegar a ser muy mediocres.
Estás siendo muy crítica.
Estoy hablando por las sensaciones del partido de hoy. Estoy caliente. Vamos a ver si podemos remontar, trabajar. Si no hay un compromiso firme, no haremos nada.
Además de la derrota también ha sido bastante doloroso perder el basket average (79-72 en la ida) de esta forma.
Al final ni pensábamos en eso, sino en que se acabara el partido. A cierta edad no tienes ganas de hacer el ridículo.
Me ha recordado algo a la primera visita del Acis a Barcelona (110-47). Otra gran paliza, aunque entonces el Acis era un recién ascendido.
Fue humillante, pero en aquellos momentos no podíamos dar mucho más. Ahora sí que tenemos calidad, sobre todo exterior, y que no se pueda plasmar es lo que te da pena. A veces haces esfuerzo extra, como al final, pero no te preguntas para qué. No recibes la recompensa.
¿Te ha sorprendido que el entrenador (Miguel Ángel Estrada) te cambiara en el segundo cuarto cuando en el primero lo habías hecho bastante bien?
De estos temas no quiero hablar. No es mi misión. Por respeto a la compañera que sale por mí (Marta Ginés), no voy a entrar en estas cosas. Es mi filosofía.
A pesar de esta derrota, con 12-11, estáis cerca de clasificaros para el playoff.
No sé si nos serviría ganando uno de los cuatro partidos que nos quedan. Porque, claro, si hay que lograr dos victorias, tal y como están las cosas Vamos a Valencia, viene Rivas, jugaremos el último en Canarias, y no sé si se jugarán algo. Nuestro objetivo era no quedar octavas, porque contra el Ros no tienes nada que hacer. Buscábamos la quinta o sexta posición. Tenemos que mejorar y clasificarnos cuanto antes, no vaya a ser que tengamos un susto.
Un susto como vuestro inicio: 4 triunfos en 11 partidos. ¿Qué fallaba?
Las jugadoras que vinieron del Mundial no jugaron mucho. Hicieron la pretemporada en agosto y se pasaron casi todo el mes de septiembre sin jugar. Nuestra preparación fue bastante floja, porque sólo éramos seis miembros del equipo. Cuando todas estábamos en forma, ya habían pasado varias jornadas de Liga. Además, por las características de las jugadoras nos ha costado acoplarnos. E incluso a veces no conectamos, porque quizás la visión de unas no corresponde con la de otras.
¿Hay muchas jugadoras anárquicas y cada una va por su lado?
En días como hoy, como base, me vuelvo loca. Por ejemplo, en línea exterior juego mucho con Isa Sánchez y Tracy Reid. Con ellas es muy fácil el baloncesto: son inteligentes, saben leer. Es maravilloso. Las tres nos entendemos a la perfección. Con la línea interior no tenemos esa conexión. Por las circunstancias, es muy difícil intentar dirigir este equipo e intentar que sea consistente.
Tampoco las seis caras nuevas se acoplaron bien al principio.
Algunas venían de la selección. Necesitamos una filosofía de juego más clara. No es bueno tener que improvisar tanto. A mí me gusta más que la gente sepa lo que tenga que hacer, pero reconozco que determinadas jugadoras pueden brillar más si son anárquicas.
Es más fácil echar al entrenador que a las jugadoras. Dije en su momento que si no estaban contentos con mi rendimiento no tenía inconveniente en irme. La directiva nunca nos presiona y quizás por eso confiaron en él.
En el Cerro del Telégrafo empezó la gran reacción: victoria apurada ante Rivas, y llegaron seis triunfos más consecutivos. ¿Cuál fue el secreto de la metamorfosis?
En aquel partido todas lo hicimos muy bien. A partir de aquel momento aparcamos la presión. También coincidió, y ya era hora, que nuestros rivales no estaban demasiado bien. Contra el Arranz Jopisa Burgos hicimos el encuentro del año: muy consistentes, ordenadas, sabiendo qué teníamos que hacer. Y les ganamos por uno.
También es raro que no viniese algún refuerzo.
No sé qué presupuesto tiene el club. El entrenador, el cuerpo técnico y la directiva sabrán si hay que fichar o no. He visto equipos que iban muy bien, como Hondarribia, que fichan y vuelven a fichar. En esta Liga pasa de todo.
Isa Sánchez está haciendo una gran temporada. Quizás la mejor en LF.
No estoy de acuerdo. Sí es verdad que ha tenido tres o cuatro partidos
Combina grandes actuaciones con otras más discretas.
Yo prefiero a la jugadora con la que coincidí aquí, en el UB Barça. Aquella Isa Sánchez no te hacía nunca 30 puntos, pero cada partido anotaba 20. Era muy regular.
Según las estadísticas de la FEB, lleva 7 mates.
Sí, en cada entreno hace siete. Es cierto, y además con tirabuzón. Y luego hace el pase torero a la grada.
También básica está siendo la aportación de Marta Ginés, que ha pasado de ser un recambio efímero a tener minutos de calidad.
En los últimos dos o tres partidos el entrenador le está dando más protagonismo y lo está haciendo bien. Poquito a poquito tiene que coger experiencia. Es una jugadora que tiene mucha clase, como María Revuelto.
Pero Sánchez y Tracy Reid siguen siendo las líderes de este equipo.
Sin duda. La lástima es que nuestras jugadoras más determinantes sean exteriores. Tenemos que hacer mucho daño bajo el aro. El año pasado Luci Pascua cogía algunos partidos 14 o 15 rebotes y defendía a la 5 del rival muy bien. Esta temporada ha tenido muchas lesiones y se ha notado su ausencia. Ella no veía su trabajo, pero en 2006 nos ayudó mucho. Es como la base, que hace un trabajo casi anónimo, que no se ve.
Como base y capitana, ¿qué intentas aportar a tus compañeras?
Es complicado dar consejos. No tengo que meter 20 puntos, mi función es dirigir. A veces te enfadas.
Os conocisteis aquí, en Barcelona, en el UB Barça, donde quedásteis subcampeonas de Liga. No pudisteis con el Ros (además Copa y Supercopa). ¿El actual es tan eficaz?
Ya están clasificadas para la Final Four, así que son mejores que aquel año. Han ganado la Copa y la Supercopa, y se llevarán la Liga. Les pongo presión, pero es que no tendrá mérito que lo consigan. Si se meten en la final de la Euroliga, será genial. Incluso yendo siempre bien, cambiaron de entrenador.
Desde el club se dijo que la dinámica no era positiva.
El mundo del baloncesto es imprevisible.
¿Cómo recuerdas tu temporada en el UB?
Con Carme Lluveras se entrena muy fuerte. Teníamos una relación de amor-odio en la pista. Fuera nos llevábamos muy bien. La experiencia me sirvió para subir un peldaño de calidad. Llevo tres años a un nivel bastante decente. Jugar aquí fue una maravilla: todo el mundo sabía qué tenía que hacer, cómo colocarse. Aprendí muchísimo. Al final del año tuve una lesión que me martirizó. Para mí fue como una inversión. Como una apuesta que con 28 poca gente hace. Y me hice muy amiga de Isa y Tracy, así que gané tanto a nivel deportivo como personal.
Lo peor de aquella temporada, además de la eliminación de la Euroliga por centésimas o milésimas
Una pena, una vergüenza.
Muchos criticaron que no hubiésemos intervenido. La gente habla mucho cuando no sabe qué está pasando. Es triste que se tengan que acordar de nosotras por algo externo, morboso. Dejamos claro desde el primer momento que no íbamos a hacer ningún tipo de declaración. Sí que hablamos, por ejemplo, después del 11-M en Madrid. Comunicamos que iríamos a la manifestación para quejarnos por lo que había hecho el Partido Popular en ese momento. Sí que nos posicionamos entonces. Carme (Lluveras) estuvo de acuerdo. Sin embargo, en el Caso Brcaninovic callamos. Los medios no trataron el asunto con el respeto que debiera.
Si hubieseis dicho algo, más de uno hubiese manipulado vuestras palabras.
Exacto.
¿Viste el All Star de Valencia?
No, porque estábamos entrenando.
Pareció que tuviesen prisa por acabar: premio de MVP europea a Stepanova en el primer cuarto, concurso de triples en el descanso
Estos son los eventos que tienen acercar al público a este deporte. Hay que ir a EE UU y ver cómo hacen allí el show-business (negocio-espectáculo) y copiarles. Si aplicamos su modelo el éxito estará asegurado.
En tu ficha en la FEB se deduce que debutaste en la Liga Femenina con 24 años. ¿Por qué tardaste tanto?
No, no. Con 17. Quizás antes no contabilizan los datos, que ya soy muy mayor (se ríe). Llevo 15 años, aunque estuve tres o cuatro años subiendo equipos en LF-2. Me quedé aquí en Barcelona para acabar la carrera (psicología). Ahora estoy con la tesis. A ver si la acabo ya.
De 1998 a 2004 no pasaste más de una temporada en un club: Ciutat dInca, Santa Rosa, BF LHospitalet ¿Te gusta ser nómada?
Sí. De hecho, tres años en León es un récord. Nunca me lo hubiese imaginado. Supongo que es porque te vas haciendo más mayor, estás más tranquila y a gusto. Pero a mí me gusta conocer gente nueva, entrenadores nuevos, compañeras. Experiencias.
Llegaste en 2004, cuando era un equipo recién ascendido. Fuiste el fichaje estrella de un proyecto que estaba empezando, de una ilusión.
Sí, salió bien. El primer año, el más complicado, conseguimos mantenernos. Y a partir de entonces el club ha pensado en grande y ha logrado formar un equipo competitivo.
¿Cómo ha ido creciendo el equipo?
En el segundo año las contrataciones de Isa Sánchez y Tracy Reid fueron para mí un regalo del cielo. Era casi repetir el año del UB.
Tuviste un protagonismo allí que no tuviste aquí, donde estaba Laia Palau.
Bueno, claro, con Laia Simplemente entrenaba al 100% para que ella estuviese en forma. Sé siempre dónde estoy. Acepto los roles que me tocan en cada equipo.
Recuerdo una campaña simpática del Acis para captar socios. Enviaron varios mensajes de móvil. ¿Cómo vivías todas iniciativas?
Es verdad (se ríe). Incluso también un coche, con un megáfono, recorrió León anunciando la Copa de la Reina. Está bien que la gente sea imaginativa e intente apoyar al baloncesto femenino. Porque, ya ves el ambiente que hay hoy. Queda poco para el Barça-Madrid. El fútbol se lo come todo.
Aunque en León no os podéis quejar mucho.
La verdad es que tenemos buena entrada. No es como en Salamanca, que aquello es increíble, pero está yendo bastante gente. Nos conocen y nos apoyan mucho.
Y los medios también. Viajan con vosotras a Europa
El señor César (F. Buitrón, periodista de El Mundo/La Crónica de León) nos sigue mucho con nosotras. Se portan muy bien. León, quizás porque no hay fútbol en la élite, está muy abierta a otros deportes. Es ciudad de balonmano, de baloncesto.
Este año tiras menos (56 tiros de campo), pero has mejorado en la concentración, pierdes los mismos balones que recuperas, 16. Para una base es fundamental.
No lo sabía. No soy de meter mucho. Intento meter un triple cuando el equipo está atascado, prefiero hacer jugar a las demás, que el equipo esté tranquilo.
PREPARADOS... LISTOS... YA
En mi tiempo libre Leo y duermo.
Me gusta que me digan Las cosas a la cara.
Confieso que Me gustan las series americanas como Perdidos o Anatomía de Grey.
No soporto que La gente critique sin saber.
La música me Relaja y es fundamental para mi vida.
Mi lema... Perseverancia.
Mi quinteto de la LF Laia Palau, Isa Sánchez, Tracy Reid, Delisha Milton y Érika De Souza.
Empecé a jugar a básket por... Porque no había fútbol. Yo iba para Guardiola.
Mi anécdota más graciosa... Algún pelotazo en la cara, algo así. No, en un partido en Zaragoza se me desabrochó el sujetador y tuve que ir al árbitro a pedir tiempo. Fui corriendo al pasillo para abrocharme.
Mi ritual antes del partido. Muchos. Siempre como lo mismo. Tengo que ponerme los mismos calcetines y el mismo sujetador en una temporada. Cuando acaba el año los cambio. Cada año cambio la rutina de estiramientos, que repetiré toda una campaña.
Mis ídolos son... Marion Jones, a pesar de sus sospechas, e Yelena Isinbayeva.
Mi mejor recuerdo Tengo muchos, gracias a Dios.
El peor... No me quiero acordar.
Una persona Muchas.
Mi lugar... Una zona de la costa del Garraf.
Mi ciudad favorita Barcelona.
Mi deseo eterno... No me gusta lo eterno. Quiero ser feliz.
Mi gran sueño Lo mismo, ser feliz.