El Cantabria Lobos endosó una nueva derrota al Zaragoza y también como sucedió en el anterior partido, en los instantes finales.
La floja defensa zaragozana hizo que los de Dani García camparan a sus anchas por el parquet y pronto abrieran brecha en el marcador.

Con la dirección de Uriz, el acierto de Carlos Martínez y el poderío del dúo Hill, en especial Keith Hill, el Zaragoza logró igualar el partido antes del descanso.

Pero en cuento Oliete dió descanso a la columna vertebral de su equipo, véase Uriz, Otis, Keith y Carlos Martínez, al equipo volvió a vérsele los problemas de anteriores partidos.

Tan sólo de nuevo el acierto de Carlos Martínez permitió al Zaragoza forzar una prórroga en el Cantabria se mostró más rodado y con mayor acierto y se llevó la victoria (86-84).

En los cántabros destacó el poder interior de Young y la mejor defensa y juego de conjunto en un equipo que parece más rodado de cara al inicio de liga.