El técnico vallisoletano comenzó la temporada en el Grupo Capitol Valladolid tras lograr la permanencia en la ACB la campaña pasada; pero el balance victorias-derrotas acumulado en el inicio de la liga (1-8) precipitó su cese y la posterior contratación de Javier Imbroda.
En la rueda de prensa, comenzó elogiando el trabajo de Josep María Izquierdo y de Chete Pazo:
“No quiero empezar sin mandar todo mi respeto al técnico que comenzó el trabajo, Josep María Izquierdo, y al cometido realizado este último mes por Chete Pazo. Creo que es de justicia”
Con motivo de su retorno y de la rápida incorporación a una nueva (aunque ya conocida) entidad señaló: “Es una sensación extraña, parece que no ha pasado el tiempo. Estoy muy feliz y contento, me siento un hombre y un profesional privilegiado. Me ‘cortaron’ en Valladolid y al día siguiente ya tenía el ofrecimiento de regresar a Lugo; pedí un tiempo para organizar mis ideas y ahora estoy siendo presentado”.
También se refirió al decepcionante comienzo de temporada que el CB Breogán ha tenido:
“El Breogán está sufriendo el síndrome del recién descendido. Yo no soy ningún mago, vengo para aportar mi granito de arena con mi trabajo y así intentar lograr los objetivos marcados y devolver al club y a la ciudad a la liga ACB; y para eso quiero ir partido a partido. Mirar más allá es una locura”
Así como a la más reciente actualidad que rodea a la entidad gallega (llegada a prueba de Quentin Smith y la solicitud de salida de Kaspars Cipruss):
“El proceso de reforma se inicia con el cambio de Malik Dixon por Bobby Brannen. Creo que el equipo necesita una mejora física en su juego interior. Quentin Smith reúne esas características, pero primero tiene que resolverse su situación actual y debe demostrar en la pista que puede aportar esa dureza y ese físico”
“El Breogán tiene que estar siempre abierto a mejorar el equipo. Pero tengo un máximo respeto por los jugadores que hay ahora. Todos tienen una gran oportunidad de demostrar a un entrenador nuevo que quieren formar parte de este club; pero el que no quiera seguir tiene la puerta abierta”