El Real Madrid ha comenzado la Euroliga 15-16 tal y como comenzó la Liga Endesa el pasado fin de semana: con una derrota. El conjunto madridista no fue capaz de disputarle en ningún momento la victoria al Khimki ruso, presente campeón de la Eurocup y uno de los equipos que mejor se ha reforzado en nuestro continente, incorporando en sus filas a jugadores de la talla de Aleksei Shved y Zoran Dragic, que su suman a los Tyrese Rice, Petteri Koponen, Paul Davis, James Augustine y compañía. El conjunto ruso aprovechó el factor cancha para desplegar un magnífico baloncesto, ayudado por la pasividad defensiva del Real Madrid. Los rebotes ofensivos (15), el buen movimiento de balón y el acierto desde la línea de tres puntos (37%) fueron los aspectos decisivos para que el conjunto dirigido por Rimas Kurtinaitis se llevara la victoria en la jornada inaugural de la Euroliga. El vigente campeón de la Eurocup pasó por encima del campeón de la Euroliga, sin matices. Y como protagonista, un viejo conocido del basket español: Marko Todorovic, que debutó con el Khimki en Euroliga con unos excelentes 15 puntos y 8 rebotes

Inicio desacertado del Real Madrid, que no logró anotar hasta trascurridos casi 3 minutos de partido. Todo lo contrario que el Khimki, que sus primeras tres canastas fueron tres lanzamientos de tres puntos, además supieron buscarle las cosquillas a la defensa blanca cargando de forma muy efectiva el rebote ofensivo. El Real Madrid llegaba a la mitad del primer cuarto con tan solo 6 puntos, dos triples, uno de Rudy Fernández y otro de Sergio Llull. Tyrese Rice y Petteri Koponen ponían la máxima diferencia en el luminoso a favor del conjunto ruso (13-7), pero el Real Madrid acortaba diferencias de la mano de Rudy y Gustavo Ayón (13-10). A partir de ese momento, durante los últimos minutos del primer cuarto, el Khimki logró aumentar su ventaja, culminando su buena actuación en el inicio del partido Aleksei Shved con una bandeja sobre la bocina (21-14).

La ventaja del conjunto moscovita siguió aumentando en los primeros minutos del segundo cuarto (26-16). El cuento siguió igual durante el resto del cuarto, gracias a un superlativo James Augustine, que se aprovechaba de la más que débil defensa de Willy Hernangómez, y a Koponen, el Khimki lograba seguir poniendo tierra de por medio en el marcador, para irse venciendo al descanso por 11 puntos (43-32). El buen movimiento de balón y la intensidad defensiva del conjunto ruso, que anuló el juego del Real Madrid, así como la falta de intensidad defensiva madridista, explicaban la diferencia latente con la que el partido se marchaba al descanso. 

Tras el paso por los vestuarios, el Real Madrid salió enchufado y una canasta de dos puntos y un triple sin oposición de Jonas Maciulis acercaban al conjunto de Pablo Laso a 6 puntos en el marcador, con tan solo un minuto jugado del tercer cuarto (43-37). Kurtinaitis no quería darle ninguna opción de remontada al Real Madrid y paraba el partido con un tiempo muerto, que tuvo el efecto deseado en su equipo, ya que el conjunto ruso respondió con dos triples, de Tyler Honeycutt y de Sergei Monia, para recuperar su ventaja y poner el 49-37 en el marcador a falta de 7:17 minutos.

Rice y Monia aumentaban la ventaja de su equipo ante un Real Madrid inerte en defensa y sin ideas en ataque. El base norteamericano, con un robo de balón espectacular a Sergio Llull ponía a su equipo 15 puntos arriba (58-46) a falta de 4:30 por jugar, hecho que propició un tiempo muerto de Pablo Laso. La siguiente acción ofensiva del Real Madrid fue sancionada con una dudosa falta en ataque en un bloqueo de Ayón, provocando el enfado del entrenador vitoriano. Y además, en la siguiente jugada, Laso, tras una falta no pitada a Davis, fue sancionado con una falta técnica por sus airadas protestas al trío arbitral. En los últimos minutos del cuarto, siguió la misma tendencia y tras un intercambio de golpes errático entre ambos equipos, el conjunto ruso seguía mandando firmemente en el juego y eso se reflejaba en el marcador: 61-49 al fin del tercer cuarto.

Con el comienzo del cuarto final, el Real Madrid cambió su cara y gracias a 5 puntos consecutivos de Llull, se pusieron a 8 puntos en el marcador a falta de casi 9 minutos por jugarse. Sin embargo, muy poco le duraría la racha al conjunto blanco, ya que dos tiros libres de Todorovic tras una falta antideportiva de Andrés Nocioni, un lanzamiento de media distancia y un triple de Shved hacían que el conjunto ruso rearfirmara su ventaja en el luminoso, colocándose 14 puntos arriba (68-54). Todorovic encontraba muchas segundas oportunidades debido a la falta de intesidad del Real Madrid a la hora de cerrar el rebote, dejando en bandeja dos canastas consecutivas del ala-pívot montenegrino cerca del aro, que ponía el 72-56 en el marcador a falta de 5:50 por jugarse.

El partido llegaría a su fin sin que el Real Madrid fuera capaz de reaccionar y ni siquiera fuera capaz de disminuir la ventaja de la barrera psicológica de los 10 puntos. Las canastas de Llull y Ayón eran rápidamente respondidas por un Khimki entonado y concentrado en no ceder ni un solo punto de su colchón, y en el que todos sus integrantes aportaban. Dos tiros de media distancia de Davis ponían el 84-68 a falta de 1:20 por jugar y dejaba el partido finiquitado, si no lo estaba ya. Dos tiros libres de Llull pondrían el 84-70 definitivo con el que se llegó al final del partido en el Basketball Center of Moscow Region.

youtube://v/9-tvlkBRjf8