Panathinaikos se impuso al favorito Real Madrid, que parecía imbatible, y se coronó campeón de Europa 13 años después, en un soñado regreso de los griegos en el primer año de Ergin Ataman en el banquillo y cuyo objetivo era devolverlos a lo más alto tras haber sido de los últimos de la tabla el año anterior. El último reto tras conseguir el brillante trofeo es la liga griega, en la que van por buen camino en el inicio de semifinales, aunque también hubo malas noticias.

Juancho Hernangómez recae de sus problemas físicos

El Panathinaikos arrancó con victoria su serie de semifinales de la Basket League griega ante el Aris BC de Salónica, 89-71, que les coloca con un 1-0 y encaminados a la final, donde se enfrentarían a Olympiacos o el Peristeri de Spanoulis, que se ven las caras en la otra serie de estos playoffs, donde los recientes campeones de Euroliga llegan como favoritos al haber sido líderes en la fase regular.

Sin embargo, no todo fueron buenas noticias para Panathinaikos en el partido, pues Juancho Hernangómez habría recaído de sus dolencias físicas en la pantorrilla, tal y como confirmó Ergin Ataman en la rueda de prensa posterior al encuentro, y cuyas molestias están pendientes de pruebas médicas que confirmen su alcance.

De esta forma, el jugador español vuelve a ser duda para el final de temporada con Panathinaikos tras haber sido baja en los playoffs de Euroliga ante Maccabi precisamente por lesión en la pantorrilla, pero también por una reacción en la piel que se pudo observar en su cara y que le llevaron a viajar a España para tratarse.

La baja de Juancho Hernangómez, que solo disputó poco más de dos minutos en este encuentro ante Aris BC, se notó en la pista, pero los suyos acabaron dominando con Kendrick Nunn y Olek Balceroswki como los más destacados en anotación y con Dinos Mitoglou como el más completo con 14 puntos y 5 rebotes firmados.