Para conocer las claves de esta racha de victorias, nos tendríamos que remontar unos meses atrás, nos situamos en Navidad, el Gandia Básquet es cuarto en la clasificación general, empatado a victorias con el quinto y el sexto clasificado y se sitúa ya a 2 victorias de Huesca, Autocid Burgos y Sabadell, que parecen los equipos mas fuertes de la competición y los que según todos los pronósticos, poco a poco van a abrir hueco en la clasificación, aparentemente todo parece indicar que el Gandia luchara por asegurarse una plaza en play-off situándose entre los puestos quinto y octavo, haciendo olvidar la decepción de la temporada anterior en la que el equipo quedo fuera de la lucha por el soñado ascenso en ese momento salta la noticia, Shelton Colwell, pívot americano que estaba dando un muy buen rendimiento, convirtiéndoos en la máxima referencia ofensiva del equipo, no esta dispuesto a seguir en Gandia a pesar de que parecía plenamente integrado en el club y la ciudad, y con la excusa de una extraña ¿lesión? fuerza su baja en el club, que salvo asegurarse sus derechos, poco más puede hacer y aquí comienza la historia, porque si a la baja del Shelton unimos la plaga de lesiones que sufre el equipo, que lo deja prácticamente en cuadro en numerosos partidos, la lógica en este tipo de situaciones hubiera dictado que inevitablemente el equipo se tendría que haber venido abajo como tantas y tantas veces hemos vivido en el mundo del deporte en situaciones similares.
Todo eran circunstancias adversas que hacían muy difícil tomar las decisiones mas acertadas, con la baja de su mejor anotador y la gran cantidad de lesionados que había en la plantilla cualquier otro club en la misma situación se hubiera vuelto loco buscando un americano a la desesperada, incluso aunque no se hubiera ajustado a las necesidades del equipo y como tantas veces hemos visto, su llegada en la mayoría de los casos hubiera solucionado poco o nada, la afición irremediablemente se hubiera puesto nerviosa y el equipo bajado puestos en la clasificación inexorablemente, la sucesión de acontecimientos parecía dejar poco margen para poder salirse de un guión establecido .. Pero para sorpresa de muchos, nada de esto ha sucedió, mas bien todo lo contrario, la directiva y la Dirección deportiva, tuvieron paciencia y apostaron por los jugadores que habían comenzado la temporada, en una decisión que seguro no fue fácil de tomar, ya que tenia aparentemente mas riesgos que ventajas, el equipo respondió sin embargo a esta confianza, desde entonces ha encadenado una racha de 11 victorias consecutivas y se ha convertido en el líder sólido de la competición, practicando además un baloncesto alegre y dinámico, que desde luego no es fácil de ver en estos tiempos donde parece que la defensa es el único camino que proporciona la victoria.
No ha sido fácil precisamente sacar la gran mayoría de partidos adelante, el Gandia Básquet ha ganado 8 de sus partidos por un diferencia menor de 6 puntos, disputando 6 prórrogas, algunos de estos partidos han sido realmente épicos, durante mucho tiempo, quedara grabado en la retina de los que lo pudieron disfrutar en directo, el partido frente al todopoderoso Autocid Burgos de los Smith, Mainoldi , Guatia o Horton, en el que el equipo saca adelante el partido disputando 2 intensas y emocionantes prorrogas con la participación únicamente de 7 jugadores, el mismo numero de jugadores con los que el equipo logra vencer por ejemplo en la difícil pista del Ourense, por citar solo 2 partidos en los que lo mas sencillo hubiera sido arrojar la toalla y en los que sin embargo se opto por lucharlos hasta el final y apelar a la heroica.
Pero por supuesto, no solo de aspectos psicológicos o de motivación vive el equipo, el Gandia Básquet es un equipo tremendamente compensado, cuenta con dos bases Jorge Jiménez y Eric Sánchez que se complementan a la perfección, saben lo que el equipo necesita de ellos en cada momento y en cada circunstancia, no se puede hablar de un titular y un suplente, son dos jugadores que asumen su rol en cada partido independientemente de si tienen que jugar 1 o 40 minutos; en el puesto de alero, jugadores como Víctor Pérez o Rafa Granollers dan un autentico clínic en cada partido de lo que es moverse en una cancha de baloncesto en busca de un buen tiro, su mecánica de tiro debería ser de obligado visionado cuando se enseña estos fundamentos en categorías inferiores de cualquier club, mención aparte merece el único americano del equipo, Zach Morley, uno de esos americanos serios y sobrios, que llegan sin hacer apenas ruido y que seguramente no vaya a acabar ningún partido con 35 puntos, ni vaya a ser el MVP de la semana, pero eso si, garantiza un trabajo continuo y la certeza de que hará en cada partido lo necesario, sea lo que sea, para que el equipo consiga la victoria, sin duda un gran acierto su fichaje; en el juego interior nos entramos a un Héctor Manzano que esta jugando a un nivel altísimo, asumiendo el papel de americano del equipo, difícil encontrar en toda la categoría un jugador nacional con su rendimiento jornada tras jornada, acompañando a Héctor están Juan Llamas y Alberto Rodríguez auténticos maestros en el juego uno contra uno, sus movimientos, bloqueos, tiros, tapones etc. son indispensables para el equipo, además no nos podemos olvidar tampoco de Raúl Matoses dando el 110% de si mismo en los minutos en los que le toca estar en pista, también merecen una mención los jugadores del equipo Junior que ayudan con entusiasmo en los entrenamientos, alguno de ellos incluso ha debutado con el primer equipo, con el consabido regocijo de la afición.