En la tarde del pasado lunes, los aficionados al mundo de la canasta de Melilla permanecían atentos a las explicaciones que Paco Olmos daría a los aficionados a través de una rueda de prensa de despedida en un hotel de la ciudad y donde argumentaría los motivos de su marcha.

El técnico valenciano se despidió del club en el que ha permanecido los últimos tres años, tiempo en el que ha llevado al conjunto de la Ciudad Autónoma a lo más alto del baloncesto. Paco, que llegó a Melilla después de haber sido Campeón de Uleb con Pamesa y de haber entrenado a Aguas de Calpe, comunicó a los aficionados que se marcha de la Ciudad no por temas económicos sino familiares: "No me marcho porque tenga una mejor oferta económica y quiero lo mejor para este club pero como profesional tengo que tomar decisiones que en lo emocional son complicadas”

Finalmente, el valenciano explicó que se encuentran muy avanzadas las negociaciones con otro club (desvinculado recientemente de Rayet Guadalajara y que ya fuera ayudante suyo en Melilla y Calpe.

Sobre el tema del base, Olmos declaró: “No me corresponde porque sería no digno de un profesional y porque apreció mucho a los que dirigen el Melilla Baloncesto, entrar en las vicisitudes del club, su respetable y seguramente acertadas decisiones del club, unas decisiones tan legítimas y entendibles que me han hecho honestamente decidir en estas últimas horas, Paco Olmos no le va a quitar a Melilla Baloncesto lo mucho que el Melilla Baloncesto le ha dado a Paco Olmos en su trayectoria profesional.

Finalmente el entrenador Valenciano afirmó que su deseo es volver alguna vez a entrenar al equipo en el futuro.
 

Elaborado con la colaboración de Moha Ahmed, redactor independiente.